A pesar de los constantes interrogatorios, Yoongi no pudo conseguir nada de aquellos dos imbéciles. Ambos habían planeado bien aquello, pero lo que más sorprendió a Yoongi, es que en cuanto cesaron los interrogatorios, el nuevo marques Jong había enviado a su hermano hacia el reino del cuál provenía la misteriosa prometida.
Jimin había estado decaído después del informe de Hoseok, aun cuando solo se enviaban cartas, podía sentir en ellas una inusual melancolía y no la usual alegría que tenía el menor al momento de contarle cualquier cosa.
Quería hacerlo sentir mejor, pero no sabía cómo hacerlo, lo único que se le ocurría era acompañarlo a las fiestas a los que los invitaban. Todos en el imperio habían estado sorprendidos al verlos en todas las fiestas juntos, poco a poco el menor comenzó a sentirse mejor, no sabía si era solo por su presencia o si era por algo más.
Pero le gustaba ver la sonrisa de Jimin, le gustaba escucharlo hablar, le gustaba tocar su mano y bailar con él también era muy bueno. Ambos podían bailar por horas sin darse cuenta, porque siempre se mantenían hablando de cualquier cosa.
Incluso cuando no había nada que decir, ambos se mantenían bastante relajados y tranquilos, como si aquello que estuviera mal se hubiera alejado de sus vidas.
Aunque claro, no todo era color de rosa o miel sobre hojuelas, lamentablemente la vida de Jimin e incluso su familia seguía estando en peligro. Yoongi no había querido decirle nada al menor, solamente había hablado con Namjoon y con el marques Park, para hablar sobre eso.
Había personas que estaban detrás de ellos, no sabía quiénes eran, ni quienes los enviaban, simplemente sabía que querían asesinar al lindo omega y a su familia. En cuanto eran atrapados, los mismos asesinos se suicidaban con algo que tenían en sus molares, aún buscaban la manera de evitar que eso pasara, pero los asesinos parecían tener buenos reflejos.
Sin embargo, los guardias hacían su trabajo como era debido y estaba completamente orgulloso de ellos. Poco a poco comenzó a sentirse más relajado cuando los ataques bajaron su intensidad, no debía confiarse y lo sabía. Era debido a eso que tenía mucha seguridad alrededor de la mansión Park e incluso Namjoon pasaba la mayor parte del tiempo en el lugar por lo que podía trabajar tranquilo.
— No será una gran fiesta, será bastante pequeña e íntima – explicó Jimin con notable alegría, en esa ocasión estaban en la mansión de los Park
— Eso es bueno, muchas y muchos tendrán los corazones rotos al saber que Seokjin se casara – bromeó para después beber un poco de té
— Lo sé, no han parado de llegar cartas llenas de disconformidad – comentó sonriente – Pero mi hermano esta tan feliz preparando todo
— Mientras se amen, todo estará bien – sonrió con cariño – Por cierto, los rumores dicen que ya te has tardado en aceptarme como tu alfa – bromeó
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No amaré en esta vida - YM
FanfictionPark Jimin había amado con todo su corazón, lo había dado todo por aquel alfa que decía amarlo. Realmente creyó ciegamente en aquel hombre que le juro amor eterno, jamás hubiera pensado que moriría solo en una fría cama, sin nadie a su lado... bueno...