8.

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No podía quitar la vista del suelo.

El cigarrillo entraba y salía por su boca, expulsando el humo cada cierto tiempo, y a pesar de estar con todos a su al rededor, tenía la cabeza en otra parte por lo que el ruido parecía haber sido bloqueado completamente de su audición.

—¿En qué piensas tanto?

—¿Huh? Nada, ¿por qué?

—Estás distraído, deja de preocuparte tanto por tus calificaciones, no vas a repetir— Mencionó Hyunjin, pensando que quizás era eso lo que tenía al mayor con la mente tan ida.

—Lo sé, tengo un examen la próxima semana así que estoy un poco intranquilo, nada más— Mintió—. Voy al baño

Y no dejó al pelinegro ni siquiera responder cuando tiró la colilla al suelo, pisándola rápidamente para luego salirse de su lugar y caminar dentro del establecimiento en dirección a los baños.

Estaba vacío, por suerte, así que tan solo entró a uno de los cubículos y sacó su teléfono de forma rápida comenzando a revisar sus mensajes, sintiendo una presión en el pecho mientras iba leyendo.

Hizo la llamada, depositó el dinero suficiente en la cuenta ajena, y salió del lugar para ir a mojar su rostro con intención de calmarse.

Pero no estaba tan solo como hace unos minutos.

—Siempre te encuentro en todas partes, ¿será una señal?— Bromeó acercándose al más bajo, quien seguía enjuagando los pinceles en el lavabo sin levantar la vista.

—Vamos en la misma escuela, es obvio que nos veremos seguido

—Hey, un poco de sentido del humor no te vendría mal

No respondió, y finalmente alzó los ojos cuando Minho se puso al lado suyo, apoyando su cadera en el borde de la cerámica y observando fijamente al rubio.

—Ven a una fiesta hoy en la noche

—No, gracias

—Solo será un rato, es miércoles, no va a durar mucho— Insistió.

—¿Hablaba en serio con que iba a invitarme hasta que acepte? Deje de perder su tiempo

Y cuando Jisung colocó todos los pinceles limpios sobre una pequeña toalla seca manchada con pintura, el mayor jaló de la esquina e hizo que todos cayeran al piso, riendo cuando vio al chico cerrar los párpados y soltar aire tratando de mantener la calma.

—Fue un accidente

—¿Ganó algo haciendo eso?— Preguntó en voz baja, intentando no demostrar como su garganta se había apretado.

—Satisfacción

Se confundió cuando de pronto Jisung dejó de moverse por un segundo, de un momento a otro recogiendo todo velozmente y levantándose sin darle la cara a Minho, yendo rápido hacia la puerta saliendo de golpe notando como sus manos temblaron al tomar la manija.

Quiso ir tras él, pero cuando salió tan solo pudo ver su espalda mientras Felix lo miraba preocupado tomando sus bracitos, viendo por detrás del rubio luego para observar con ojos llenos de odio al castaño parado en la entrada del baño.

—Ven, vamos al del segundo piso— Mencionó tomando de la mano a Jisung, caminando lejos de la persona que, supuso, había hecho al chico llorar.

Revisó que no hubiese nadie y cerró la puerta cuando estuvieron dentro, haciendo que se acercara a los lavabos para mojar su rostro y lavar las lágrimas que empaparon sus mejillas.

—Te dije que no debías acercarte a él, Hannie— Dijo con voz suave, no queriendo hacer sentir mal al rubio—. Yo sé que parece una buena persona, pero te aseguro que no lo es

Virgin | Minsung Donde viven las historias. Descúbrelo ahora