"¿Te ha pasado alguna vez que estás buscando un lápiz y lo tienes en la mano? Pues algo similar ocurre con la felicidad." – Anónimo.
"Señora Wang, descanse por favor. Estamos a punto de terminar y usted es la invitada," Xiao Zhan le quitó de las manos, con mucha delicadeza, la cinta americana.
La madre de Wang Yibo era de carácter taciturno, no expresaba su afecto con palabras. Sin embargo, quería ayudar a Xiao Zhan incluso a lavarse los dientes.
Este había valorado positivamente sus intenciones, sobretodo después de haber recibido una disculpa por su parte por el trato que tuvo con ellos la última vez. Aún habiéndose mostrado reacia a aceptar la relación en aquella primera visita, lo cierto era que ahora mismo era la máxima fuente de apoyo que tenían.
Los había ido a visitar en medio de su proceso de mudanza a la ciudad de Pekín.
El tiempo pasa rápido cuando te lo pasas bien, pensó Wang Yibo mientras los observaba ayudar a los transportistas a meter las cajas en el camión.
A diferencia de él, Xiao Zhan había estado viviendo en su apartamento suficiente tiempo como para acumular todo tipo de objetos innecesarios. La mudanza les había servido como excusa para deshacerse de las cosas que no necesitaban y empezar una vida nueva.
Sin embargo, esa no había sido la complicación principal.
Los pianos lo habían sido, con sus enormes colas y la dificultad de transportarlos en las condiciones adecuadas para que no se estropearan los materiales. Sobre todo con la humedad.
El apartamento de Pekín era un ático de gran superficie del que se habían enamorado tan pronto lo visitaron. Era una obra nueva, así que prácticamente estaba vacío, ni siquiera había baldosas. Aún así, se pusieron en contacto con el diseñador de interiores para terminar de ajustarlo según sus gustos. Seguían faltando cosas para conseguir la esencia de un hogar, pero de eso se encargarían con el tiempo.
Con el nuevo puesto de trabajo de Xiao Zhan, tendrían muchas horas libres para amarse en todos los rincones.
Du Hua estaba encantada de tener a Xiao Zhan en la empresa. Se encargaba de entrenar a los trainees, coproducia diferentes canciones y, además, podía notar cómo tenerlo cerca mantenía la motivación de Wang Yibo incluso si el último llevaba horas trabajando.
Le había costado aceptarlo.
Cuando Xiao Zhan hubo firmado el contrato, Wang Yibo había pedido asignarle guardaespaldas para que lo protegieran a él también.
"¿Por qué?" Había preguntado ella, de forma inocente. Aunque YueHua era una de las empresas de entretenimiento más importantes del país, Xiao Zhan seguía siendo un mero productor y profesor de canto.
En su cabeza no tenía sentido.
"Xiao Zhan y yo estamos en una relación sentimental. No creo que tarde mucho en salir a la luz. Vivimos juntos y la gente sumará dos más dos. No quiero que lo ataquen por la calle. Me sentiré mucho más tranquilo si está acompañado," había contestado tranquilamente.
Por largos minutos, lo único que pudo hacer fue observarlo con la boca abierta.
"¿Cómo has dicho?" Preguntó en un hilo de voz después de recobrar la compostura. "¿Desde cuándo?"
"Desde No Sense," contestó Yibo con un tono de disculpa. "Siento no haberte explicado nada, aún era muy nuevo y nos daba miedo compartirlo."
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I'll Wait For You To Heal
Fanfiction[FINALIZADA] [ZHANYI] Toma un tiempo recuperarse. Wang Yibo lo sabe bien. Y pase lo que pase, se hará responsable de sus propias acciones, suprimir sus emociones por tanto tiempo nunca fue una buena idea. El último año ha sido difícil, caer en una d...
