veinticuatro

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MAUVE VIOTTO

Nuestra noche llega a su fin cuando miro las estrellas brillantes en la oscuridad del cielo nocturno. La mayoría de mis amigos duermen tranquilamente en el suelo de la torre, enterrados debajo de gruesas sábanas de mantas para proporcionar el calor que tanto necesitan para luchar contra el frío invierno. Acerco el vellón a mi pecho, cada una de mis pequeñas exhalaciones se congelan en una nube gris. En el silencio, escucho un suave arrastrar de pies seguido por el sonido de pasos reticentes, hasta que una figura con un sentimiento familiar se encuentra junto a mí en la barandilla.

Giro la cabeza hacia él, pero me abstengo de hablar todavía. Absorbo su apariencia: el ligero rizo en su cabello, el rastro de cansancio en sus ojos azules al anochecer. ¿Alguna vez han visto a alguien tan hermoso sin hacer el mínimo esfuerzo?

"¿Cómo son tus padres?" Draco me saca de mis pensamientos, mirando hacia las estrellas en lugar de mirarme a mí. Su voz sugiere que ha estado atrapado en su cabeza por un tiempo, y la expresión pensativa que está escrita en su rostro solo se suma a esta especulación.

Pensando en mis padres, sonrío levemente. "Mi madre es poeta. Ha escrito algunos libros de poesía, la mayoría basados ​​en sus propias experiencias. Mi padre es escritor y ayudó a escribir algunos de los libros que usamos aquí en Hogwarts". Draco se vuelve hacia mí sorprendido, claramente asombrado por la nueva información.

"¿Ambos son escritores?"

Asiento con la cabeza, sonriendo. "Se conocieron en una librería, en el lado muggle de Londres. Mi madre estaba firmando su libro de poesía más reciente y mi padre estaba allí para visitarla. Aparentemente estaba 'fascinado' con ella, y continuó visitándola".

"Suenan encantadores", responde Draco en un tono tranquilo, su frase decayendo al final. Quiero preguntarle qué está pasando por su cabeza, pero no quiero que me rechace. Sería demasiado embarazoso.

Estoy tan perdida en mis pensamientos que Draco se da cuenta de que los engranajes giran rápidamente en mi cabeza y se ríe en voz baja. "Puedes preguntar por los míos, Mauve. Está bien."

"Yo sólo... no quería... ofenderte, ni nada." Suspiro, una sonrisa avergonzada en mi rostro.

Sacude la cabeza, "está bien. Estoy... consciente de cómo se percibe a mis padres y cómo son". Tomando un profundo suspiro, continúa, mirando al cielo con una expresión de nostalgia mientras habla. "Mi padre, el más astuto de los astutos, es una persona fría. Él prioriza la pureza de la sangre, el estatus y el poder. Yo... odio la forma en que crecí".

Mis ojos se abren ante su confesión y abro la boca para decirle que no tiene que hablar de eso cuando me interrumpe.

"Está bien, Mauve. Eres, eh, eres la primera persona con la que he hablado de esto". Me da una sonrisa perezosa y mi corazón se acelera.

"Estoy escuchando", le aseguro, colocando mi mano sobre la suya. Las comisuras de sus labios se elevan un poco más y gira la palma de la mano, entrelazando nuestros dedos.

El único pensamiento en mi cabeza es Draco.

No podía importarme menos el frío creciente o la barandilla casi congelada debajo de mis antebrazos. Me concentré en Draco Malfoy y en nuestras manos entrelazadas. Él mira nuestras manos con una pequeña sonrisa antes de continuar, cambiando su mirada hacia el cielo sobre nosotros. "Mi padre tenía ideales estrictos, ideales que me impuso a una edad muy temprana. Todos a mi alrededor, incluido Theo, creían de la misma manera. Así que, obviamente, por eso pensé que estaba bien. Ahora sé que... no lo está, pero en ese entonces, estaba grabado en mi cabeza". Traga saliva, sacudiendo la cabeza mientras observa los detalles de la barandilla. "Yo... a veces... no puedo creer que actué de la manera en que lo hice. Pero es difícil salir de un hábito".

𝐌𝐀𝐔𝐕𝐄, draco malfoy (traducción)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora