Un niño de melena ondulada y verdosa caminaba de la mano con otro menor de cabellera rubio cenizo, quien jalaba de la mano al primero; ambos niños cargaban redes con las que pescaban insectos de todo tipo, o en el pequeño arrollo atrapaban pequeños anfibios como ranas o salamandras.
Aquellos días de verano, en el pequeño bosque, el mundo les sonreía sólo a ellos.
Recuerda el peliverde aquella gran sonrisa del niño de ojos carmesí, verlo feliz a él, era como si toda la vida fuera a estar bien a su lado.
- Tonto Deku – le decía sonriente.
La imagen del rostro de aquel niño de cabellera ceniza se veía borrosa, pero la risa que este emitía sonaba como si la estuvieran tatuando en su memoria para nunca olvidarla.
- ........... -
- Iz -
-IZU -
- ¡IZUKU! – le gritaba una castaña a su amigo pecoso – ¡Gracias a dios! Nos asustaste demasiado, llevabas ya muchas horas inconsciente – le decía en un tono preocupado.
Al pecoso le costó unos minutos procesar lo que había sucedido, poco a poco, los recuerdos fueron fluyendo como si de una pequeña película en su mente se tratase.
Recordó que conoció a una niña muy especial, que había sido secuestrada por un villano muy poderoso, y que después se enfrentó con este mismo, el cual venció pero su cuerpo tuvo que recibir un gran daño para lograr tal rescate.
- ¡¡¡ERI-CHAN!!! – artículo en un grito mientras salía disparado de la cama.
Ochako había sido rápida así que con su quirk dejó a su amigo flotando por un rato para que le prestara atención.
- Izuku, cálmate – le tranquilizaba haciendo un movimiento de respiración con los brazos – ella está bien, lograron localizar a su madre y dijeron que en unas horas llegaría, aunque... – hizo cálculos en su mente sobre el transcurso del tiempo - puede que lleguen por ella en unos minutos – decía mirando el reloj de la pared.
- Uraraka, por favor, necesito verla y despedirme de ella – rogó a su amiga con ojos de cachorro.
Unos minutos después estaba Izuku caminando por el pasillo, cuando visualizó a la menor de cabellera plateada riendo y jugando con Mirio, con ellos, silenciosamente y sentado con mucho cansancio estaba el profesor Aizawa.
Estaba a pocos metros para que pudiera la niña escuchar a Izuku, y cuando el pecoso estaba por llamarla, la menor habló en tono alegre y con algunas lágrimas.
- MAMI, MAMI, MAMI – corrió hacia la salida, su aullido era alegre y con mucha nostalgia por el mes que no estuvo junto a su madre.
La pequeña había saltado a los brazos del omega, se unieron en un conmovedor abrazo; lloraron, para dejar salir tanto el omega la preocupación y la desesperación, como la menor la tristeza y miedo de jamás volver a ver a su familia.
El pecoso, con algo de dificultad por las heridas llegó hasta donde se encontraban Mirio y Aizawa. Observó también conmovido la escena de reunión familiar, hasta que poco a poco, se le hizo muy conocido ese distinguido cabello puntiagudo y rubio cenizo.
Cuando Eri y su madre dejaron de abrazarse, la menor hizo una seña de despedida, y el omega rubio, sólo volteo a mirar por primera vez a todos los héroes que se encontraban ahí.
- Kacchan... - susurró en su mente.
Aquel omega oji-carmesí, hizo una reverencia por haber protegido y cuidado a su hija; fue entonces que el pecoso recapacito, y lo observó con detenimiento al omega, tenía un parche en la mejilla y otra por la ceja izquierda, llevaba una mascarilla y aparte un vendaje en el cuello.
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AMOR EN EL KINDER (FINALIZADO)
FanfictionIzuku (Alfa) de 8 años tuvo una breve pero hermosa infancia junto Katsuki (Omega) de 4 años, pero por cuestiones de trabajo de su madre, tuvieron que mudarse a Estados Unidos, donde comenzó su preparación para convertirse en el actual héroe no. 1 a...