Poison ━ Bonten +18

xi. BEFORE THE PARTY

No había logrado dormir muy bien durante la noche.

Las palabras de Mikey habían estado rondando mi cabeza toda la madrugada cuando desperté mas temprano de lo que me gustaría.

"Rumi ya no es mía, ahora es de todo Bonten"

"Hagan lo que quieran con ella, no me importa"

Me hubiese gustado que no me afectaran tanto sus palabras, pero terminaron haciéndolo.

Había sonado muy cruel al referirse hacia mi como algo que ya no tenia valor. Otra vez me sentía como un cascaron vacío, no tenia sentido seguir viviendo si Mikey ya no me veía como algo importante.

Me seguía preguntando cual habrá sido la razón por la que hizo lo que hizo durante la noche. Cuando me miro a los ojos segundos antes de disparar, era como si él no me reconociera, como si fuera algún tipo de enemigo que tenia que ser erradicado lo antes posible. Desde el comienzo pensé que esto podía terminar de esa manera, pero no creí que fuera tan pronto.

Desde el sillón, donde me había quedado a dormir durante la noche, pude oír los pasos de alguien caminar hacia la cocina. Yo me levante sentándome en mi lugar para ver a Kokonoi, este estaba con su pelo largo un poco despeinado y con una bata de color granate. Me quede viendo un rato como él preparaba algo, aunque no dure mucho tiempo así, ya que decidí ir al baño para poder cepillar mis dientes y lavar mi cara.

Cuando termine y salí del baño me dirigí a la cocina, sorprendiéndome al ver a una cara desconocida sentada en el que se supone era el lugar de Kakucho.

— ¿Y tú quien eres? —pregunto de repente el hombre desconocido.

Yo mire a Koko, quien bebía café mientras nos observaba.

— Soy Rumi, Rumi... Sano... —dude unos segundos en utilizar el apellido de Mikey, no sabiendo si eso era correcto después de lo ocurrido. 

Pude observar una cicatriz que cruzaba su ojo izquierdo, su pelo estaba peinado hacia atrás. Mientras el se mantenía en silencio y me observaba de arriba a bajo sentí un poco de incomodidad y nervios.

— ¿Eres la novia de Mikey? —pregunto luego de un breve silencio. Yo asentí en respuesta mientras me acercaba a mi asiento cerca de Kokonoi, quien hasta el momento se había mantenido callado.

— Bueno, después de lo que paso a noche no creo que sea apropiado llamarlos "pareja"... —hablo Kokonoi viéndome de reojo, haciendo que me sintiera aun mas pequeña entre ellos.

— ¿De que hablas? —pregunto con un tono curioso el hombre de cicatriz.

Kokonoi iba a responderle, pero una voz bastante molesta hizo acto de presencia en la cocina.

— ¡AGH! ¡Que puto dolor de cabeza! —Sanzu entro a la cocina con la mano en el costado de su cráneo, haciendo presión mientras mantenía una mirada de irritabilidad. 

— Después te cuento, Takeomi... —dijo Kokonoi mientras volvía su atención a su café.

"Takeomi..."

Mire unos segundos como el tal Takeomi observaba a Sanzu desde la distancia, con una cara seria veía atento lo que hacia el pelirosado a mis espaldas. Pude percibir por el rabillo del ojo como Sanzu rebuscaba algo entre los gabinetes.

— Oh, genial... —escuche como Sanzu removía algunas cosas a mis espaldas, y luego de eso arrastraba una silla para sentarse. Termino por sentarse al lado mío con una pastilla en la mano y una botella de cerveza.— Hora del desayuno...

Luego de decir eso se tomo la pastilla, para luego abrir la botella y comenzar a beber de ella como si fuera agua. Hice una mueca mientras desviaba la mirada a otro lado.