You don't say nothing.

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Vivimos en una sociedad difícil, no te debes de callar pero tampoco puedes decir nada, no puedes preguntar pero tampoco quedarte con la duda, no puedes responder pero tienes que dar tu opinión, dicen, o más bien digo, que hagas lo que hagas, para no preocupar a los demás, siempre, dentro de cada cosa que hagas, los preocuparás, literalmente te dicen que cambies, pero que después no te reconocerán, ¿Qué demonios hacemos? simplemente nada.

★★★

Me encontraba en medio de la nada, no exactamente en donde llegas y lo único que ves son llanuras con escasos arboles y ni una gota de internet, no, yo me encontraba dentro de mi nada, dentro de mi cuarto, recostado, dejando que mi teléfono vibrara con cada mensaje o notificación (que era mas probable) que llegaba a mi aparato electrónico que con desesperación deseaba cambiar de inmediato y borrar todo despreciable archivo.

Los mensajes (que de seguro eran notificaciones de juegos), no me interesaba en revisar, estaba seguro de que no era nada importante, durante la ultima semana, ninguno absolutamente ninguno de mis mensajes eran importantes, para nada y digo durante porque antes, al menos tenían algo que decir, como por ejemplo, alguno que otro meme que mandaban Rukia o Renji, pero ahora nada, se desconectaron por completo, no me interesaba que estaba pasando entre ellos o lo que hacían, de solo pensarlo se me erizaba la piel; y Orihime no tenia por que mandarme algún mensaje ya que literalmente compartía mi vida con ella y era casi una hermana, y digo casi no porque no fuera mi hermana de sangre o porque simplemente la quisiera como una hermana, de hecho, era porque la quería, pero no como hermana, ni como amiga, la quería como alguien a quien amar, porque claramente... me... gustaba... o... la amaba... ¿Qué significa cada una y cuales son sus diferencias?... tengo la fuente de información mas grande del mundo en una pequeña caja, podría preguntar en cualquier momento cual es cada una... pero es estúpido ¿no?.

No pensaba mandar un mensaje diciendo, "oigan chicos, vengan, me siento solo así que ¿por que no vienen?" seria un maldito niño que busca atención.

Estaba mejor así, sin nadie quien me acompañara, podría no pensar en algunas cosas que me rodeaban la mente, así era mejor, nadie vería como me derrumbo, nadie me diría que fuera fuerte y nadie me diría que lo deje salir todo, no estaba nadie para abrazarme y hacerme sentir peor, pero tampoco estaban para consolarme. Tome mi almohada y la abrace fuertemente, siempre me venia la sensación de querer abrazar a alguien, alguien quien no se queje y me dejara quedarme en esa posición, claro que no había nadie así.

Yuzu: Onii-chan, vamos a salir!!

Ichi: aja, ten cuidado_ dije casi sin voz

Yuzu: no, vas a venir con nosotras.

Abrió la puerta donde estaba con Karin, las dos se veían mejor, estaban mejorando desde que llegué, eso me agradaba, al menos lo que había hecho no fue para nada.

De repente me encontraba parado junto a mis dos hermanas en medio de un centro comercial, me parecía tan grande como interminable, la gente iba de aquí para allá sin prestarnos atención, algunos en llamadas de todos los tipos, otros Co pareja o con amigos y unos solos, solos pero felices, divirtiéndose en silencio o pensando en voz alta, repasando sus planes de seguro, así como mis dos hermanas.

Yuzu: valla, no había venido en buen tiempo.

Karin: tienes razón, por dónde quieres empezar Ichi-nii?

Mi sirvienta y yo (Ichihime) [ DESCONTINUADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora