Save me ! - zhuiling [CONTINUACIÓN]

1

Sus ojos estaban llenos de lágrimas, el olor a alcohol inundaba la habitación, sus manos estaban atadas y sentía algo recorrer sus piernas, cerró sus ojos tratando de no pensar mucho, más al sentir un golpe sobre éstas simplemente abrió su boca y dejó escapar un gemido ahogado en dolor.
Cuando bajó la mirada fue capaz de ser a su tío acariciando sus muslos mientras sonreía borracho, GuangYao estaba desnudo mientras acariciaba las piernas del joven Jin.
Comenzó a patalear tratando de alejarlo mientras reprimía varios sollozos, más el intento se volvió inútil cuando GuangYao tomó ambas piernas del menor y las ató; comenzó a acercar sus dedos a la parte íntima del menor mientras éste trataba de zafarse.
La habitación estaba semioscura, había poca iluminación pero la fría y áspera mano de GuangYao era lo único que le daba miedo.
Mordió su labio inferior ahogando un gemido cuando su mayor golpeó nuevamente sus muslos.
Cuando pensó que Yao había acabado, sintió como de golpe introducía dos de sus dedos en la entrada del menor, quien tiró su cabeza hacia atrás, arqueó su espalda y dejó escapar un grito de dolor seguido de varias lágrimas.
Su respiración estaba agitada, pero gracias a sus ojos húmedos no podía ver bien; sintió la mano del mayor comenzar a moverse con brusquedad y eso le hizo comenzar a sollozar.
Su cuerpo dolía, sus piernas dolían.
Las manos de su mayor no paraban de moverse mientras susurraba cosas inentendibles para RuLan.
Un Jadeo escapó nuevamente de sus labios cuando su mayor sacó su mano de su interior, sintió alivio y supuso que había acabado, más al sentir cómo éste se levantaba un poco tuvo miedo nuevamente.
Su mayor estaba posicionado entre sus piernas mientras las tenía amarradas a cada lado de la fría cama, sintió algo presionar contra su entrada nuevamente y su respiración se cortó por un segundo.
Sintió como su interior era abierto con furia, el miembro de su mayor estaba dentro y sabía que eso no sería todo.
Las caricias de GuangYao en el vientre del menor se hicieron presentes, Jin solo se dedicó a morder sus labios reprimiendo gemidos y sollozos en éste.
Las embestidas comenzaron siendo lentas, relajadas, y el cuerpo de Jin comenzó a doler, trató de mover sus manos y GuangYao al ver esto no reprimió sus instintos; las embestidas aumentaron en segundos, el enojo era más que perceptible, Yao no tomaba si quiera el tiempo de ver el rostro de su sobrino, simplemente lo embestía con fuerza mientras otorgaba leves caricias.
El asco se apoderó de Rulan.
Soportó aquellas embestidas por unos cuantos minutos más hasta que sorpresivamente GuangYao salió de él; dejó escapar un pesado suspiro y aflojó un poco la tensión en sus piernas, necesitaba un descanso de todo eso, necesitaba sentirse él.
A través de su vista nublada fue capaz de ver a su tío acercarse a él de nuevo, con la diferencia de que esta vez iba a su rostro.
Giró la cabeza, no deseaba verlo.
Yao tomó con fuerza su mentón y lo obligó a mirarle, las mejillas de Jin desbordaban lágrimas, una de las manos de Yao acaricio ésta con suavidad, limpiando un poco las húmedas y frescas lágrimas de éste.
GuangYao hablaba, lo hacía, pero no era capaz de escuchar nada de lo que éste decía.
Pronto las manos del mayor pasaron a los labios de Jin, donde acariciaron un poco para después obligarlo a abrirlos, RuLan se retuvo forzando su mandíbula.
Recibió un golpe en la mejilla por parte de su mayor, abrió la boca asustado y sintió como éste introducía su miembro.
Las venas de su largo falo rozaban con las mejillas de Jin, este solo mantuvo su boca sin mover mientras reprimía arcadas.
GuangYao, al darse cuenta que el menor no se movería, comenzó a mover sus caderas sobre éste, penetrando su boca cuánto el quisiese.
Las lágrimas comenzaron a caer nuevamente y la boca semiabierta del menor dejaba escapar jadeos y sollozos ahogados en el miembro de su tío.
Sentía tanto asco, de sí mismo y de la persona delante de él, trato de alejar su rostro más de una vez, pero en cuanto lo hacía las embestidas a su boca aumentaban.
Entonces mordió el miembro de su mayor haciéndolo gritar, por un segundo fue capaz de sentir alivio, más esto acabó cuando el primer golpe se hizo presente, un golpe resonó fuerte contra su estómago, haciéndole jadear de dolor.
El segundo fue en el pecho, su respiración se cortó un poco al sentir esto.
El tercero fue en el rostro, golpeando nuevamente las mejillas del menor.
Y el quito fue directamente en las costillas, haciendo que éste soltara un alto gemido desbordando dolor.
Su respiración estaba mal, alzó su vista para ver a su tío una vez más y éste lo estaba mirando con asco.
¿Se atrevía a mirarlo con asco?
Escupió cerca de donde Jin estaba tendido y caminó a la puerta, saliendo de esta con mala cara y azotando la puerta detrás de él.
Cuando estuvo fuera, Jin se permitió llorar sin retenerse, las lágrimas salían con fuerza y de su boca no escapaban más que sollozos, rezaba porque alguno de los guardias viniera por él, pero era más que lógico que esto no sería así.
Cerró sus ojos y trató de dormir un poco, el miedo estaba sobre él, a pesar de que la puerta estaba cerrada, él aún estaba atado y aquello le había vulnerable.
Cerró sus ojos con fuerza, aún más que hace unos segundos, y trataba de imaginar cualquier lugar excepto este.
El ruido de la puerta abriéndose le hizo temblar, rápidamente intentó zafarse nuevamente, la persona entró a paso lento y cuando estuvo frente a él soltó un grito de horror.