C A P Í T U L O 22

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IZÁN:

-Querida novia amargada hoy tengo planes.- informo por el teléfono.

-Ey, no soy tan amargada.- se queja.

-Bueno un poquito.- admito, ella bufa.- Pero me gusta que seas así, toda amargada y poco cariñosa eso define una parte de ti y me encanta.

-Aww y a mí me encanta tener un novio cabezota.- confiesa riendo.

-Entonces hoy estas ocupada.- inquiero, espero que no tenga.

Cruzo los dedos, aparte no quiero que vaya al trabajo porque está el pesado de Iam.

-No hoy estoy completamente libre.

-Estás libre para mí.- hablo en cierto tono, que si estuviéramos en video llamada ella estaría sonrojada como un tomatito.

-Si.. ajam, vas a pasar por mi casa o...

-Voy a tu casa con Kevin .- la interrumpo.

-Esa moto siempre está con nosotros.- se queja.- No es mejor pedir un taxi.- sugiere.

-No.- respondo.- Soy yo o alguien está celosa de una moto.- la molesto.

Me encanta molestarla con la moto.

-Que tonterías dices, como voy a tenerle celos a una moto.- excusa.

-Kevin no se molesta en compartir, además siempre te hago caso a ti que a Kevin, a él lo dejo de lado.

-Para que negarme.- ríe.-A donde me quieres llevar, si es que puedo saber.- pregunta.

-A tu lugar favorito.

-Qué bueno que te acordaste.- menciona alegre.- Pensé que te habías olvidado.

Que me olvidé que, hoy no es su cumpleaños.

El tuyo ya paso.

-Pf, por supuesto que no me lo olvidé.- trato de recordar que día es hoy.

-Qué bueno.- suspira.- Cabezota no puedo creer que te hayas olvidado que hace casi ocho meces tu y yo nos conocimos.

Carraspeo.- No como crees.

-Izán.- reprocha.

-Soy tan malo fingiendo.- cuestiono

-Demasiado.- admite.

-Ignora eso, alístate que hoy es nuestro día.- hablo, al menos para calmarla un poco.

-Está bien, te espero.

-Adiós.

-Bye.

Cuelgo la llamada y rápidamente voy a la pared y me fijo en el calendario que está colgando busco la fecha de hoy y ella estaba en lo cierto dice: "ocho meses- conocí a la pequeña y amargada", como pude olvidarlo, a veces agradezco haberla llamado porque si la hubiera visitado ya estaría muerto; preparo algunas cosas y las meto en la mochila; busco dentro del armario que ponerme y entro a la ducha.

&

Antes de tocar la puerta saco unas cositas que le traje a la pequeña para que no me mate cuando me vea.

Preparado.

Sí.

Buena suerte, aunque la sargento te va a matar.

Gracias, por tu culpa tengo más miedo que ahora.

Ese es mi trabajo, ahora adelante toca el timbre que te llevará a la muerte.

Mi Mejor Compañía ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora