Parte 4/5 ese perdón

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( Nunca he escrito para nadie mas q para mi. Esta es la primera vez q lo hago para otros. Os aviso q esta parte es para mayores de 18 años y no soy dueña ni de los personajes ni de las opiniones de aquellos intrépidos q se atrevan a seguir leyendo esta parte. Si os gusta seguiré escribiendo - Gracias a Saralma q me ha ayudado a atreverme con esto, a ordenar ideas y a buscar sinónimos y nos hemos reído la mar )

Serkan no sabe cuanto tiempo llevan bajo la lluvia cuando se da cuenta de que su mano derecha se ha metido bajo la manga de Eda y le está acariciando el hombro. Eda tiene la piel de gallina, Serkan separa sus bocas...

-Eda, lo siento, yo no debería... - le dice -

Eda le coge las mejillas con las manos y lo acerca para seguir con el beso - ¡cállate Serkan, cállate!- y entonces le besa ella.

Serkan está perdido, Eda le acaricia las mejillas con sus manos mientras sus lenguas bailan juntas, Serkan, sin saber como, ha desplazado sus manos a la espalda de Eda, nota un escalofrío, separa sus manos de la cintura de Eda y le coge sus manos, separa sus bocas, y sin soltarla le dice - ¡Eda!, ¡Eda! Te vas a congelar, estamos empapados, estas temblando, entremos, hablemos - la mira. Eda tiene los ojos dilatados, Serkan cree que nunca ha visto nada mas hermoso.

Eda está sorprendida y avergonzada, pero no quiere separarse ahora de Serkan, intenta acercarse de nuevo a la boca de Serkan, nunca la han besado como si fuera una flor única, con esa pasión y a la vez esa delicadeza, definitivamente no quiere parar, pero no sabe como expresar lo que siente. - ¡Serkan! - le dice cuando él aleja la boca.

¡No me lo pongas más difícil Eda!, por favor, vamos dentro, no quiero que te pongas mala. - le estira de la mano, Eda le sigue, entran dentro y empuja a Eda cerca de la chimenea - Eda, espérame aquí, ¡voy a buscar una toalla, no te muevas! -

Eda cae de rodillas y Serkan le pregunta - ¿Estas bien?

Eda le coge la mano a Serkan q sigue de pie y la mira - Serkan, ¡no te vayas!

Serkan se arrodilla delante de ella y le ahueca la mano en su mejilla - Eda, vas a coger algo, tienes que quitarte esa ropa y secarte, hace frio!

Eda pone su mano encima de la de Serkan, sobre su mejilla y le mira - ¡No te vayas! - y le besa de nuevo.

Serkan está perdido en las sensaciones que le provoca Eda, cada uno de sus toques es un calambre directo no solo a su entrepierna sino a su corazón, nunca ha sentido tanto, todo su cuerpo se ha convertido en un receptor de las caricias de Eda. Serkan vuelve a interrumpir el beso, y junta su frente con la de ella, Sus manos están en las mejillas de Eda, los pulgares le acarician el lugar donde cuando se ríe están sus hoyuelos. - ¡Eda, para! - le sujeta la cara sin apartar la frente, y la mira directamente a los ojos. A los dos les cuesta respirar.

Serkan suspira, la mira. - ¡Te quiero! - y la vuelve a besar, profundizando el beso, esta vez es Eda la que separa su boca de la de Serkan besando el camino a su oreja muy lentamente, mientras le muerde levemente ella le susurra - Nuestros sentimientos son mutuos Serkan Bolat.

Serkan la mira y le besa la mandíbula, va bajando por el cuello, Eda separa sus manos de Serkan y se quita el cinturón, y pone las manos en los botones de la camisa de Serkan, mientras no dejan de besarse el uno al otro.

Eda le saca la camisa del pantalón a Serkan y Serkan le sube las manos por la espalda y debajo de la camiseta. Sus dos manos suben a la vez, con los pulgares en los costados hasta que los pechos de Eda descansan en los pulgares de Serkan. Serkan le vuelve a atacar la boca mientras le desabrocha el sujetador. La mira, Eda le sonríe, tiene las manos en el mismo sitio que Serkan.

Eda le acaricia a Serkan el pecho con sus manos y deja la mano derecha quieta sobre su corazón, notando entonces su poder. Levanta la cabeza y Serkan le mira y sonríe, aprovecha ese momento separados para quitarle la camiseta a Eda que sale junto con el sujetador.

Lo que podría haber pasado si....Donde viven las historias. Descúbrelo ahora