¡Voy a por tí, Luisa Madrigal!

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Narrador Emilia.
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No podía seguir dándole la espalda a la Madrigal, "Tengo que enfrentarme a la realidad" pensé y bueno, yo sola me había hundido en esto. ¿Quién se pone a gritar en medio de la nada sobre su tragedia amorosa?
"Yo nomás" suspiré y finalmente encaré a Isabela, quien me miraba sonriendo palmando el pasto al lado suyo.

-Ven siéntate, no muerdo- dijo riéndose mientras yo caminaba rígida para sentarme ahí.

-Hum...¿podemos hacer como si nada ocurrió?- le dije incrédula, porque algo me decía que este asunto no quedaría ahí.- O por lo menos no se lo vayas a contar a Luisa- le suplique.

-Wow así que lo que dijiste si es verdad, tenía dudas- cerró los ojos y se puso a pensar.- Bien esto es nuevo, a mi hermana nunca le ha gustado alguien y nadie se ha interesado en ella.- Se giró, mirándome.- Hasta hoy- sonrió.

Me sonroje y traté de decirle algo, nada me salía.

Isabela se volvió a reír.- Dios eres demasiado tímida, ya entiendo por qué gritabas todo eso antes.. ¡Okey!- Se paró decisiva.- Ya que he podido juntar a mi prima con Mariano... Con ayuda de mi hermana... ¡TE VOY AYUDAR CON LUISA!.- me agarró de las manos, levantándome del pasto y me dijo feliz.- ¿Qué quieres saber sobre ella? Te lo puedo contar todo, ¡ah! Puedo juntarlas en una cita ¿Dónde te gustaría?-

-La verdad, creo que me gustaría conocerla por mi misma...-.

-Si tienes razón en el parque de la calle principal estaría bonito-.

-Isabela de verd-

-Aunque pondría poner ahí unas cuantas palmeras, ¡sería una cita tropical!-.

-¡Isa!- le sonreí nerviosa.- no es necesario de verdad, déjamelo a mi.- Al parecer mis palabras no le gustaron mucho, ya que soltó un suspiro pesado.

-Bueno te lo dejaré para que te confieses en 10 años más si eso quieres...De todas formas cuentas conmigo ¿okey?.- Me dió un abrazo amable.- Perdón, a todo esto ¿como te llamas?.

-Ah disculpa por no presentarme, soy Emilia Castro.- le dije devolviéndole el abrazo.

-Oh, tu eres hermana de Sebastián el repartidor ¿No?, Hoy lo ví bailando con mi tío Bruno, bueno obligándolo a bailar.

-Jaja sí, él es... Espera él hizo qué- Me separé de Isabela y la miré con culpa.- Disculpa él a veces se pone así de ¿entrador? con personas que apena conoce.

-¡No te disculpes! Fue chistoso verlo- Isabela me sonrió y luego miró adentro.- Bueno voy a entrar- Se giró para verme nuevamente y me susurró en el oído.- Mañana Luisa seguirá con sus tareas de llevar a los burros a pastar, seguramente estará sola.

Se despidió de mí con un beso en la mejilla y luego cuando estaba más lejos me advirtió.
-Acá tarde o temprano se saben las cosas Emilia, será mejor que seas tú quien le diga a Luisa como te sientes y...no otras personas- luego se fue.

"...¿se referirá a su prima Dolores? Ella pudo haber escuchado...¿O Isa pensará decirle a Luisa antes que yo lo haga?"
Comencé a sobre pensar lo que quiso decirme al final.
"¿ES UNA AMENAZA PARA QUE ME APURÉ EN HABLAR CON ELLA? ISA NO TE ENTIENDO" me puse a chillar mientras me iba a casa, esta noche se vendría muy larga.
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La Mañana siguiente.

-Me duele la cabezaaa- Se quejaba mi hermano mientras tomábamos desayuno.- Que bueno que mi jefe me dió el día libre, ayer me lo encontré buen ánimo ¡Ja!.

-Si, parece que tú también te encontrabas de buen ánimo ja.- le dije con sarcasmo y el me miró incrédulo.

-...Okey que pasa.-