2. Oasis [Chrisberry] (TERMINADA)

Capitulo Diecinueve. Cargos.

Dylan.

El revuelo en New Orleans llega a oídos de todo el mundo. Las noticias corren como si fuera que nadie nunca ha escuchado sobre Alfas siendo imbéciles. Aunque les daba el crédito, nunca antes cinco Alfas han atemorizado y aterrado a más de cien Omegas en un día. Era un récord, que esperaba que nadie intentará superar.

Habían pasado dos días después de eso, me habían dado de alta del hospital ayer por la mañana y no me había alejado de mi cachorro, ni de mi Alfa.

Cody estaba reacio a alejarse de nosotros, yo estaba débil, demasiado, así que él era protector con nosotros, tanto como lo era con los cachorros de su manada, pero multiplicado por tres. Justin al igual que conmigo solo aceptaba estar en sus brazos, repitiendo que no quería estar en los míos porque temía lastimarme, y aunque le había dicho que no lo haría, el negó y me regaño, pidió que descansará y le dejara al cuidado del 'Alfa Tonto'.

También comenzaba a creer que Cody tenía al cachorro en sus brazos era la razón por la cual no había salido corriendo para ir tras los cinco.

Me acurruque un poco más contra el Alfa cuando él soltó un ronroneo, estaba jugando con Justin y uno de los premios del juego era recibir una pequeña caricia en el cabello por parte del cachorro, aquel ronroneo era sólo una señal para que no dejara de tocarle el cabello, mire el rostro relajado del Alfa que observaba al cachorro Omega con atención.

Cody se giró hacia mí, lo mire a los ojos y bese su mejilla.

—¡Yo también quiero uno de esos! —pidió Justin, sonreí girando hacia él, puse dos dedos bajo, su barbilla y deje un pequeño beso en la mejilla.

—Mi pequeño cachorro —lo llamé, él sonrió, feliz y orgulloso —Te amo, bebé

—Yo también te amo mucho, mami

Le revolví el cabello y volví a apoyar la cabeza sobre el hombro del Alfa.

—Dylan Sprayberry, Omega Líder de la manada Oasis

Pude escuchar a la gente presente sorprendida por mi manera de presentarme, antes no se había escuchado de forma oficial, solo eran rumores en la ciudad que los 'salvajes' a veces ponían a sus hijos Omega al frente de la manada. Y ahora que se confirmó que era un líder en mi manada, además de a cual pertenece.

Me siento fantástico cuando miro a los Alfas sentados al lado derecho, todos golpeados y vendados, dos de ellos con los brazos rotos, producidos por mi y mi Alfa. Claro que era muy tarde para arrepentirse de sus malas decisiones.

No había mucho de qué hablar, no había nada que pudiera garantizar a los Alfas su libertad, no saldrían impunes de este delito, uno de los delitos más grandes en los últimos años, lo que más impactó a todos claro fue el estado en el que se encontraban los Alfas y mis visibles heridas.

Los murmullos y lamentos fueron callados por el gruñido de mi Alfa y el martillo del juez, quienes pensaban que Cody estaba allí por Leslie quien estaba presente con su Alfa, se dieron cuenta de que ese no era el caso, o al menos no era la única razón por la cual se encontraba allí.