xxɪ

1.2K 205 82
                                    

Takemichi estaba conteniendo sus lagrimas, hace momentos habían ido donde la policía para reportar la desaparición de Kazutora porque no se sentía tranquilo al no saber donde estaba y sin saber si estaba a salvo o no, pero la policía no hizo nada porque se trataba de un omega, dijeron que harían lo que pudieran pero el mismo vio como los demás se burlaban diciendo que era lo de todos los días, sentia impotencia y se retiró para dejar que sus lagrimas salieran, Baji estuvo a su lado en todo momento, pero también estaba indignado por esos comentarios e intentaba consolar al beta. 

Baji se sentía intranquilo, sentía que algo le había sucedido a Kazutora y solo queria estar ahí para él, queria abrazarlo y hacerlo sentir seguro. 

En cuanto a Kazutora, estaba en un sueño del cual sentia que no podía despertar, todo era negro, no había algún cielo, pared o camino, todo era negro, caminaba sin rumbo en ese lugar oscuro hasta encontrar a un niño que estaba llorando en el suelo, mientras más se acercaba, estaba viéndose así mismo de su infancia, sus rodillas estaban vendadas, tenia curitas en sus brazos y en su rostro una gaza, el niño se sintió observado y levantó su vista, era la pequeña versión de Kazutora. 

¿Tendremos un bebé?— Preguntó con la voz hipeando de tanto llorar.

—¿Quieres tenerlo?— Se respondió a si mismo, a la pequeña versión que era de niño, tan vulnerable que no merecía todo lo que le pasaba. 

—Yo... tengo miedo...

—No deberías, somos fuertes y sabremos solucionarlo.

—Sigo teniendo miedo.— Volvió a llorar, las lagrimas bajaban de sus orbes rojizos y también por los hipidos comenzaba a tartamudear. —Quisiera decir que quiero estar con mamá... o papá, pero ellos también me dan miedo... no tenemos a nadie.— Llevó sus pequeñas manos a sus mejillas limpiándolas, haciendo una acción inútil porque seguían bajando las lagrimas. 

—No los necesitamos.

—Quiero ser amado...— Levantó su vista, observándose a si mismo. 

—Eso nos haría débiles.

—¿Deberíamos morir?— Preguntó quedándose sin más lagrimas para llorar, ahora bajó su vista al suelo oscuro, no tenían a nadie que los pueda consolar, ni así mismos se podían consolar. 

—Ojala. 

Kazutora siguió observando al pequeño que antes era, no sabía hasta cuando seguiría en este extraño sueño que le mostraba a como era de menor, o tal vez era una pesadilla. 

Estaba por seguir caminando sin rumbo para alejarse de su pequeña versión, pero una voz conocida apareció y detuvo su caminar. 

—¡Kazutora! ¡Te encontré!— Gritó otro niño de cabello negro yendo hacia la pequeña versión de Kazutora, lo agarró de sus brazos y lo levantó. —Tranquilo, no hay porque llorar.— Con gentileza comenzó a limpiar sus lagrimas. 

Baji/Baji.— Hablaron ambos. 

El menor tomaba la mano del otro niño, mientras que Kazutora se quedaba quieto viendo como ambos menores comenzaban alejarse, esa imagen de ambos agarrados de la mano, de Baji sonriendo y viéndolo mientras corren solo hacia que deseara poder haberlo conocido cuando era un niño, deseaba que ese sueño fuera real, le hubiera gustado tener a una persona como lo era Baji de cuando era un niño, alguien que lo quisiera y deseara pasar tiempo a su lado sin importar nada, ahora solo se reía por lo idiota que fue al haberlo alejado de una forma cruel, había alejado a la única persona que se preocupaba de como estaba. 

—Tome lo más preciado de mi vida, y lo destruí...— Se arrodilló y solo se rio de si mismo, ahora no tenia a nadie que se preocupara de como estaba, había arruinado el único cariño sin segundas intenciones que le estuvo dando el menor. 

Estaba en la nada, todo estaba oscuro y estaba solo. 

Kazutora estuvo sin despertar durante tres días, cuando por fin abrió los ojos una doctora lo reviso y recibio, dándole la noticia de como se encontraba su cuerpo. 

—Por el alcohol que ingirió y los golpes que afectaron su vientre, tuvo un aborto espontáneo, lo sentimos. 

Kazutora no dejaba de ver la ventana, no le importaba si perdió al bebé, estaba decepcionado por haberse despertado y seguir con vida, cuando la doctora se fue, no dudó en levantarse y quitarse los cables que estaban en su cuerpo, no queria seguir en esa habitación que solo lo sofocaba, el dolor en su vientre era desgarrador, sus piernas temblaban y sentia que en cualquier momento caería. 

—¡Kazutora!— Inui entró en la habitación y lo agarró antes que cayera al suelo. —¿Que mierda crees que haces? ¿No ves que no tienes fuerzas?— Lo regañó regresándolo a la camilla. 

—Atrévete a volverme a tocar y te rompo el brazo. 

—No estoy jugando, debes descansar, no hay nadie aquí aparte de mi, solo descansa. ¿Puedes? 

—Me quiero ir, siento que vomitare si sigo aquí, me da asco. 

Inui suspiro y se cruzo de brazos. —Ya no puedes estar aquí hasta que se calme todo, irás a Filipinas, tengo un socio allá y él te estará cuidando lo necesario. 

—¿Y ella se saldrá con la suya así sin más? Quiero matarla. 

—Ella es una alfa dominante, no hay nada que puedas hacer, lo mejor es que vayas a Filipinas, obedece

No queria discutir porque se sentia cansado, solo apretó su mandíbula para dejar de hablar y desgastar su energía, pero no iba a quedarse de brazos cruzados, iba hacer lo posible para que esa mujer pagara todo lo que le hizo. 





☁☁☀☁☁
¿Les gusta como se esta desarrollando la historia? 

Están sorprendidos, tristes, enojados o ns por como va? 

La verdad yo siempre quise ver como un omega abortaba, normalmente en las historias omegaverse el omega se queda con el niño de su abusador, resignándose a vivir en una familia, el alfa siempre lo termina mordiendo o vi0land0, el omega se fuga y es una persecución hasta encontrarlo, que tengan al niño y tengan su final feliz JAKSJA, si me gusta ese cliché(? pero necesitaba algo nuevo. 

Necesito ver a un omega abusado y embarazado, lidiando con un aborto y pensando en cómo hacer pagar a su abusador.🤺

Domar al Tigre. || 「BajiTora」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora