_____ pasó el resto del día durmiendo. Cuando abrió los
ojos, la habitación estaba vacía. Una suave luz de pared
estaba encendida y _____ se sintió agradablemente
adormilada. La enfermera de noche entró, sonriendo,
para tomarle la temperatura y el pulso. Le dieron unas
pastillas. Unos minutos más tarde, _____ volvió a
dormirse.
Cuando se despertó, un hombre alto, rubio y apuesto de
ojos oscuros estaba sentado en el borde de la cama.
Estaba muy guapo con esos pantalones blancos y una
camisa roja.
- ¡Miguel, qué sorpresa! - _____ sonrió.
- ¿A quién iba a contarle yo mis penas si te suicidaras,
idiota? - Murmuró él mirándola enfadado - Lo que has
hecho ha sido una estupidez.-
Apoyándose en un codo, _____ se incorporó al tiempo que
emitía un gruñido.
- ¡No he intentado suicidarme! Me emborraché, eso es
todo. Y cuando la señora Lester vio un frasco de pastillas
vacío se puso histérica - _____ se puso la mano en la
boca al bostezar - En fin, supongo que no puedo
echárselo en cara. Yo aún tenía la pistola en la mano y
había un agujero en la pared.-
- ¡Una pistola!-
- No grites, me duele la cabeza. Sí, una pistola - _____
sonrió traviesamente - Iba a pegarle un tiro a un ratón.-
Los ojos de Miguel se agrandaron - ¿Qué?-
- Hay un ratón en la casa - Explicó ella - He puesto
trampas por todas partes, pero nada, sigue apareciendo
por la cocina constantemente. Después de un par de
copas, me acordé de una escena en una película en la que
Tomas Wayne dispara un tiro a una rata; cuando ya me
había bebido la mitad de la botella, me pareció
perfectamente lógico disparar a un ratón - _____ se
interrumpió y rió débilmente - Deberías haberme visto.-
- Sí, supongo que sí - Murmuró él fijándose en los
enrojecidos ojos de su amiga - Trabajas demasiado,
_____. Ayudas a todo el mundo a recaudar fondos para
todo tipo de causas. Y ahora, a pesar de que estás
preparando las esculturas para la exposición, sigues
intentando cumplir con tus obligaciones sociales. Me
sorprende que no te hayas derrumbado mucho antes.
Intenté advertírtelo, sabes que lo intenté - _____ asintió
y suspiró.
- Lo sé. No me había dado cuenta de lo mucho que me
estaba esforzando.-
- Lo que necesitas es casarte y tener una familia, eso te
mantendrá ocupada - _____ arqueó las cejas.
- ¿Estás sugiriendo que estarías dispuesto a hacer ese
sacrificio? - Miguel rió.
- Quizá fuese lo mejor para ambos. Los dos estamos
enamorados de alguien que no nos quiere; al menos, nos
tenemos mucho cariño.-
- Sí, pero el matrimonio debería basarse en algo más que
en eso.-
Miguel se encogió de hombros.
- No le des más vueltas, sólo era una idea - Se inclinó
sobre ella y le dio una palmada en la mano - Ponte bien,
¿De acuerdo? Hay una fiesta la semana que viene a la que
quiero que me acompañes. Ella va a estar allí.-
_____ sabía quién era «ella»: la cuñada de Percy, la
mujer con la que se habría casado. Pero ella nunca se
había fijado en Miguel, a pesar de lo guapo que era, y se
había casado con el medio hermano de él. El medio
hermano de Miguel era veinte años mayor que él y, en su
círculo, a nadie le caía bien. Ese matrimonio era un
misterio para todo el mundo.
- No tengo un vestido para la fiesta.-
- Cómprate uno - _____ vaciló - Vamos, yo te protegeré
de él - Dijo Miguel al darse cuenta de que casi con
seguridad Liam estaría en la fiesta - Te juro por mi
glorioso Mark VIII rojo que no te dejaré sola ni un
momento.-
Ella le lanzó una débil mirada. De todos era conocida la
obsesión de Miguel por ese coche, ni siquiera dejaba que
lo lavaran en el garaje. Lo lavaba y lo enceraba él mismo
y lo llamaba «Big Red».
- Bueno, si lo juras por tu coche, de acuerdo - Miguel
sonrió maliciosamente.
- Te dejaré que lo conduzcas.-
- ¡Qué honor!-
- Te he traído unas flores - Añadió él - Una de las
enfermeras ha tenido la amabilidad de buscar un jarrón
para ponerlas.-
Ella le sonrió.
- No me extraña. Todas las mujeres se vuelven locas por
ti.-
- Menos la que me gustaría que se volviera loca por mí -
Dijo Miguel con tristeza - En fin, ya es demasiado
tarde.-
_____ le tomó la mano y se la apretó suavemente.
- Lo siento, Miguel.-
- Y yo - Miguel se encogió de hombros - ¿No te parece
una verdadera pena? ¡Mira lo que se están perdiendo!-
_____ sabía que se estaba refiriendo a Liam y a la mujer
que Miguel quería, y sonrió.
- Sí, ellos se lo pierden. Y sí, estaré encantada de ir
contigo a la fiesta. Hoy me dan el alta, ¿Quieres llevarme
a casa?-
- ¡Claro!-
Pero cuando el médico entró en la habitación, se mostró
contrario a darle el alta. _____ lo miró fijamente.
- Lo digo en serio, no tenía ninguna intención de
suicidarme.-
- ¿Qué hay de la pistola? Habías disparado un tiro.-
_____ apretó los labios.
- ¿Nadie se ha fijado en dónde dio la bala? - El médico
frunció el ceño - ¡El ratón! - Exclamó _____ - ¡Llevo
semanas persiguiendo a un ratón! ¿Es que no te gustan
las películas de Tomas Wayne?-
De pronto, el médico agrandó los ojos.
- ¡Dios mío, claro!-
- ¡Exacto, claro!-
El médico estalló en carcajadas.
- ¿Querías matar al ratón a tiros?-
- Tengo buena puntería - Protestó ella - Al menos,
cuando estoy sobria. ¡La próxima vez no fallaré!-
- Te recomiendo que pongas trampas.-
- Es demasiado listo - Dijo ella - Ya lo he hecho, pero
sin éxito.-
- Cómprate un gato.-
- Me dan alergia - Confesó _____.
- ¿Qué me dices de esos aparatos electrónicos que
emiten unas ondas especiales? - _____ sacudió la cabeza.
- También lo he probado y el ratón ha mordido el cable.-
- ¿Y no murió electrocutado? - _____ arqueó las cejas.
- No. Es más, parecía más sano después del incidente.
Apuesto a que incluso le gusta el veneno. No, tengo que
matarlo a tiros.-
El médico y Miguel intercambiaron una mirada; después,
los dos se echaron a reír.
El médico la vio a solas al cabo de un rato, mientras
Miguel sacaba el coche del aparcamiento para recogerla a
en la entrada del hospital.
- Sólo una cosa más - Dijo el doctor con voz suave -
Diga lo que diga Liam, tú no mataste a Tomas. Nadie
podría haber impedido lo que ocurrió. Y lo primero que no
debería haber hecho fue casarse contigo.-
- Liam hacía lo imposible para que estuviéramos juntos -
Dijo _____ - Pensaba que éramos la pareja perfecta.-
- Liam no lo sabe. Estoy seguro de que Tomas no se lo
dijo, y también estoy seguro de que tú tampoco se lo has
dicho.-
_____ desvió la mirada.
- Tomas era el mejor amigo de Liam; de haber querido
que Liam lo supiera, se lo habría dicho él mismo. Como no
lo hizo, no me he creído con derecho de hacerlo yo -
_____ levantó el rostro y miró al médico a los ojos - Y
sigo pensando lo mismo, así que tú tampoco se lo vas a
decir, ¿De acuerdo? No tenemos derecho a destrozarle
una ilusión. Su vida no ha sido un lecho de rosas, ha
perdido un brazo y también a su esposa, a la que amaba
con locura.-
- Aunque no sé por qué - Dijo el doctor Gaines, que sabía
todo lo que había que saber sobre la elegante señora
Hart, cosas que _____ tampoco sabía.
- Él la amaba con todo su corazón - Dijo ella
simplemente - Sobre gustos no hay nada escrito - El
médico le sonrió.
- No, supongo que no.-
- Sabes una cosa, doctor Gaines, eres un buen hombre.-
El rió - Eso es lo que dice mi mujer.-
- Y tiene razón.-
- ¿No tienes familia? - ______ negó con la cabeza.
- Mi padre murió de un infarto y mi madre murió antes
que él, de cáncer. Fue muy duro para mi padre, la quería
demasiado.-
- No se puede querer demasiado.-
El rostro de ______ mostró una profunda tristeza.
- Sí, sí que se puede - Declaró ella con solemnidad - Pero
voy a aprender a no hacerlo.-
Miguel apareció con su coche y el médico se despidió de
ellos.
- ¡Míralo, me tiene envidia! - Dijo Miguel con una sonrisa
maliciosa - Quiere mi coche. Todo el mundo quiere mi
coche. ¡Pero es mío, sólo mío!-
- Miguel, estás demasiado obsesionado con este coche -
Le advirtió ella.
- ¡No, no lo estoy! Ten cuidado, me vas a dejar marcas
en la ventanilla. Y espero que te limpies los pies antes de
entrar - _____ no sabía si reír o llorar - ¡Eh, es una
broma! - Exclamó él. _____ dejó escapar un suspiro de
alivio.
- ¡Y el doctor Gaines quería que yo fuera a ver a un
psicólogo!-
- No necesito un psicólogo, a los hombres les gustan los
coches. Un tipo que conocí incluso llegó a escribirle una
canción a su camioneta.-
_____ contempló el lujoso interior del vehículo y asintió.
- Bueno, reconozco que podría enamorarme de Big Red -
Apoyó la cabeza en el respaldo del asiento y cerró los
ojos.
Miguel dio unas palmadas al volante de su coche.
- ¿Lo has oído? Le estás gustando - _____ abrió los ojos.
- En el momento en que lleguemos a mi casa, voy a
llamar al psicólogo - Miguel arqueó las cejas.
- ¿También al psicólogo le gusten los coches?-
- ¡Me rindo!-
Cuando llegó a su casa, una preocupada señora Lester
salió a recibirla.
- ¡Era un frasco de pastillas viejo! - Le explicó _____ a
la mujer - Y la pistola no era para suicidarme, sino para
matar al ratón de la cocina.-
- ¿Para el ratón?-
- Todavía no hemos podido cazarlo, ¿No?-
La señora Lester enrojeció y metió las manos en los
bolsillos del delantal.
- Pues parecía como si... - _____ le dio un abrazo.
- Es usted un encanto y la adoro. Pero lo único que me
pasó es que me emborraché, eso es todo.-
- Usted no bebe nunca - Declaró la señora Lester.
- No me quedó más remedio - Respondió ______. La
señora Lester miró a Miguel.
- ¿Por culpa suya? No debería estar con él si la impulsa
a beber.-
- ¿Lo ves? - Dijo Miguel - También ella quiere mi coche,
por eso quiere que me vaya. No puede soportar verlo día
tras día. La envidia la corroe...-
- ¿De qué está hablando? - Preguntó la señora Lester con
curiosidad.
- De su coche. Cree que usted quiere su coche.-
La señora Lester bufó.
- ¿Esa cosa roja que corre como un rayo? ¡No puedo
imaginarme a mí misma en una cosa así! - Miguel sonrió
maliciosamente.
- ¿Quiere dar una vuelta en mi coche? - Preguntó Miguel
pestañeando. La señora Lester se echó a reír.
- Soy demasiado mayor para coches deportivos. Pero
_____ tiene la edad apropiada.-
- Sí, así es. Y necesita que la mimen.-
- Le daré de comer y la obligaré a que descanse. No
debería haber dejado que me convenciera de que me
fuera de vacaciones. ¡La primera vez que la dejo y mira
lo que pasa! ¡Y los periódicos...! - De repente, se
interrumpió.
_____ la miró fijamente - ¿Qué periódicos?-
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Los hermanos Hart (5 historias diferentes con One Direction)
Roman d'amourEsta saga consta de cinco historias en las que se relata la vida de estos cinco hombres (los Hart), y como cada uno de ellos encuentra a su media naranja son más que nada románticas y en este album subiré las 5 (1 por una) el orden de las historias...