25. Es un "hasta luego"

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Los tres consejeros habían salido del salón, dejando solo a los de sangre real dentro.

Keigo suspiró ante la despedida simple que tuvo con el hombre.

—Será un gusto hacer negocios con el nuevo rey —comentó Masaru.

Abrió los ojos ante eso, apenas había caído en cuenta de eso.

—¿Ustedes seguirán relacionándose con el Oeste? —preguntó dudoso.

—Lo que Aizawa haya hecho no te define —dijo Enji levantandose.

—Tendrás mucho trabajo en tu reino explicando lo de te padre, pero estarás bien —agregó Toshinori.

Mientras los ahora cuatro reyes hablaban, Fuyumi volteó a ver a su hermano bicolor.

—Vamos a que descanses, Shoto, es mejor que no estés sentado tanto tiempo.

Él asintió pero sintió como era tomado del antebrazo por tres manos, la chica y el joven miraron a los dueños de ellas.

Ahí estaban Touya con un rostro neutro, Katsuki con su ceño fruncido e Izuku con una sonrisa a medias mientras se miraban.

—Yo llevaré a mi hermano a su cuarto, no es necesario que ayuden —habló el pelirrojo quitando los otras manos.

—También puedo hacerlo —alegó el rubio.

—No he estado tanto tiempo con Shoto-Kun, sería bueno que yo lo hiciera.

Hermano contra mejor amigo contra novio, que empiece el juego.

Antes Izuku y Touya se dividían bien los tiempos, pero un tercero era menos tiempo.

El pelirrojo era claro que era protector con todos su hermanos, Izuku le gustaba pasar mucho tiempo con su amigo y el ojirubí, evidentemente, quería tiempo con su pareja.

—Compermiso —habló Keigo mientras quitaba la mano de Touya—, yo lo voy a llevar.

Sin perder tiempo se encaminaron bajo la mirada atónita de los tres jóvenes, la aliviada de Fuyumi y Natsu y la divertida de los gobernantes.


[...]


—Después de tanto, finalmente ha terminado —murmuró el rubio mientras estaba sentado al lado de la cama de Shoto.

—Lamento lo de tu padre.

—Si te soy sincero, no siento lo que se supone debería sentir. Solo estoy aún sorprendido.

—A pesar de conseguir lo que buscamos por años —empezó pensándolo—, es como no saber qué hacer.

—Se honesto conmigo —agregó mientras acercaba la silla—, ¿sientes que la muerte de tu madre ya fue vengada?

El heterocromatico no dejó de verlo, tampoco le tomó mucho responder con una voz calmada.

—Desde el momento en que mamá se fue supe que ella estaría en paz, pero ya puedo dormir tranquilo.

Keigo sonrió asintiendo, fue lo mejor para todos.

—Por cierto, me enteré de la noticia de que estás con ese rubio del Sur, no pierdes tiempo, ¿eh?

—¿Quién te lo dijo? —preguntó rascando se mejilla.

—Enji y Fuyumi —contestó con una sonrisa—. Después de escuchar el drama, supongo que te enamoraste cuando estuviste infiltrado. Es raro saber que ahora tienes pareja.

—Supongo, ¿crees que duremos?

El mayor de llevaba muy bien con todos, muchas veces ha tenido pláticas amenas con cada uno.

Batalla CardinalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora