Gaara Y Naruto ~ GaaNaru ~

Hallazgo Inesperado 🧜‍♂️

Naruto le contó su padecimiento en manos de las criaturas oscuras, las torturas padecidas al punto de desear morir. Sin embargo el destino le tenía preparado algo diferente que lo llevaría nuevamente a los brazos de su amado Gaara.

El pelirojo no dejaba de abrazarlo mientras escuchaba su historia, hasta que lo besó con amor profundo para hacer que se calmara.

- No permitas que me atrapen Gaara por dios - le suplicaba Naruto, quien se volvía un niño indefenso ante las criaturas oscuras.

- Eres muy poderoso Naruto, no les tengas miedo. Además me liberaste de esa terrible prisión.

Naruto besó a Gaara con intensa desesperación, necesitaba de su amor para retomar fuerzas. El pelirojo lo tomó allí mismo sin poder contenerse más. Acariciaba aquel bellísimo cuerpo de su amado dorado con intemso placer.

Se amaron hasta perder el sentido durante varias y largas horas, para acabar dormidos y abrazados. Cuando Gaara se despertó, Naruto seguía dormido, parecía un hermoso ángel.

Aún no podía creer que era libre y que estaba junto a su amado dorado con quien tuvo su primera vez. Lo protegería con todo su poder ya que Naruto era el amor de su vida. No permitiría que nadie vuelva a separarlos. Nunca más.

Naruto despertó y por primera vez se sintió felíz al hacerlo ya que tenía a su amado Gaara a su lado. Ésta vez, él fue quien se acurrucó junto a Gaara en ésta ocasión.

- Gaara, te amo tanto que no sé cómo pude sobrevivir éstos tres años.
- Esa prisión es horrible mi amor, horrible. Ví millones de cadáveres allí dentro de sirenas y tritones de diversos tamaños. Nadie pudo salir de allí antes que yo....nadie.
- No dejaré que vuelvan a encerrarte en ningún lado mi amor - le dijo Naruto.

Momentos después dejaron aquel estupendo y cómo lugar para empezar a buscar aquello que les serviría para combatir a las criaturas oscuras.

Eligieron entrar a un edificio cuya fachada les llamó la atención, debido al símbolo que vieron en el dintel de la parte superior de la puerta de entrada. Bajo ese símbolo estaba escrita la palabra "Uchiha".

Ambos entraron a ese edificio, cuya entrada medía 600 metros de altura y estaba hecha de mármol. Había dos esculturas en la entrada, una en cada lado, de una sirena y un tritón de pie mirando la nada.

Un alo siniestro emergía del interior de aquel edificio que hacía que a Naruto se le herizara la piel. Sujetó a Gaara con fuerza sin evitar temblar.

- Vamos mi amor, hay que entrar - le dijo Gaara y ambos se adentraron al interior de aquel misterioso edificio.

Todo estaba oscuro, absolutamente todo. Pero aquella oscuridad, era diferente a la que estaban acostumbrados en el mar, por ser tritones.

Ahora en aquel edificio ninguno podía ver más allá de sus propias narices. Por tal razón, Naruto activó su poder y todo su cuerpo comenzó a brillar con esa acostumbrada luz dorada.

Solo así el lugar se fue iluminando permitiendoles a ambos ver más allá de ellos mismos. Estaban en una gigantesca sala cuyas paredes tenían dibujos, escritos y símbolos.

Naruto podía leer algunas partes de lo que allí se narraba. Era la historia de los Uchihas, familia a la que pertenecía ese edificio. Pudieron ver el mismo símbolo dibujado en el dintel de afuera, ahora en varias partes de las paredes.

- Al parecer los Uchihas fueron una de las primeras familias pertenecientes a la especie de criaturas gigantescas - decía Naruto a Gaara - Y eran muy poderosos. Aquí dice que incluso podían controlar las mentes de otros tritones y sirenas.

- ¿En serio? Vaya por dios, no me gustaría toparme con ellos.
- Pero ese poder, según dice aquí, fue desapareciendo conforme fueron avanzando los siglos hasta llegar al presente en que solo es historia antigüa.
- Menos mal.

Siguieron avanzando hacia la otra habitación, pero ya no estaban a raz del suelo, sino en el punto medio. Al entrar a la siguiente sala, vieron en la pared del frente a ellos el mismo símbolo de los Uchihas gravado en ella.

Solo que ahora abarcaba toda la pared. O sea tenía 700 metros de altura y 500 metros de ancho. Monstruosamente grande, aquello asustaba a Naruto debido al terror que sentía por las criaturas gigantescas.

Pero Gaara lo sacó de su ensoñación al exclamar asombrado.
-¡Naruto! ¡Mira abajo!

Así lo hizo el rubio y no bien contempló lo que Gaara vió, lanzó un alarido de intenso terror. Todo su cuerpo empezó a temblar y para no perder la razón se acurruco en los brazos de su amado pelirojo ocultando su rostro en su hombro derecho, mientras cerraba con fuerzas los ojos. Gaara lo abrazó.con fuerza intentando calmarlo.

Abajo, en el suelo de mármol estaba un tritón de 350 métros de altura. Parecía muerto pero respiraba, estaba malherido ya que tenía lastimados por gran parte de su cuerpo.

Desde su cintura para abajo tenía escamas azul oscuro. Sus cabellos negros brillantes y su piel blanca pálida. Gaara vió que una luz rosada en forma de cadenas lo envolvía al completo, y era lo que le causaba tanto dolor debido a que se reflejaba en su rostro.

Al verlo con mayor detenimiento, Gaara pudo reconocerlo debido a que desde su prisión lo había visto unas cuántas veces. Recordó que lo llamaban por el nombre de Sasuke Uchiha.

- Calmate Naruto - le decía Gaara acariciandolo - Por favor mi amor, serenate.
- Vamonos G-Gaara....por dios....

- Solo intenta calmarte
- E-Es m-muy g-grande....tengo miedo.
- No puede moverse, miralo bien.

- ¡No! Esa cosa está viva. Ví cómo respiraba.
- Está prisionero y por lo visto sufre mucho. Solo míralo.

Haciendo uso de su voluntad, el rubio respiró bocanadas de aire y se apartó de los reconfortantes brazos de Gaara. Luego bajó la mirada para contemplar mejor a esa bestia.

Su corazón latió como un tambor, abriendo los ojos enormemente Naruto nadó hacia arriba alejándose lo más que le resultó posible de ese gigntesco tritón.

Así chocó su espalda contra el techo. Ese lugar medía 700 métros de altura. Pero Gaara fue descendiendo un poco más ya que quería indagar mejor a ese tritón, pero la oscuridad del lugar lo envolvió impidiéndoselo, debido a que Naruto estaba demasiado lejos.

-¡Ven Naruto! ¡Baja por favor!
-¡¿Estás loco Gaara?! ¡No pienso acercarme a ese momstruo!

- A mí también me llaman monstruo Naruto y no hice nada.
- ¡No tiene nada que ver una cosa con la otra Gaara!

- Por favor mi amor, baja. Quiero verlo más de cerca. Por favor.
- Dios mío Gaara, se me paralizará el corazón.
- ¡No puede dañarte! ¡Ven conmigo! ¡Deja el maldito techo!

Suspirando hondo Naruto tomó fuerzas y empezó el descenso hasta llegar a donde estaba Gaara. Su luz iluminó toda esa parte dejando a oscuras el sector de arriba.

Gaara recién pudo observar a Sasuke en detalle. Sujetó a su miedoso novio, para que no se vuelva a escapar, llevamdose consigo la luz.

Pero el rubio no paraba de temblar e incluso cerraba los ojos desviando la cabeza hacia Gaara. En verdad no soportaba ver de cerca a ese monstruo.

- No quiero seguir descendiendo Gaara, no soporto la sola idea de estar cerca de menudo monstruo.
- No es un monstruo Naruto, es un triton como lo somos nosotros. Y tiene nombre.

-¿E-En serio?
- Si, lo he visto varias veces desde mi prisión. No es violento ni mucho menos.
-Oh...vaya...¿Y c-cómo se llama esa cosa?
- Sasuke Uchiha y tiene nuestra misma edad.