SANCTUM: Guerras De Lycia

Capitulo 14: Omega

“Campamento del SACTUM, cercanías del templo del vacío”
*Narra Lyn*

—Estamos de vuelta. —Dijo Roland mientras me dejaba en el suelo, hace poco que había despertado, al parecer el me había cargado hasta el campamento.
— ¿Qué les pasó? —Dijo Yuul, quien rápidamente nos atendió con magia curativa. —Lyn está casi ilesa, pero usted comandante, se encuentra bastante herido. Me sorprende. ¿Viste el combate Rose?
—Aquel chico fue más fuerte de lo que me imaginé. No debí haberme contenido en un principio, pero aún le falta experiencia. Ni siquiera él puede controlar todo su poder. Tomé prestado su espíritu de fuego, le hice creer que lo había matado, fue una mala idea. —Dijo mientras Yuul curaba sus quemaduras.
—No vi lo que pasó, pero escuche todo el ruido que hicieron y fui a ayudar a Lyn y al comandante.
—Entonces, ¿Cuál es el plan Roland? —Dijo Lucy. Nuestra anterior comandante.

Después del incidente donde Roy abandonó el SANCTUM la comandante abandonó su puesto como señal de incompetencia, a pesar de que todos; incluso Roland, tratamos de hacerla cambiar de opinión pero fue inútil, desde entonces mi hermano tomó el cargo de comandante de los sabios y como el tercer gran general de Lycia después de la muerte del general Trevor.

—El viene hacia acá. —Dijo Luke. —Solo tenemos que detenerlo.
—No será tan fácil. —Dijo Roland. —El chico rompió la espada de L, las espadas sagradas pueden regenerarse si se rompen, pero para romper una…  Se necesita un inmenso poder. —Hizo una pausa, donde todos nos quedamos en silencio. —Déjenmelo a mí, sigan vigilando la actividad de los demonios dentro del templo. L, ven conmigo.
— ¿Eh? ¿Para qué me necesitas? —Le dije.
—Te lo contaré más adelante, vamos.

*Narra Roy*

Resumiendo lo que pasó. Después de salir de la casa del leñador seguí caminando por el bosque en la dirección que me dijo rumbo al templo del vacío. Podía sentir un enorme poder demoniaco fluyendo desde la tierra.
—Repasando mi plan. Llegaré al templo del vacío, carbonizaré a los demonios e impediré que el rey demonio reviva…
— ¿Y qué harás después?
Me sorprendí. Esa voz… — ¡¿Roland?!
—Tranquilo Roy, si quisiera pelear te habría matado cuando te encontré hace unas horas.
Roland se encontraba parado al borde de un enorme árbol seco, a su lado estaba Lyndis, mirando hacia otro lado.
— ¿Cómo sabes que no te atacaré yo?
—No lo sé, pero si lo haces no dudaré en acabarte, solo estaba probando tu fuerza, y vaya fuerza.
—Entonces, ¿Qué quieres?
—Necesitamos tu espada para ir por el arma sagrada definitiva.
—Necesitan el espíritu, y ese espíritu ya fue borrado de la existencia.
— ¿Te refieres a este? —Roland sacó una brillante gema la cual rompió apretándola con la mano y liberó una especia de fuego, del cual Sacra se materializó, rápidamente se abalanzó sobre mí y me abrazó fuertemente. — ¡Me alegra verlo amo! —Dijo felizmente.
—Vamos L. —Le dijo Roland. —Es tu turno.

Lyndis se acercó a mí lentamente, me trataba como si fuese un monstruo y evitaba mirarme a los ojos. Su expresión de disgusto lo decía todo.
—Roy Farron…
—Llámame Roy. —Interrumpí.
—Roy… Nosotros… Todos en el escuadrón. Tenemos la misma meta que tú, lo último que queremos es que todo se destruya, es por eso que necesitamos tu espada, solo por un momento. Y también… —Una lágrima salió de su ojo mientras apretaba fuertemente su puño y seguía mirando hacia otro lado. Comprendía que no podía hacer nada, ella y yo éramos enemigos.
Lyndis apretó sus labios y tomó mucho aire por la nariz, de la nada levantó la mirada y me miró directo a los ojos, en una expresión de seriedad con sus cejas encorvadas hacia afuera.
—Necesitamos… No… Necesito que regreses al SANCTUM. Lucy ha estado muy decaída ¿Sabes? Incluso trató de dejar el SANCTUM, pero solo renunció a su puesto de comandante, Rose también está muy triste, la he escuchado llorar por las noches, incluso Luke y Ren sienten un vacío. Al igual que yo; el odio me cegó y juré que te mataría pase lo que pase, pero Roland vio un gran potencial en ti Roy. ¿Qué dices? ¿Volverás con nosotros?