Vous Apprenez (Mericcup) [#1]

Capítulo 10.

Me desperté por el movimiento de un lindo coche moviéndose exageradamente y sí, era Hiccup manejando sobre un campo de piedras.

-¿Qué haces? -mi voz sonó un poco grave por la causa de acabar de despertar.

-¡Ah, hola bella durmiente! Y manejando como puedes ver.

¡Idiota!

-¿Por qué me despiertas? Estaba soñando con cosas muy lindas.

-Yo no te desperté, fuiste tú.

-Agh, eres insoportable -dejé caer mi cabeza en el asiento mirando al frente.

-Gracias.

-Hiccup, ¿puedo hacerte una pregunta?

-Ya la estás haciendo.

-¡Esa no cuenta!

-Está bien, pregunta.

-¿Cuál es tú nombre completo? -aquella pregunta me carcomía desde el día en el que lo conocí.

-Hiccup Haddock. ¿Por qué?

-Siento que tienes otro nombre o apellido aparte de eso.

Suspiro.

-¿Me prometes que no te reirás?

-¿Por qué tendría a que reírme?

-Por que te va a parecer gracioso, igual que a la mayoría de las personas. ¿Me lo prometes?

-Te lo prometo.

-Hiccup Horrendous Haddock -susurró.

Yo me mordi el labio inferior y lo miré muy "seria" tanto que sentía que mis ojos derramarían lágrimas, pero si tratas de ahogar la risa más risa te dará. O por dios se apellida Horrendous, voy a explotar.

-¿En... en serio?

Hiccup: Adelante puedes reírte.

Y eso fue el boleto para tirarme a carcajadas mientras lágrimas de risa salían de mis ojos, sentía mis mejillas arder y mis labios pronto se reventarían ya que me los mordia muy fuerte. Hasta que recordé al bebé que tenía en mi vientre y mi risa cesó y mire a Hiccup preocupada y él se dio cuenta ya que deje de reír, pero por la luz de la luna sabia que estaba más rojo que un tomate.

-¿Qué pasa?

-¿Qué les diremos a tus padres por mi embarazo?

-Fácil, les diremos que eres mi pareja y el bebé que estás esperando también es mío.

-¿Qué? ¿Estás fumado? ¿Drogado? ¡Hiccup, claro que no! ¡Me tratarán como una cazafortunas!

-Sí, lo haremos bueno tal vez yo lo haga, les diré que estamos esperando un bebé y te prometo que no te tratarán así. Los conozco.

-Pero...

-Mérida, nada de peros. Y además ya llegamos.

Nos pusimos enfrente de no sé que por que estaba oscuro pero una voz se escuchó.

-¿Nombre? -una voz demasiado grave.

-Vamos Will, no seas aguafiestas y ábreme.

-¡Hiccup que sorpresa! Ahora mismo te abriré -aquella voz que había escuchado al principio se transformó en una amigable.

Y después se abrió la puerta que nos daba paso a una gran mansión junto con un gran pasto que tal vez, lo hubieran regado ya que se olía el tranquilo aroma de tierra mojada.

-Es gay -me susurró.

-¿Eh?

-Will, es gay. Así que podría ser tu mejor amigo. Los gay son muy fieles.

-¿Entonces ya has salido con él? Ya sabia que eras gay y ahora mismo me lo acabas de confirmar.

-Entremos a la casa -bufo y me tomo de la mano caminando hacia la puerta de la mansión.

-¡Hey! ¿Por qué me agarras de la mano?

-Para que crean que eres mi pareja.

-¿Crean? ¿No qué tu padre trabajaba?

-Sí, pero los de servicio son muy... chismosos.

Iba a decir algo pero una voz perteneciente a una mujer de mediana estatura con los ojos verdes y el cabello marrón, se acerco a nosotros y abrazo fuertemente a Hiccup.

-¡Hiccup! ¡Que alegría que allás venido!

-Te extrañe madre, ven te presentare a alguien.

Hiccup la agarro de mano y la trajo hacia mí, que quede claro que yo al entrar me aleje mucho de Hiccup, más bien me quede en la puerta.

-Madre, ella es Mérida DunBroch.

-Señora -y se abalanzó a mí abrazandome-. Haddock -susurré.

-¡Oh por favor, no me digas señora me hace sentir vieja! Llamame Valka.

Oh dios, todos en está familia tienen un nombre raro, pero ella es amigable.

-Está bien seño... digo Valka -me corregí al momento sonriéndole.

Ella me miro de pies a cabeza y después abrió los ojos como platos y miro a Hiccup.

-Está embarazada -susurró-. ¿Cómo es eso posible, Hiccup?

Y yo mire a Hiccup con cara de "¿en serio?" y él se encogió de hombros disimuladamente.

-Es mi novia mamá y estamos esperando un hijo.

Y me mordi el labio inferior para no lanzarme contra él y pegarle donde más le duele. Pero por alguna extraña razón mi corazón latió desefrenadamente. La madre de Hiccup nos miro a los dos y después nos abrazo juntándonos.

-¡Oh dios! ¡Que alegría! ¡Felicidades!

Ojalá mis padres hubieran sido así.

-Gracias -susurré con la voz entrecortada.

***

Después de comer y después de que yo me acabará toda la comida de la mesa, Hiccup me sacó a un "recorrido" por la casa y ahora nos encontrábamos en el pasto húmedo, que olía a tierra mojada, admirando la luna y las estrellas que reinaban en la oscuridad hablando de cualquier cosa.

-¿Por qué le mientes a tu madre así? Tal vez está muy ilucionada con que va a ser "abuela"

-No sé, y no creo que este ilucionada.

-¿No viste su rostro? ¿Sus ojos?

-Mérida, eso es lo que importa menos, el tiempo se decidirá de lo que pasará.

-No es justo, que me trates así cuando no me merezco nada de nada.

-Mérida te mereces eso y mucho más, eres una excelente persona. No seas negativa.

-¿No te preguntó el por qué no me habías presentando a ella antes?

-No creo que lo haga, respeta mi vida privada. No es de esas madres que se quiere enterar con quién sale su hijo.

Y me tiro arriba de él haciéndome cosquillas hasta que llore de risa, de alguna extraña forma nos quedamos mirando a los ojos y después a los labios. Oh mierda, quiero besar esos labios.

-Hiccup, esto no está bien.

Cada vez nos íbamos acercando cada vez más hasta que podía sentir su respiración mezclándose con la mía.
Pero me aparté y él fue más rápido, me agarro del cuello y me acercó a él en un movimiento rápido.

Y me besó.