Veinte minutos más tarde apenas acaban de terminar la conversación
-Joder, cómo se enrollan para explicar algo.
-Ya.
-Busquemos a Azahara.
-Hostias, es verdad...
-Ahí-señaló.
-Está con Carlos y sus amigos.
-Uf, Cómo le haga algo...
-Tranquilo.
Se acercaron a ellos.
-Carlos ¿qué haces con Azahara?
-Solo le estoy enseñando a divertirse.
-Yo sí que te voy a....- saltó Dylan, pero Aria le paró.
-Ve a ver cómo está Azahara.
-Vale- resopló y se fue.
- ¿Cuánto le has dado?
-Yo le di dos vasos, fue ella la que le gustó y toma más.
- Vale, ¿cuánto ha bebido ella?
-No sé...
- ¡Di!
- ¿Tres o cuatro? No estoy seguro no estaba pendiente de ella.
-Que sepas que se lo voy a decir a los profesores.
-Si caigo yo caerá tu querido Dylan.
-...
-Azahara, ¿estás bien?
-Sí, perfectamente- dijo tambaleándose.
- ¿Seguro?
- Si.
De repente se cayó al suelo.
-Aza- se agachó.
- ¿Qué? Solo me ha dado un bajón de azúcar.
-Ven, sentémonos.
-Vale, pero tráeme un vaso de Ponce.
- No más ponte.
-Pero quiero ponche de frutas.
-Primero sentémonos.
- Vale - balbuceó.
Dylan la cogió en brazos y la sentó en un banco.
- ¿Cuántos vasos has tomado?
- No sé, unos ¿cinco? Pero.... ¿qué pasa?
-Que tienen alcohol.
-No puedes meterle, él no ha hecho nada.
-Si, pero si cuentas algo...
-Eres... -le fue a dar una bofetada, pero él le agarró la mano antes de que le diera.
-Gracias, lo sé -le soltó la muñeca y se fue.
- ¿Cómo que tiene alcohol? Si mi madre me ve llegar borracha a casa no volveré a ver la luz del sol.
-Si eres consciente de eso no estas tan borracha, igualmente tranquilízate, yo estoy contigo.
La palabra mágica sonó, solo esa simple frase la hacía sentir seguridad. Miles de pensamientos, emociones y sentimientos pasaban por la mente de Azahara. Esos pensamientos se hicieron cada vez más intensos hasta que quedó totalmente absorta en ellos y se desmayó.
- ¡¿Azahara!?
Aria se acercó a él y al verla apoyada en él saltó.
- ¿Que ha pasado?
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Predestined
Teen FictionUnos jóvenes normales que descubriran que tienen algo que los une y a la vez los hace especiales. Son portadores de poderes que nadie tiene, todos con historias diferentes que ocultan su origen. Y todos con una misma misión.