Caminos inesperados

Capítulo 4: El consejo.

James contempló la idea de ser amigo de Kara y la verdad es que no le parecía mal. Si Lena había aceptado seguir siendo su mejor amiga, él podía  actuar de la misma forma. Salió temprano de casa y se fue a jugar tenis con Winn. Estaba por irse a su casa cuando una voz conocida le habló por detrás.

—¿Ya te vas, Olsen?

—Estaba por irme, no sabía que estabas en la ciudad, Luthor.

—Vine a visitar a mi querida hermana, pero no le digas que espero sorprenderla. Sé que le va a dar gusto verme por más que lo disimule.

—En realidad sí creo que le va a dar gusto verte. Ya sabes, es Lena.

—Mi dulce hermana, a veces pienso que deberíamos hacerle una prueba de ADN para verificar que efectivamente sea una Luthor.

—¿Eso te gustaría, no? Ser hijo único y heredero.

—La verdad es que antes de que naciera Lena mi vida era muy aburrida... No se lo digas, porque lo negaré totalmente.

—No sé porqué no le dices que la quieres y ya.

—No funciona así nuestra relación de hermanos. Ella sabe que si no la quisiera no estaría aquí, sólo por ella soy capaz de estar en esta aburrida ciudad.

—Si tú lo dices.

—Y cuéntame, ¿Cómo has estado?, ¿Ya superaste a Little Lane?

—Hace un año que terminamos, creo que estoy listo para darme otra oportunidad en el amor.

—¿Un año ya? Bueno, es un tiempo considerable para intentar seguir con tu vida. No como otras personas que se aferran a amores imposibles durante años...

—¿Lo dices por Lena?

—Ah, al fin lo sabes. Pensaba que nos íbamos a morir y nunca te ibas a enterar. No es mi deseo ofenderte... Pero muy como que tu línea del pensamiento es corta. ¿Cómo no te diste cuenta?

—Estaba en otra relación... Y para cuando terminó, Lena ya no estaba. Además, me es difícil imaginar que yo le pueda gustar... No me lo creo del todo.

—Ni yo. En fin, espero que no sea ella con quien quieres darte una oportunidad, no me gustaría tener problemas contigo.

—¿Tan mal te caigo?

—Como persona me eres medianamente agradable... Pertenecer a mi familia ya es otra cosa. No cualquiera puede ser un Luthor. Después de que no te diste cuenta de sus sentimientos, me pareces indigno. Por otra parte, los Olsen tienen una oportunidad más.

—¿Cómo así?

—Y no dejas de darme la razón... Me refiero a Kelly, genio. Ella y Lena harían una maravillosa pareja, pero Lena por estar pendiente de ti no se ha dado cuenta.

—¿Cómo se supone que sabes estas cosas? Kelly nunca me ha dicho nada, aunque su devoción a Lena siempre me ha parecido exagerada.

—Observo, siempre observo con atención. En el silencio se encuentran grandes secretos.

—Suponiendo que tienes razón.

—La tengo.

—Bueno. ¿Prefieres que Lena esté con Kelly antes que conmigo?

—Oh, no. No sólo que contigo, pondría a Kelly por encima de casi cualquier persona. Si yo hubiera tenido alguna oportunidad con ella, al menos la habría pretendido, pero ya que nos gusta lo mismo... Tendrá que ser Lena.

—No sabía que tenías en tan alta valoración a mi hermana.

—¿Por qué no? Sé reconocer a alguien inteligente cuando le veo y Kelly definitivamente lo es. Pertenece a nuestro mismo estatus social y conoce a Lena de toda la vida. Ella jamás lastimaría a mi hermana ni con el pensamiento. Además, es reservada y eso lo respeto mucho. Es el combo completo.