𝐓𝐇𝐈𝐑𝐓𝐘 𝐍𝐈𝐍𝐄

525 42 8
                                    

━━━━━ 𝐀𝐈𝐋𝐄𝐍 ━━━━━

— Trae tu trasero acá ahora. Tenemos trabajo que hacer.

Amigo, ya estoy en la cama. ¿No estamos un poco viejos para esto?

— Scott, por favor, vení así me puedo ir a dormir — me quejé ya que Stiles me trajo arrastrando literalmente.

— Lo hacemos por el entrenador y vos no te vas a ir a ningún lado.

Pensé que se lo hacíamos al entrenador.

— Lo que sea, lo necesita. Es vital para él. Le encanta.

Pero es media noche.

Doce y cuarto para ser exacto. Lo que significa que es oficialmente la noche/día de travesuras.

Mientras Stiles hablaba sacaba cosas de su casillero y yo me senté en unos de los bancos mientras esperaba, aunque la verdad me estaba quedando dormida, cerré mis ojos mientras escuchaba a Stiles.

— Y, cómo coincidencia, es el cumpleaños del entrenador. Si no llegas en cinco minutos te destruiré. Y quiero decir en cinco, cuatro, tres, dos...

Abrí mis ojos cuando escuché como Stiles se cayó.

— Uno — finalizó Scott.

— Te odio — dijo Stiles.

Me levanté del banco y abracé a el moreno.

— Gracias, ahora me voy a dormir.

— Te quedas acá — me dijo Stiles.

Yo bufé enojada aunque seguí estando abrazada a Scott y me estaba por quedar dormida hasta que casi me caigo pero él me agarró.

Te odio tanto, te voy a hacer lo mismo la puta que lo parió. No te voy a dejar dormir y si me decís que tenés sueño te voy a hacer dormir de una trompada.

— No entendí absolutamente nada pero supongo que me insultaste.

— Si tan solo supieras lo que te dije — reí.

Luego de despertarme un poco hicimos lo que tanto Stiles quería.

.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

— ¿Qué hacen acá? — pregunté con desgracia.

— ¿Volvieron a la escuela?

— No, solo queremos hablar — respondieron los gemelos.

— Es fuera de lo común para ustedes. Normalmente hieren, mutilan y matan — agrego Stiles..

— Necesitas una manada y nosotros un Alfa.

— Ajá, de ningún modo. Aunque muy gracioso — siguió Stiles pero este fue ignorado

— Nos pidieron ayuda y ayudamos.

— Si, bueno, no diría ayudar, casi lo dejan sin cara — dije.

— ¿Por qué diría que sí? — preguntó Scott.

— Aportaríamos fuerza.

— Te haríamos más poderoso. No tienes motivos para no aceptar.

— Se me ocurre uno. — Habló Isaac mientras se acercaba y se ponía a mi lado — Ustedes dos sosteniendo las garras de Derek mientras Kali empalaba a Boyd. No sé por qué no los estamos empalando ahora mismo.

Aiden deja ver sus colmillos y ojos azules.

— ¿Querés intentarlo?

Isaac se empezó a acercar a él pero agarré su brazo y lo traje hacia mí.

𝑳𝑨𝑻𝑰𝑵𝑨  ━ Teen WolfDonde viven las historias. Descúbrelo ahora