- Fruit 🍓

Cap. 14

— suspiraste cansada, el fin de semana no habías dormido bien, estabas cansada y frustrada, tus amigos solo te veían con un poco de tristeza, "¿Dónde quedó la alegre (_____)?" Pues no existía más, ahora eras una chica cansada, con ojeras, presionada a ser perfecta y con mucho estrés por delante.

— (_____) .....

— ¿Mmh?

— ¿Estás bien? Es la cuarta vez que das un suspiro y te pones a susurrar cosas.....

— No importa, estoy bien.

— Mmh... No me lo creo, pero si necesitas algo Tsumugi, Miu y yo estamos para ti. – kaede te sonrió y se fue a su asiento, te diste cuenta que ya había llegado Kokichi, tu solo pusiste tu libro de historia en la cabeza, no lo querías ver.

— Quisiera que todo esto fuera ficción... – Dijiste mientras quitabas el libro de tu cabeza, era hora de iniciar la clase.

————

— Bostezas te mientras comías tu obento.

— (___) me preocupa el echo que haz estado más sola que un cactus y comiste en el salón, tu jamás comes en el salón.

— Tsumugi.... Solo estoy cansada para irme a otro lugar, si me permites comer. – le dijiste a Tsumugi, luego ella se alejo, viste que alguien se acercaba a ti, era Kyo.

— (_____).

— si quieres algo por qu– Oh Kyo.

— ¿Mal humor?

— ... Todo ha estado de cabeza y quiero llorar.

— Uno, no llores vale, dos, si quieres hoy hagamos una salida, hay que olvidar los detalles de los vampiro esa salida, tres, perdón por dormirte antier.

— Pff, olvida eso, iré a la salida contigo, gracias. – Dijiste sonriendo, te sentías menos estresada, bueno aún que alguien no estaba feliz.

— Bien, nos vemos en la tarde, y por cierto espero poder hacer los apuntes, estos días Kaede fue quien me lo paso.

— ¿Ah? Kaede siempre tan buena, que tal si ella te los pasa...

— Pero yo quiero a ti, no a Kaede.

— ¿Que?- – Te habías sonrojado.

— Por que me llevo mejor contigo.

— ¡A–Ah! ¡Obvio, si!….. Ya va a terminar el receso, mejor termino de comer.

— Bien, provecho. – se fue dejándote para poder comer.

— Tengo sueño.... Ah, ojalá hoy la maestra de química no haga prueba – Dijo algo cansada, guardo su comida y saco su libro de química, la clase había empezado, solo que algo se sentía diferente, al finalizar la clase la maestra de llamo para que fueras con ella, tenían que hablar.

— Señorita...

— ¿Si?

— Tengo una duda, y no solo yo, muchos maestros, nosotros sabemos que desde inicios de preparatoria habías estado con las mejores notas, nos preocupa que ahora tengas notas bajas, de la nada empeoraron y podemos notar luego luego en tu apariencia que no estás bien.