- Soy una tonta. Una completa tonta. - exclamó Aria mientras dejaba caer su cara sobre su almohada. Ester a través de la videollamda en su laptop soltó una carcajada.
-¿Le dijiste que nunca habías visto a un hombre sin camisa? No, ¿Se lo gritaste? - preguntó la rubia como si la tortura no fuera suficiente. - ¡Dios mío, Aria!
-No lo pienso volver a ver. - soltó la castaña levantando su cabeza para ver a su amiga. Luego soltó un suspiro. - Pero vive aquí. - y volvió a dejar caer su cara.
-Muy bien, ya fue suficiente Aria Elianna Winter Pellieter. - habló Ester para llamar a la calma, aunque por dentro solo quisiera chillar. - Eres más madura que esto, él se disculpó contigo ¿verdad? Eso muestra que es un hombre de principios, además de que no se burló por lo ridículo que se volvió todo esto sino que te trató con respeto así que sería horrible de tu parte evitarlo ahora. Además, dijiste que prometió enseñarte Canadá y tu aceptaste, también está el detalle de la deuda que sientes tener que pagarle. En resumen, él solo ha sido amable. Aunque mi último diagnóstico lo daré cuando pueda verlo dentro de dos semanas y media. - soltó juntando los puntos importantes, digno de una periodista. Aria asintió tomando un respiro, eso era cierto.
-Tienes razón. Debo pasar esta página. - asintió decidida.
-Bien dicho, ahora solo necesito que me respondas una cosa. - soltó Ester.
-¿Qué cosa?
-¿Él te gusta?
Y así, Aria se quedó congelada por un par de segundos antes de echarse a reír. - ¿Qué?
-Dijiste que es lindo.
-Lo es pero no me ando enamorando de cada chico lindo que encuentro Ester. - exclamó con una sonrisa. - Sabes que no tengo prisa con eso. Siempre le he pedido a Dios discernimiento para poder escoger sabiamente al chico al que entregarle mi corazón. Liam es lindo, totalmente lindo y hasta donde he podido conocerlo un buen hombre pero no conozco mucho sobre él, ni siquiera sé cuál es su trabajo.
-Entonces yo te puedo ayudar con eso.
La tercera voz hizo a Aria voltear con los ojos desmesuradamente abiertos hacia su puerta donde encontró a Margot apoyada en el marco con los brazos cruzados y una sonrisa pícara en los labios. Aria entró en pánico.
-¿M-Margot? ¿Qué haces ahí?
-Deberías cerrar la puerta cuando vayas a tener una conversación privada, todos usan este pasillo ¿sabes? - comentó entretenida.
-¿Qué? ¿Qué pasa? - preguntó Ester sin poder saber porque su mejor amiga se veía tan sorprendida. Margot se adentró a la habitación y se asomó por la computadora.
-¡Hola! Soy Margot Kringle, la hermana menor de Liam. Tú debes ser Ester ¿verdad? Aria me ha hablado sobre ti.
La rubia compartió una mirada con Aria quién aun no sabía que hacer y sonrió. - Hola Margot, Aria también me ha hablado sobre ti. Felicidades por tu graduación de la preparatoria.
-Oh gracias. Es un verdadero alivio la verdad.
-Dímelo a mí, yo no dejaba de emocionarme cada vez que me decía que ya no volvería a ver ese edificio cuando estaba en mi ultimo año.
-¿Verdad que sí? Pero también me dio nostalgia, hasta le di un abrazo a mi profesor de matemáticas. Ese hombre era un completo odioso pero me puse sensible.
-Totalmente de acuerdo. Yo aún guardo algunos recuerdos de aquella época, incluso los mensajitos que me enviaba con mis amigos y algunas fotos.
-Yo también pensé en hacer una caja de los recuerdos. ¿Qué crees que debería poner?
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Te lo dije: "Todo estará bien"
Teen FictionAria Winter estaba sola, en medio del enorme estado de California en la ciudad de los Ángeles, sin ningún familiar al que llamar para su cumpleaños o pasar la navidad. No por eso quería decir que estuviera triste, ella había tomado la decisión de de...