"After you fall, you must stand up again."- Wang Yibo
Llegados a ese punto, Yibo estaba convencido de que el rubor en sus mejillas había llegado para quedarse. Al menos, cada vez que viera a Xiao Zhan. Pensó que quizás debería agradecer a Zhou Lian por el maquillaje, sintió que estaba pasando desapercibido gracias a ello.
Se quedó un rato allí, frente al chico, observándolo atentamente de la forma más sigilosa posible.
Xiao Zhan se había vestido con unos pantalones chinos a cuadros de tonos marrones y una camisa beige que llevaba por dentro, acentuando su diminuta cintura. Eran colores que solo añadían a su aura inmaculada. Además, a diferencia de la noche anterior, esta vez llevaba gafas de marco oscuro.
Su rostro era tan pequeño que parecían enormes. ¿Cómo podía ser que un adulto se viera así de juvenil?
Lo invitó a entrar y enseguida le indicó el sofá de cuero marrón que había en el rincón. Dejó el vino que había decidido traer encima de la mesa de centro. El otro enseguida enarcó una ceja. Yibo no podía evitar fijarse en cada detalle de su rostro. Sus cejas eran largas y enarcaban la totalidad de sus enormes ojos, perfilando muy bien su rostro.
"¿Qué traes allí?" preguntó curioso. Yibo se paso la mano por su nuca, intentando jugar con un mechón de su pelo hasta que la realidad de su nuevo corte lo golpeó.
"Es un vino. Pensé que podría ir bien para la ocasión," Xiao Zhan arqueó sus cejas en un gesto burlón y no dudó en soltar una carcajada.
"Los borrachos siempre dicen la verdad. Me gusta tu principio," dijo levantando sus pulgares. "¿Estás mejor después de ayer?"
Estaba jugando con él, ya lo sabía.
Decidió no responder. No podía dejar de pensar en lo diferentes que eran el Xiao Zhan con el que había hablado esa mañana por mensaje y el que tenía enfrente suyo.
Observó su alrededor.
El despacho de Xiao Zhan era amplio. Una fachada estaba completamente ocupada por un ventanal a través del cual se veía el jardín asociado al conservatorio. En esos extraños días de verano, las flores apenas tenían color y todo empezaba a teñirse de colores naranjas por la intensidad del sol.
Las luces amarillas de las diferentes lámparas que ocupaban la estancia daban ese toque nostálgico y cálido. De repente, se sintió tan calmado que tuvo ganas de dormir.
El protagonista principal, por muy extraño que pareciera, no era Xiao Zhan. Era el enorme piano que ocupaba prácticamente un cuarto del espacio. Yibo no sabía nada de pianos, pero sabía apreciarlos.
En sus ratos más íntimos, había escuchado múltiples piezas que lo habían llevado a mundos inexplorados de su mente, liberándose de las restricciones que se obligaba a ponerse tantas veces a sí mismo.
Observó como Xiao Zhan se inclinaba enfrente de un mueble y sacaba de allí dos copas. "Esta vez te acompaño." Dijo mientras hacía que chocaran ligeramente entre ellas.
En Yibo, eso provocó un aumento de su pulso. Decidió tomar asiento en el sofá de cuero marrón que había.
"Si no te importa," se excusó.
"¡Oh por favor! Haz como si estuvieras en tu casa," explicó sonriente.
Enseguida se unió a él. Yibo retiró la botella de la bolsa de cartón, junto con el sacacorchos que le habían ofrecido en la tienda. Sirvió una copa generosa a Xiao Zhan, y otra con un poco menos de cantidad para él. Si bebía demasiado, olvidaría otra vez todos los detalles de esa faz angelical.
![](https://img.wattpad.com/cover/294837043-288-k827647.jpg)
ESTÁS LEYENDO
I'll Wait For You To Heal
Fiksi Penggemar[FINALIZADA] [ZHANYI] Toma un tiempo recuperarse. Wang Yibo lo sabe bien. Y pase lo que pase, se hará responsable de sus propias acciones, suprimir sus emociones por tanto tiempo nunca fue una buena idea. El último año ha sido difícil, caer en una d...