Lo que podría haber pasado si....

Sólo a ti quiero tocar... 2/3

Veamos ahora que podría haber pasado por la cabeza de Serkan ...

Punto de vista de Serkan:

Hoy se han acercado, ya no hay mas formas de decirle que sigue enamorado de ella y que quiere volver a empezar con ella, esta vez él ha puesto todas las cartas encima de la mesa. 

Le ha dicho por activa y por pasaba que sigue enamorado de ella.

Mil veces le ha demostrado en estos pocos días que su prioridad ahora son ella y Kiraz.

No puede reprocharle nada y está tan agradecido de que le dijera que Kiraz era su hija que le hace quererla mas todavia.

Él ya no quiere reprocharse mas lo estúpido que fue al no querer cogerle el teléfono cuando la echó de su vida y ella por fin se fue. 

Si no hubiera sido tan terco, si no hubiera sido tan egoísta habría disfrutado de todos y cada uno de los momentos de Kiraz y de Eda en estos cinco años pasados.

Han pasado tres días y aun siente los labios de Eda en los suyos, esa mirada ardiente en la piscina, o lo cerca que estuvieron entre las rosas de la madre de Eda que él ha cuidado y le han mantenido cuerdo.

Le abrió su corazón de nuevo cuando le pidió que le escuchara, le dejó ver todos sus miedos, a volver a enfermar, a quedarse sólo de nuevo, le dijo que su mundo se apagó cuando ella se fue, pero también le dijo que él nunca dejó de quererla. Su amor por ella ha sido lo que le ha permitido seguir día a día.

Tenía claro que no era suficiente bueno para ella, pero a lo mejor, a su lado, podía aprender. Amor y ganas no le faltaban.

Hoy ella estaba celosa, y  ha descubierto, casi al momento de salvarle la vida, que sin ella y sin Kiraz su vida no seria una vida de luz sino una vida en la oscuridad.

Usaría cada uno de los días que le quedaban por delante para demostrarle que podía ser un hombre digno de ellas.

Y Eda sale del cuarto de Kiraz y casi tropieza con él que la espera a la salida. 

Está dormida— le dice Eda

Él se levanta y se pone frente a ella sin dejarle espacio para retroceder.

Bien... emmmm — le dice decidido a acercarse a ella.—me duele mucho el brazo Eda, ¿podemos dormir juntos esta noche? Por favor, necesito dormir en una cama —   Si solo pudiera notarla, sentirla una noche le daría alas para seguir intentándolo...

Mnnn mnnnnn — le contesta Eda negando — ¡No puedes engañarme Serkan!

Eda, hoy te he salvado la vida,— le dice con la piel de gallina sabiendo el dolor que le ha causado pensar en lo cerca que ha estado de perderla —  ¿crees que me merezco dormir en el suelo?¡Por favor ten piedad! — solo quiere verla despertar con esa sonrisa feliz de los primeros segundos antes de ubicarse y casi siempre gruñir.

Está bien, duerme en mi cama. — le dice ella.

Ehhhh. ¿Estás segura? — ¿ha oido bien? Su corazón se acelera, mira a Eda y desvía la mirada de su boca, ella empieza a flaquear y a el le ha dejado descolocado... 

Eso creo... — le dice Eda

¡Quizás no deberíamos dormir juntos en la misma cama!..- le contesta frotándose la cabeza y separándose unos centímetros de ella porque su cuerpo ha empezado a soñar con la posibilidad.

Si, puede que no lo haya pensado bien. .. creo que tienes razón No es buena idea.—le dice ella.

Aunque no te tocaría.— le dice intentando alejar las imágenes que se han formado en su imaginación.—  por supuesto no te molestaría para nada. Emmmmm oye — está demasiado cerca de ella, anhela algo de ella — ¿te importa que haga una cosa? — le susurra mirándole a los ojos

Ella gesticula, mirándole a los ojos, una afirmación....

¿Seguro? — le dice casi gimiendo  

Sigue sin poder emitir sonido alguno y su mente empieza a vagar con la fantasía de él acercándose a ella... esta vez asiente en silencio.

Porque me voy a acercar mucho... — le explica él mientras  se acerca mas a ella.

Aha ha — consigue decir ella. Mientras él le aparta el pelo de su hombro dejándole libre la clavícula e inclinándose sobre la parte trasera de su cuello y pone la mano izquierda en el centro de su espalda e inhala el aroma de ella que le llena el corazón de recuerdos.

He echado de menos tu aroma.... — le dice acercando sus caras tanto que puede sentir casi los labios de Eda. Está a unos centímetros de la felicidad absoluta, pero ella recupera el sentido.

 ¿Sabes que? Yo dormiré en el suelo, tu puedes acostarte en mi cama...— le dice ella

¿Estas segura?— le pregunta intentando mantener el momento y susurrando muy cerca de su boca.

Mjhhh mjhnnn — consigue contestar ella.

¿lo podrás soportar?¡El suelo está frio!— le sigue susurrando tan bajito y tan cerca que siente el aliento de ella cuando le dice 

Si supieras todo lo que he soportado ya... me acostaré en el suelo, iré a hacer la cama — dice ella que consigue romper el momento íntimo que están viviendo. 

Ella se va a las escaleras para hacer la cama.

CONTINÚA.......