Capítulo 2

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—¡Mira quién vino! —, Tae gritó tan pronto como vio a Jimin entrar en el gran espacio abierto, el restaurante dentro del hotel donde almorzaron.

—Bueno, al menos no fui yo quien tuvo relaciones sexuales en toda la mañana y se saltó la reunión con el Sr. Chung—. Dijo Jimin, pero no había seriedad en sus palabras.

—Oh, carajo, sí, la reunión, ¿Cómo te fue? —, Tae preguntó y por alguna extraña razón Jimin sonrió.

—No salió bien. Hubo una fiesta en la playa, así que tuve que terminar la reunión antes de que comenzara. El Sr. Chung dijo que nos buscará otra cita, si encuentra tiempo—. Jimin explicó, así que Tae lo miró mientras entrecerraba los ojos.

—¿Y estás de acuerdo con eso? Quiero decir, ¿querías ese trato con el Sr. Chung desde hace años, y actúas tan normal a pesar de que no tuviste la oportunidad de hablar con él correctamente?.

—Sí. Quiero decir, a veces estas cosas suceden —. Dijo Jimin mientras tomaba una uva de la mesa y la masticaba con una sonrisa.

—Oh Dios, ¿qué hiciste? ¿Mataste a alguien? No te preocupes, te cubro la espalda. Lo que sea que le hiciste a las personas que detuvieron tu reunión, está bien. Se lo merecían. Simplemente no te castigues. No te cierres bebé, háblame —, murmuró Tae, por lo que Jimin miró su rostro preocupado.

—¿De qué estás hablando?.

—Nunca actúas así de normal, me está asustando. Literalmente lloraste todo el día cuando la reunión con Sunwo salió mal, sin mencionar cuando Sejin no quiso firmar otro contrato con nosotros. Esa pobre ardilla nunca te vio venir en la calle, y ahora ella se ha ido—, Tae dijo un poco dramáticamente por lo que Jimin puso los ojos en blanco.

—Por millonésima vez, no atropellé a esa ardilla.

—Claro, entonces ¿Qué fue esa cosa que hizo que tu auto rebotara arriba y abajo como si hubieras atropellado algo grande?—, Tae dijo con los ojos bien abiertos.

—Era una maldita piedra, y esa ardilla se escapó tan pronto como me acerqué a ella. No puedo creer que me esté justificando por una maldita ardilla—. Dijo Jimin y Tae cruzó los brazos sobre el pecho.

—¡Eso es porque te sientes culpable!.

—No tengo nada por lo que sentirme culpable —, dijo Jimin un poco molesto y pronto Jin entró.

—Hola a ustedes dos. ¿Qué pasa?.

—Jimin mató a alguien, eso es lo que pasó—, dijo Tae, y los ojos de Jimin se abrieron en estado de shock.

—¿Qué? —, dijo Jin mientras se sentaba, mirando a su alrededor, observando si alguien escuchó lo que Tae acababa de decir.

—Era sólo una ardilla—, dijo Jimin mientras miraba a Jin, tratando de fingir una sonrisa en su rostro.

—¡Ajá! ¡Así que lo admites!—, Tae dijo en voz alta, señalando con el dedo índice a Jimin.

—No lo sé. ¡Simplemente no quiero que nuestro jefe piense que maté a una persona, idiota!.

—Esa ardilla también era una persona, lo sabes —, dijo Tae mientras hacía una mueca triste, y Jimin sabía que había perdido esa batalla.

—Te ves tan lindo cuando haces pucheros —, Jin dijo y se acercó para besar los labios de Tae.

—Odio esto. ¿Te lo he dicho antes?—, Jimin solo agregó sarcásticamente.



Summer Love -Kookmin-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora