Es Imposible Olvidar

Capítulo 15: Misión

"Te quiero Reki" 

Primero, Reki no sabía como demonios reaccionar ante todo eso. Langa de pronto haciendo esas preguntas tan extrañas seguidas de sus expresiones llenas de tristeza, además de que no estaba seguro de si su mejor amigo estaba cuerdo o no. 

Y cuando escuchó esa repentina confesión se quedó helado. Bueno, al menos su mente se congeló, porque su cuerpo se tambaleó hasta casi caer al suelo. El repentino abrazo de Langa lo hizo perder momentáneamente el equilibrio, pero logró arreglárselas para no desparramarse en el suelo. 

¿Qué podría significar todo eso? 

¿Acaso...? 

-No tienes que responder- le dijo Langa rompiendo el silencio que él mismo había ocasionado y sin separarse de su querido Reki, se aferró a él con todas sus fuerzas, deseando desesperadamente que sus sentimientos lo alcanzaran. 

-Pero...- Reki seguía procesado el túmulo de información que Langa le había arrojado encima. Disimuladamente colocó una de sus manos en la frente de Langa. ¿Estaría ardiendo en fiebre hasta el punto de delirar? No, no era eso. Su temperatura era normal, pero Langa no se movió ni un centímetro. 

-¿Crees que estoy loco?- le pregunta Langa hablando en voz baja. 

-No estoy seguro...- admite su mejor amigo ladeando un poco la cabeza para verlo a los ojos. 

Reki se separa del abrazo y le da un pequeño golpe en brazo caminando relajadamente hasta la puerta de su casa. 

-Es tarde, hablaremos de esto mañana. Vamos a dormir- le dice Reki con una sonrisa mientras le hace señas para que lo siga. 

"Es ahora o nunca" piensa Langa armándose de valor para continuar con su declaración. 

-No me agrada ese tal Shinichiro- admite en voz alta y se  sonroja de la vergüenza- Pero... tengo que contarte algo sobre él. 

Por increíble que parezca, tras escuchar a Langa hablar sobre Shinichiro, Reki se sintió  tranquilo. Uno creería que después de saber que su mejor amigo había utilizado los drones de vigilancia de un millonario lunático para seguir a su amigo de la infancia, Reki se pondría histérico por la sorpresa, pero en realidad no fue así.  Se despidió de Langa y volvió a su habitación para quedarse profundamente dormido. Tal vez  fuera porque finalmente había encontrado paz al enterarse de que no había hecho nada malo. 

Creía que la razón por la cual Shinichiro no le hablaba era porque lo despreciaba. Talvez lo culpaba por no haber estado allí cuando se lastimó de gravedad o tal vez porque Reki no había insistido más tiempo en contactarlo después (aunque siendo sinceros, Reki lo había llamado alrededor de diez veces al día, le había enviado cinco mensajes cada hora e incluso había intentado enviarle una carta a la semana, así que no era posible que fuera por falta de esfuerzo) y se sentía tan culpable... pero al enterarse de que Shin seguía pensando en el, eso le quito en un peso de encima. Tal vez por eso se había quedado dormido tan rápido. Luego de unos cuantos minutos de sueño profundo, comenzó a rememorar su pasado.

-Reki, ¿vendrás a patinar esta noche?- le pregunta Shin con esa característica sonrisa suya. A Reki le parecía que su mejor amigo era como un cachorrito perdido y debía admitir que la mayoría del tiempo quería adoptarlo... aunque no lo dijera en voz alta.

-¿Contigo? Paso. Tengo mejores cosas que hacer.

-Pero...

-¡Claro que si! Ni si quiera tienes que preguntar - le dice Reki con una sonrisa.  Shin le lanza un poco del agua que está bebiendo en ese momento, haciendo que su botella quede casi vacía.