CAPÍTULO 5.

7K 594 129
                                    


BAYLEE.


—No seas ridículo Aarón. — replico sentándome en la silla giratoria de mi ordenador. — No pienso ir a una estúpida audición solo para probar algo que no es verdad. — comienzo a teclear sobre el trabajo de ciencias. — Además. — continuo. — Yo no siento nada por Styles, el podrá sentir todo lo que quiera por mí, pero jamás podrá hacer que yo sienta algo por él... no es mi tipo. — agrego.

—Inténtalo al menos. — insiste.

—He dicho que no. — Comienzo a exasperarme. — Y cuando digo no, es no. — le repito lo mismo que le dije a Harry.

....

Había perdido la cuenta de cuantas veces había maldecido a mi mejor amigo. Sinceramente me parecía algo estúpido volver audicionar, y estaba segura de que el gordo del profesor se burlaría en mi cara cuando me viera de nuevo. Había una fila larga de chicas que querían el papel, ellas estaban demasiado preparadas, y yo, bueno yo al menos sabía algunas líneas del libro.

—Esto es patético. — susurro para mí misma, dejando la fila para ir hacia la cafetería.

No sé cómo se me ocurrió hacerle caso al idiota de Aarón, esto no es lo mío, por más que me agrade la idea de pertenecer al club de teatro, soy demasiado tímida para el público. Me descuelgo la mochila y dejo el pequeño libreto que adquirí con una de las presidentas de dicho club. Lo releo un poco antes de lanzarlo lejos de la mesa.

Romeo y Julieta. — alzo la vista para ver al chico rubio más encantador de toda la escuela. Sostiene el libreto, leyendo las líneas del título. — ¿Te gusta?

—Es un lindo libro. — Expreso, sonrojándome por completo. — ¿Qué haces aquí? – pregunto con torpeza. Aparta su vista del libreto y me muestra dos vasos desechables con café. Que idiota, es una cafetería pública, y yo todavía preguntando que hace aquí. —Soy una tonta. — me remuevo incomoda en mi asiento.

—No lo eres. — toma asiento frente a mí y extiende uno de los vasos de café. — No te molesta ¿cierto?

—Por supuesto que no. — respondo de inmediato.

Jamás me molestaría tomar un café con Niall Horan, es decir, ¡ES NIALL! Lo único que siento son nervios y ese calor subir por mis mejillas cuando me muestra su sonrisa. ¡Santo dios! Tiene que dejar de sonreír todo el tiempo, moriré un día de estos a causa de ello.

— ¿Qué tal van las cosas con Harry? — pregunta, dándole un sorbo a su bebida caliente.

Aprieto los labios sin saber qué respuesta darle. ¿Cómo explicarle que su amigo no me interesa ni tantito? ¿Cómo decirle que es él quien me interesa? Maldita mala suerte la mía, su mejor amigo interesado en mí, yo interesado él, y él con la estúpida de Lily.

—Supongo que bien. — murmuro, tomando de mi café. — ¿Por qué? — le pregunto con curiosidad.

Suelta una risa nerviosa removiéndose en su asiento.

—No lo sé. — murmura. — Quizá para ayudarle un poco, verás , él es un gran chico, jamás se había interesado en una chica, hasta que te conoció a ti, fuiste como decirlo, su amor a primera vista.— hace una pausa y ruego por que no continúe, pero no es así.— Y debo decir que ustedes dos quedan perfectos.

—Basta. — le pido.

— ¿No te gusta?

— ¿Qué? Perdón. — titubeo. — es complicado, mira, Harry es uno de los chicos más guapos... Igual que tú. — admito en voz alta sin miedo.

— ¿Me encuentras guapo? — pregunta con diversión.

—No....— Frunce el ceño. — Digo sí. — me golpeo en la cara. Que estúpida. – Ambos lo son. — término por concluir.

—Pero Harry más.

—Debes estar bromeando. — resoplo dejando el vaso con café en la mesa. Me mira divertido, mientras niega seguidas veces. Maldición, debería morderme la lengua, solo estoy quedando como una idiota frente a él. Se inclina un poco hacia mí, entre abriendo sus labios.

—Entonces quieres decir, ¿que soy más apuesto que Harry? — murmura por lo bajo, chocando su fresco aliento en mi rostro.

Trago saliva con dificultad cuando miro la cercanía que tenemos.

—Toda la preparatoria lo sabe. — respondo con la voz entrecortada.

Sonríe alejándose.

—Gracias por encontrarme atractivo. — Se pone de pie. — Nos vemos más tarde, Baylee. — toma el café y comienza andar hasta la salida.

¡Santa madre! ¿Qué fue todo eso? ¿Acaso es un sueño? —Tengo que pellizcarme para darme cuenta de que no es así— me levanto de la silla y salgo con una sonrisa en mi rostro que sería difícil de ocultar. Necesito encontrar a Cassie y contarle lo que paso. Parece que corro por los pasillos, la emoción me puede más en estos momentos. Estaba segura que nadie podía arruinar mi felicidad por haber conversado con Niall en la cafetería hace un rato, pero no fue así. La persona delante de mí me toma del brazo para evitar que me caiga de espaldas.

Una linda sonrisa aparece en sus labios cuando me ve, parece que era lo que buscaba. Me inspecciona para ver si me encuentro bien. —Vaya, me has asustado. — respira con alivio.

—No creí que tuviera tan mal aspecto. — respondo con sequedad. No me interesa establecer una conversación ahorita con Styles.

—No era lo que quise decir. — Habla tomándome de la mano. — discúlpame, si mis palabras te ofendieron.

—Solo hare como que nunca las escuche.— aparto mi mano de la suya como si esta quemara.— Lo siento, me tengo que ir, entro a música en 10 minutos.— lo esquivo para ir al aula. Ya buscaría a Cassie en la salida.

—Baylee. — Me toma del brazo rápidamente, impidiéndome avanzar. — ¿Qué ocurre?— me pregunta con el ceño fruncido.

—Nada, ¿Por qué tendría que pasar algo? – me suelto bruscamente, dándome la vuelta para alejarme.

Sus pasos se escuchan detrás de los míos, lo cual me exaspera un poco, creo que tendré que ser más clara con él en estos momentos.

—Harry. — mascullo entre dientes. — Por favor, deja de seguirme, no quiero hablar contigo. – hago una pausa para mirar que nadie esté viéndonos. — Así que no me molestes más, búscate a otra chica, seguro que lo harás fácilmente.

— ¿Por qué me estás hablando así?— me cuestiona con tono de confusión. —Baylee. — me llama cuando no les respondo.

—Ocúpate de tus asuntos, y déjame en paz a mí.

—Pero Baylee...

— ¡No me interesas Harry!— termino por gritar— Así que déjame en paz, sabes perfectamente que al único que quiero es a Niall. — es lo último que digo, antes de irme a paso rápido de allí.

HARRY.

La veo alejarse con prisa de mi presencia, trago el nudo que se formó en mi garganta cuando pronuncio lo último. Levanto mi brazo derecho y lo pongo en mis ojos para ocultar las lágrimas que comienzan a resbalar por mis mejillas.

Nunca había sentido tanto desprecio como el de ella hacia mí, ¿por qué tiene que quererlo a él? ¿Acaso no se da cuenta de que él quiere a otra? ¿Qué tiene él de especial?

Golpeo fuertemente uno de los casilleros a mi lado. Doy la vuelta y voy a esconderme a las duchas. Que ganas tengo de golpear a alguien, lo peor de esta sensación es que tengo la necesidad de golpear a mi mejor amigo. ¿Por qué putas mierdas tiene que complicarme todo?





CRUSH ||h.s + n.h||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora