2. Oasis [Chrisberry] (TERMINADA)

Capitulo Ocho. Historia.

Cody

Era como si Dylan leyera mi mente y supiera exactamente lo que queria, que era no volver a casa aun. Era alguien intuitivo, ademas de divertido. Así que me invitó a que me quedara a cenar junto a su manada, lo agradeci porque de verdad aun no queria cruzarme con las Omegas de mi manada. Sabía que ninguna se arrepentia de verdad, y aunque dolia lo aceptaba... eran sus cachorros despues de todos. Cachorros idiotas despues de todo.

Dejamos la cabaña y fuimos hacia donde debían estar los demás, al llegar pude ver a muchos de los lobos, habian varios Alfa trabajando junto a una parrilla, también vi a algunos Betas cortando leña, uno tras otro. Los demás junto a la mayoria de Omegas estaban reunidos riendo y algunos Alfa cuidaban a sus cachorros más pequeños.

Justin se habia acercado a nosotros apenas llegamos, grito el nombre de Dylan y subio a sus brazos, movio la mano hacia mi y sumio al Omega en una conversacion cariñosa, apodos y frases cariñosas, besos en la frente—y en la nariz dadas por el pequeño—, restriegos y sonrisas. Eran adorables.

El cachorro corría por todas partes saltando y expulsando un aroma a felicidad cada vez que lo veia. Corria hacia el y subia a su espalda o a sus brazos, seguia llamandome "alfa tonto" y aunque Dylan lo regañara no hacia caso, pero a mi no me molestaba.

Fui recibido con los brazos abiertos por ellos, las Alfa de la manada se acercó a mi preguntandome si me sentia mejor, así que afirme que me encontraba mejor y fue su Omega quien se me acerco despues bromeando sobre Dylan y Justin, no los habia visto hasta que me gire, Dylan corria detras del cachorro riendo y diciendo que lo atraparla.

Observe a Albert unirse a la persecución solté una risa y vi a Justin correr aún más rápido, desapareció de mi vista cuando subió a un árbol, vi a Dylan apoyarse contra el mismo y mirar hacia arriba. Lo observe confundido.

Lo vi cambiar sus ojos a azules, mirando fijamente hacia arriba, así que desvié la mirada hacia el mismo lugar, allí estaba, justo arriba de mi cabeza, colgando de las piernas balancandoce una y otra vez con suavidad.

—Sostenlo —me advirtió la Omega.

Quedó confundido hasta que el cachorro se meció con más fuerza. Moví mis brazos en menos de un segundo, y tres más despues tenía al cachorro en mis brazos, ladeo la cabeza y acarició mi cabello, eleve las cejas, río y llevo los brazos por mi hombro.

Lo deje moverse con tranquilidad hasta que terminó en mi espalda, solte la camisa que llebaba cuando estaba acomodado en mi espalda, escuché un gruñido y el cachorro volvió a saltar para alejarse. Albert lo siguio esta vez.

Dylan se acercó a mí y se paró al lado mío, no dijo nada, solo observó al cachorro y a Albert corretear por el lugar, Evan se unió despues en su forma animal ayudando al más pequeño a huir de su tio.

Toda la manada está presente, son más de cincuenta personas, todos reunidos en un círculo alrededor de un gran círculo de plata tallada, el escudo de la manada reluce aunque está cobierto de una capa fina de tierra y polvo que se levanta con cada pisada.