45.

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— ¿Qué espere qué Justin? ¡No! Se acaba ahora mismo ¡Me voy! Y no quiero que me busques, ¡Te odio! Le gritó mientras trataba de alejarse pero él la tomó del brazo.

—Escúchame, le suplicó.

— ¿Qué es lo que tratas de hacer? Le preguntó enfrentándolo mientras lloraba. — ¡Estás haciendo que te odie! ¡Y que lo haga como no lo he hecho con nadie!

Silencio.

— ¿Es eso verdad? Le preguntó de repente entendiendo todo. — ¡Estás haciendo que te odie! Exclamó mientras su labio inferior temblaba.

Justin no habló la observó con tristeza. De repente todos se habían esfumado, eran solo ellos…—Déjame ir, le dijo por lo bajito mientras cerraba los ojos.

—No.

— ¡Sí! Gritó mientras intentaba zafarse y retrocedía para liberarse. Su estómago empezó a dar vueltas, ¡Joder! Justamente cuando pensaba que su embarazo no tendría sobresaltos, pasaba esto. —Suéltame por favor, necesito ir al baño, le dijo sinceramente, medio mareada.

Él la soltó y la vio prácticamente correr por la sala hasta el baño… cerró la puerta, no quería ver a nadie, y menos a Justin, de repente todo se había vuelto muy borroso, se tuvo que sentar en el suelo, sus rodillas no le respondían.

—Vete de aquí, le dijo nani a Jessica en el balcón.

—Tú no eres nadie para darme órdenes, respondió Jessica enojada…

—Por las buenas, vete de aquí, le recalcó.

Billy dio un paso hacia ella. —Te estamos hablando en serio, le dijo.

Jessica miró hacia la sala, Justin estaba recostado de la puerta donde su perra esposa había entrado…—Bien, dijo mientras salía airadamente de la casa. 

—Justin es un verdadero imbécil, dijo nani.

Billy la observó, mientras la tomaba de la mano…—Concuerdo contigo.

—Abre la puerta, le decía Justin dulcemente con la cabeza apoyada en la misma. 

Nani caminó hacia la cocina, buscó la llave del baño y se la pasó, él abrió la puerta y la vio en el piso recostada de una pared…—Ven preciosa, le dijo mientras se agachaba y la tomaba en brazos, ella hizo una mueca de desagrado pero se sentía tan débil que no pudo protestar.

—Espero que la dejes dormir, le dijo nani. 

Él no respondió, la colocó en la cama y la arropó, se sentó a observarla…—Sal de aquí, le dijo ___ con lo que le quedaba de voz…—Me quiero divorciar, le dijo con los ojos cerrados.

Justin se rascó la barbilla. —Tú no vas salir de aquí, sé que nuestra relación no es la mejor… Pero aquí estas mejor que sola en tu casa.

Ella gimió de frustración más no dijo nada, le dio la espalda y trató de dormir. —Apaga la luz, dijo arrastrando las palabras.

—Claro, respondió mientras lo hacía.

____ lo vio empezar a desnudarse. — ¿Qué estas haciendo?

—Te voy a cuidar.

—No quiero que lo hagas.

—Pero yo quiero hacerlo, le respondió mientras se metía a la cama.

_____ cerró los ojos con frustración, no podía dormir… se volteó y se encontró con la mirada de justin. — ¿Te puedo preguntar algo? 

Un amor entre la mafia y la muerte II (Editada & disponible en físico)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora