Capítulo 15 | Feliz— En la biblia no se menciona a Lilith, ¿De quien hablas entonces? —Violet esta vez decidió empezar la conversación mientras el albino estaba en una esquina sentado haciendo muecas— ¿No te aburres de seguirme todo el tiempo? —tomó aquel gran balde de avena para empezar con su labor de alimentar a los caballos y limpieza del establo.
— Ustedes los humanos confían demasiado en ese libro cuando ya fue tocado por sus manos. Seres llenos de arrogancia, odio y avaricia —suspiro— últimamente las personas no venden sus almas, eres la única que lo ha hecho en unos miles de siglos, estoy aburrido, me gusta venir a observar.
— ¿El que cuida las puertas del infierno esta aburrido? —burló mientras deposita la avena en un comedero— debes estar bromeando.
— ¿Tan malo soy para ustedes? —soltó una risa levantándose— son muy graciosos, ustedes mismos son dueños de sus actos ¿Piensan que no habrá consecuencias por ellos? —se inclinó hacia ella— los humanos me temen porque soy lo más cercano a ustedes, desafié a mi padre y eso hacen todos los días.
— ¿Y valió el precio por haberlo desafiado? ¿Perder el paraíso?
— Valdría más que mil paraisos —se acercó a ella para poder ayudarle a cargar aquella pesada avena, arrebató el balde de sus manos— los caballos son preciosos.
— Lo sé —sonrió— ¿Te has transformado en uno?
Lucifer no pudo evitar soltar una risa enorme, una gran carcajada haciendo que sus dientes perfectos se hagan notar, cosa que hace sorprender a la rubia.
— Eres graciosa Violet —una de sus manos subió hasta su cabeza para poder despeinarle su cabello— mi padre es el único que puede transformarse en lo que él desee, nosotros no —dio una sonrisa antes de comenzar a caminar por el establo repartiendo más avena a los demás caballos, ese comentario hace sorprender a la creyente— sí, mi padre fue aquella serpiente —dejó aquel gran bote en el suelo— Lilith fue creada mucho tiempo atrás que las historias que has leído, yo solía observarla en el paraíso mientras ella caminaba y jugaba por el valle, creía que no me veía pero era más inteligente que yo. Mis tardes fueron llenas de sol, caminatas por el sendero y ella, a mi padre no le gusto cuando se dio cuenta y me exigió que me alejara de ella.
Evergarden desvió la mirada hacia el caballo que estaba a su lado.
— Me revele ante él y cuando creí que sería el único... Lilith también lo hizo —ladeó la cabeza un poco— también fue castigada por ello.
— Lamentó mucho escuchar esto, solamente te enamoraste y fuiste juzgado por ello. No eres tan malo como dicen que eres —se sonroja un poco— ¿Lilith?
— Desapareció como si nunca hubiera existido y yo... bueno —giro un poco para que pudiera ver su espalda, el nacimiento de apenas unas alas que han sido cortadas— fui expulsado y mi padre me asignó la tarea de cuidar el infierno que es a donde van aquellos que en vida fueron contra él, así como lo hice yo y querida... tienes el primer puesto. —le giña en ojo de burla.
Violet está apunto de contestar pero unos pasos a su espalda la hacen girar. Un azabache de estatura pequeña la observa con curiosidad, la rubia siente tristeza, justo en este día ambos estarían despidiéndose de Petra y jamás se separarían, se unirían más hasta tal grado en que ella haría esto.
— Hanji me ha comentado que no saben que tienes, un resfriado es lo más seguro aunque ahora notando que no has hecho esta labor a la perfección como siempre y estás hablando sola... no solo es un resfriado —se cruza de brazos— no puedo tener a alguien enfermo en mi escuadrilla y mandarlo como si nada a las misiones.
— Estoy en perfectas condiciones, capitán. Me gusta hablar conmigo misma aveces —Lucifer no se ha marchado, sigue atrás observando la escena. Rasca su nuca nerviosa— ¿Usted se encuentra bien?
— Mi pierna está adolorida pero me recuperaré con el debido reposo y como ambos estamos en las mismas condiciones me ayudaras con el papeleo de los caídos de la última expedición —se gira anunciando su retirada— eso es hoy en la noche, no tardes.
— Sí señor —hace una leve reverencia.
Tan ajenos en este momento, tan distintos como el agua y el aceite, tan... doloroso cuando él se marcha y ahí en el fondo su amiga Petra le está esperando, extiende sus brazos hacia él y le abraza finalmente.
Lágrimas gruesas empiezan a bajar del rostro de la rubia, el albino se acerca a ella lentamente colocándose a su lado. — Levi se ve tan feliz —dice entre llanto tratando de que su voz no suena más rota de lo que está— y eso me hace tan feliz.
Lucifer coloca su mano en su hombro.
— No pareces feliz...
— Lo estoy, soy un humano que descubrió que apenas es uno hace unas semanas atrás y ahora estoy sintiendo por primera vez lo que es estar enamorada de alguien que nunca me va a amar. Estoy tan feliz de saber que al menos él será feliz —su voz comienza a tomar fuerza— se siente como un...
— Aleluya —dicen los dos al mismo tiempo. Lucifer le sonríe tan solo un poco y aquí es donde la rubia se da cuenta que el diablo no es tan diablo y que en sus ojos se observa una triste mirada— ¿Dejará de doler? —limpia sus lágrimas para darse media vuelta y agarrar una escoba— Ey, tengo una gran idea. ¿Me acompañarías al pueblo?
El albino se encoge de hombros.
— No tengo opción.
Ambos comienzan a caminar dejando atrás a aquella pareja, Violet puede observar por el rabillo del ojo como ellos se acercan lentamente a sus rostros pero antes de poder finalizar la escena, Lucifer la hace girar por completo hacia enfrente. — No mires atrás, de nada sirve.
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ハレルヤ | 𝒜𝓁𝑒𝓁𝓊𝓎𝒶, 𝐿𝑒𝓋𝒾 𝒜𝒸𝓀𝑒𝓇𝓂𝒶𝓃
Fanfiction𝒜𝓁𝑒𝓁𝓊𝓎𝒶「 levi + lectora + shingekinokyojin 」"donde el diablo no es tan diablo y donde violet descubrió que es un humano"