RENACER (RUSO PARTE 2)

Capitulo 7

Su peso sobre mi cuerpo me dificultaba respirar, mis pulmones apenas y recibian aire, mi garganta quemaba, mi pecho ardia, mi cuerpo convulsionaba del dolor, de la humillacion.

Estaba sobrepasada por todo esto, su cuerpo, su respiracion en mi oido, su voz, sus dedos, su polla, hasta su simple olor me superaba, me vencia, me heria.

Su polla se sentia como una espada de fuego en mi interior, cada movimiento dañaba mi interior, sus malditos dedos se sentian enormes cuando atacaban mi clitoris, el interior de mi vagina, mi mente luchando con todo, intentando mezclar el dolor de mi culo con el placer que provocaba su toque, el asco que me provocaba su toque
-no puedo, duele demasiado por favor, rogue cuando me exigio que me corriera, sentia su polla pulsando dentro de mi, sus embestidas dejaron de coordinarse, su cuerpo luchando por su propia liberacion.
Su semilla se sentia como lava, invadiendo mi interior, profanandome, manchandome con su podredumbre.
Las lagrimas nunca pararon, no podia dejar de llorar, era demasiado para soportar.
Su cuerpo se sentia como una tonelada sobre mi, su pesada respiración en mi oído, abanicando mi piel
-no te corriste murmuro en inglés, su voz sonó casi apenada
Mi corazón se desmoronaba, se rompía en pedazos que nunca podrían volver a unirse.
Pasamos minutos así, el sobre mi, la sensación de su polla ablandando se en mi interior fue rara, desagradable.
Mis lágrimas dejaron de salir, mi corazón aunque roto no podía permanecer así, debía dejar todo de lado, debía ser más fuerte, el no cambiaría, no dejaría de violarme, no pararía su tortura, la única que podía cambiar era yo, y lo debía hacer, debía ser más fuerte que el, más inteligente, más audaz.
Recordé sus palabras, las que pronunció la primera vez que me violó.
-si me corro no cuenta como violación-dije sollozando- no me corrí, ahora sí lo es dije, rompiendo en llanto.
Su cuerpo se puso rígido, su respiración se aceleró.
-maldita puta grito alejándose de mi, el calor de su cuerpo dejándome fría sobre el duro suelo, mi culo ardiendo y aliviado al mismo tiempo por su salida.
Me quedé tirada, como si fuera basura o un mueble más, una alfombra para que cualquiera camine por encima.
Maksim se alejó, me dejó ahi, recién follada con el culo y el alma rota. Indefensa con mis brazos atados en la espalda.
Me quedé mirando al vacío, la hermosa entrada, el enorme reloj que lucía caro, marcando cada minuto, cada segundo de mi dolor, sin parar, sin atraso. Recordé cuando era libre, recordé a mi familia, mis hermanos, mis amigos, cuando el sexo era divertido y no una tortura.
Cuando la calida brisa y un sol ardiente bañaban mi piel, cuando todo era verde, lleno de vegetación y no blanco, cubierto de nieve, toda vida sobreviviendo al frío invernal, me sentía como las plantas, los animales en el exterior, solo que yo no tenía ningún mecanismo para hacerlo, yo no podía invernar intentando sobrevivir, mi única opción era luchar y sobrevivir o morir o en el intento.
Mis brazos y hombros comenzaron a hormiguear por la posición, agujas clavándose en mi piel.
Así fue como me encontraron, casi inconsciente, el grito de una mujer me saco de mi trance, una brisa fría calo en mis huesos, mis brazos fueron desatados con rapidez, liberando la tensión. Casi grite cuando mis brazos cayeron a mis lados, el dolor sumándose a los otros, me giraron con suavidad, los ojos azules de Sasha frente a mi fueron lo primero que vi.
Intente sacudirme, alejarme de el.
-shh, shh, tranquila, solo te llevaré arriba dijo tomándome en sus brazos con suavidad.
Por el rabillo del ojo vi cabello rojo, en el hombro de un hombre enorme, supuse que eran Víctor y su esposa, lo más probable fue su grito el que escuché.
Me aferre al pecho de Sasha, apretando su camisa, mojando su camisa con mis lágrimas.
Entramos en una habitación y me coloco en una cama, cubriendo mi cuerpo con una manta.
Me coloque de lado, para evitar que mi culo toque la cama, esa era la parte que más me dolía en este momento, y eso era decir algo en comparación con el resto de mi cuerpo.
-llamare al médico para que te revise. Dijo sentándose en la cama a mi lado
-  Ты нужен мне здесь (1)
-Диана снова(2) colgó luego de pronunciar mi nombre con acento ruso.
Comenzó a alejarse, su enorme cuerpo cerca a la puerta
-porque yo- le pregunté, él era la razón por la que estoy aquí, el me trajo aquí, fue un maldito ratón en su juego depravado, un peón más, un pedazo de carne para ser vendido.
Su cuerpo se puso rígido y de acercó a la cama, ocupando el lugar que dejó hace tan solo segundos. Solo que esta vez no solo se sentó, el desgraciado se acostó frente a mi. Quise alejarme pero me atrapó con sus brazos, impidiendo que me alejara. Obligada a mírarli segui preguntando.
-porque yo, hay mujeres más hermosas, con mejores cuerpos, perfectas, por que yo-dije mirándolo, casi gritando, exigiendo una respuesta, exasperada por su silencio, por la forma en que me miraba, me iritaba su sola presencia.
-en realidad no lo sé, no sé que vi en ti en ese momento, yo mismo estuve confundido- respondió tocando mi rostro con suavidad, sus ojos intentando derribar mis barreras, descubrir mis secretos-ya había elegido a todas las que traería, hasta que te vi en esa cafetería, tan linda, tan perdida, buscando sin buscar y me gusto lo que vi. Me gusto como me senti cuando te vi, por eso te tome para mí, para hacerte mía. Me gustó la inocencia en tus ojos, la candidez que emanabas, lo quiero para mí  y lo haré luego de que Mak se aburra de ti, te tendré solo para mi. Te hare feliz, seremos felices juntos dijo asustandome.
Mi corazón se agitó, latiendo tan fuerte que estaba segura que Sasha podía escucharlo, su declaración me dejó sin palabras, sin respuesta. Mi mente se llenó de posibilidades,, un nuevo mundo florecio para mi, un mundo lleno de oportunidades.
-no soy hermosa, apenas promedio y mi cuerpo ni se diga dije acercándome a el, mis labios casi tocando los suyos.
-la belleza se acaba, tarde o temprano lo hace asi luches, asi no lo aceptes, el cuerpo se marchita, y solo queda una carcasa que cubre nuestra alma, al final solo queda nuestra alma.
-porque me trajiste si solo me querías para ti, sabias lo que me pasaria, sabias lo que haria el animal de Maksim