Virgin | Minsung

14.

Tal vez era momento de intentar algo distinto con Jisung.

Si el hecho de ser coqueto parecía ahuyentarlo en vez de atraerlo tendría que probar con todo lo contrario para ver si lograba despertar aunque sea una pizca de interés de vuelta.

No podía romperlo si no conseguía atraparlo.

Quizás al menor le gustaría alguien que no sea demasiado cariñoso, que tuviera carácter fuerte y de vez en cuando fuera algo distante o cruel con él.

Bueno... esa era su personalidad con todo el mundo.

O al menos eso le gustaba aparentar.

Había ido más tarde de lo habitual a casa de Jisung, llegó mucho después a la hora que el menor le dijo aún si eso peligraba ya que su madre podía llegar del trabajo en cualquier momento.

Al principio el rubio se había molestado por su impuntualidad, pero cuando Minho tomó sus caderas y atacó su cuello sin dejarlo terminar de hablar todo su enojo se esfumó rápidamente.

—Hyung, no, así no— Lo detuvo cuando Lee jaló sus cabellos para poder saborear más a gusto su cuello— Así

Jisung tomó la mano ajena para acomodarla en su rostro, haciendo que lo acunara y le mostró cómo debía girar su cabeza "correctamente".

—¿Te lastimé?

—Un poco

El aura de Minho decayó, pero, otra vez, no demasiado como para que fuera notorio.

No por haber lastimando al chico como tal si no por... la forma en la que lo hizo acunar su rostro.

—Está actuando extraño

—¿Yo?— El chico solo asintió— ¿Por qué lo dices?

—No lo sé, solo lo siento distinto... — Minho no respondió, no sabía que decir realmente— ¿Hyung? ¿Puedo hacerle una pregunta?

—Adelante

—¿Alguna vez le ha gustado alguien? ¿O le gusta alguien ahora?

—¿Siquiera sabes lo que significa eso?— Molestó, haciendo a Jisung formar un puchero el cual el castaño besó inmediatamente— No, ninguna de las dos

—Me gustaría saber que se siente... debe ser lindo

—Ya vendrá alguien, bonito, no te apures

—Usted es muy cambiante, ¿se ha dado cuenta?

El menor se bajó de las piernas ajenas, tirándose en la cama y estirando su cuerpo haciendo que su abdomen quedara expuesto por unos segundos.

Los suficientes como para que los ojos de Minho lo escanearan.

—Llegó de muy mal humor y ahora está como si nada

Atacó sus labios sin contestar, mordiendo el inferior provocando que Jisung soltara un leve jadeo sin poder evitarlo. Tomó sus caderas aún sobre él, y pronto sus piernas se enredaron para que luego Minho comenzara a frotar su rodilla sobre el miembro ajeno.

—H-Hyung...

Y es que se sentía tan bien que la sensación le provocaba ganas de parar por no poder soportarlo, pero a la vez, no quería que lo hiciera.

—¿Me detengo?— Preguntó bajando una de sus manos ahora, sonriendo cuando sintió la dureza en su palma.

Jisung negó desesperado, uniendo sus bocas con hambre otra vez, cerrando los ojos cuando el mayor se fue hasta su cuello.

Minho siempre evitaría a toda costa hablar sobre sí mismo frente al rubio.

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