Maia Gilbert, la hermana mayor de Elena y Jeremy Gilbert.
Militar, tiene que dejar el campo de batalla para poder hacerse cargo de sus dos hermanos pequeños después de la muerte de su tía.
Al llegar se encuentra con un mundo sobrenatural, el cual pa...
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Estamos llegando a la casa donde están los periodistas norte americanos secuestrados, siento esa adrenalina que he sentido otras veces, me llena el cuerpo, saber que puede ser la última vez que la sienta me pone nerviosa. Pienso en mis hermanos, lo que pasarían si yo no llego a casa por vacaciones, ya han perdido mucho. Definitivamente, después de esto me tomaré unas muy necesarias vacaciones, los llevaré a Irlanda, seguro les gusta, y así también le doy un descanso a tía Jenna.
Derek da la señal, cojo bien mi arma y me preparó para entrar, la misión es sencilla, entrar, abatir al que se nos cruce y llevarnos a los periodistas, suena sencillo, aunque bueno, otra cosa es hacerlo. Voy entrando a la casa, con silencio y mis sentidos más que activados, detrás de mí viene el resto de mi equipo, somos 7 en total.
Derek, el líder, 37 años, llega al 1'90 sin problemas, musculoso y negro, tiene la cara de que te puede asesinar en menos de un minuto (bueno, es que en realidad si puede), pero es un bebe cuando quiere.
Le sigue Chris, 36 años, alto también, incluso más que Derek, segundo al mando, rubio y musculoso (bueno, todos son musculosos), es un chiste andante, pero con una puntería perfecta.
Jessy, 29 años, estatura media, experta en rescate y extracción, azabache y musculosa, es sin duda la mujer con los ovarios más grandes que he conocido en toda mi vida.
Ap-Shari, Ap. para nosotros, 34 años, de origen indio, estatura media 1'75, musculoso, el doctor del grupo, el más malhumorado de todos, pero es la persona más fiel que vas a encontrar.
Spencer, 27 años, alto 1'80, castaño y musculoso, el especialista en ordenadores y drones, aparte de ser capaz de pilotar cualquier cosa, inteligente y meticuloso, el más serio de todo el grupo.
JJ, 33 años, bajo 1'68 (sus padres no le daban petisuis, f por JJ), musculoso, pálido, cuál vampiro y rubio platino (a lo Draco), experto en camuflaje, es un puto demonio de Tasmania, pequeño, rápido y letal.
Y luego estoy yo, 22 años, la más joven de todo el grupo, 1'76, morena y especialista en armas y defensa.
Disparo a los tres hombres iraníes que tengo enfrente, matándolos enseguida, eso no alarma al resto de personas que hay en la casa, ya que, todos tenemos silenciadores. El objetivo es rescatar, no asesinar. Nos movemos con rapidez y coordinación hacia la parte baja de la casa, lanzando algunos disparos a los guardias que nos vamos encontrando. Siento el sudor caer por mi frente, mi corazón palpita, pero en mis ojos no podrás encontrar ni una pizca de duda, no fui entrenada para eso. Logramos llegar a la habitación donde están los secuestrados, los conseguimos liberar, Derek, Spencer y Chris los alzan y arrastran hacia la salida, con Jessy y yo cubriendo el frente, Ap y JJ nuestras espaldas. Nos encontramos algunos hombres más, pero los logramos esquivar con facilidad, salimos de la casa y subimos a nuestro coche (el cual estaba bien escondido) y salimos de esa zona peligrosa rápidamente.Pero como no puede ser fácil, tenemos dos coches persiguiéndonos, con cinco personas en cada uno, las cuales creerme, van armadas hasta las dientes.
-Me cago en la puta, Spencer me están tocando los huevos, coge el puto dron y elimínalos de una puta vez, me cago en la puta madre que los parió- gruñe Dereck, el cual está al volante.
-Nunca en mi vida había escuchado puta tantas veces en una misma frase- dice con gracia Chris.
Spencer coge un mando (parecido al que se usa para manejar los coches teledirigidos) con una pequeña pantalla en él. El dron vuela y segundos después puedo ver como uno de los coches estalla en mil pedazos.
-Buena, esa Spenc- dice Jessy.
Spencer hace un intento de sonrisa, el cual parece más una mueca, para seguir toqueteando el mando, a continuación el segundo coche estalla.
- Fácil, sencillo y bien rápido- dice Chris.
- Christopher, los secuestrados están aquí, para ellos no ha sido fácil, pedazo de idiota - digo - ¿Alguna herida grave por allí atrás Ap?-.
- Algún que otro hueso rotó, pero fuera de eso todo en orden- me contesta enseguida.
-Perfecto entonces- dice serio Dereck - Cuando lleguemos os revisaran más a fondo y después harán unas cuantas preguntas, ¿entendido?-.
Los tres periodistas asienten levemente.
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