A siete años de haberse vuelto a reunir, nuestros Tsubasa y Genzo han formado una nueva vida: son reconocidos a nivel mundial tras ganar un torneo juvenil en Europa, viven en una casa enorme solamente para ellos, y una hija adoptada llamada Himeko...
Luego de tantos años de sufrimiento continuo, finalmente puedo ser capaz de sonreír. De no haber conocido a Urabe y al Nankatsu, nada de esto hubiera pasado. No habría podido irme de esa casa, no habría podido cuidar a todos estos niños hermosos (que la mayoría no puede ser cuidado por sus padres ya que trabajan hasta doce horas al día), no habría hecho amigos nuevos como Hikari, por ejemplo...
A Hikari la conocí unos días después de que acabó el campeonato de secundaria. Era compañera de mi clase, pero recién ese día había entablado una conversación con ella. Dijo que siempre me veía sola en la clase, y pues, quiso ser mi amiga. Es una chica muy linda, amigable, aunque a veces es un poco pervertida, jaja. Tiene el cabello lacio como por la espalda, de color castaño rojizo y los ojos del mismo color, y la piel un poco más tostada que la mía.
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Su nombre completo es Hikari Utada. Le fascina ir a Starbucks (prácticamente le gusta todo tipo de café y frappé), ama a los gatos (tiene uno todo negro llamado Kuro) y los sándwiches tostados (ella vive comiendo tostadas de desayuno y merienda, y cuando me invita a su casa me recibe con tostadas siempre, jaja), y se viste a la moda a cada momento del día. También es novia de Nitta. No creerán cómo fue que empezó todo, jaja:
─Chicos, quiero presentarles a mi nueva amiga, la conocí en la clase. Ella es Hikari Utada─ la presenté a Urabe y los del Otomo.
─Gusto en conocerlos, chicos.
─Igualmente, Hikari-san─ dijo Urabe─. Y muchísimas gracias, es muy bueno ver que nuestra pequeña Yuki tiene una nueva amiga─ sonrió.
─Sí, cada día está más grande─ rio Nitta.
Eso hizo que a Hikari se le prendieran las hormonas.
─Disculpa, lindo─ Hikari se le acercó─, ¿estás soltero?
─¡¿QUÉEEEE?!─ Kishida, Nakayama y Nishio desde siempre quisieron tener pareja, y esperaban a que Hikari fuera la suya, pero ella ya escogió a Nitta, jaja.
─E-etto...─ Nitta estaba más rojo que un morrón.
─Coloradito te ves más bonito─ le dijo con esa mirada y voz sensual que tiene.
Y bueno, unas dos citas más tarde se hicieron parejita.
Los siete siempre estamos juntos. Urabe y Nitta tienen pareja, pero los otros tres están más solos que el uno, jaja.
Pero resumiendo todo esto: parece que fue ayer cuando Ryo y yo nos separamos, parece que fue ayer que Hiroshi me llevó a esa escuela horrible, parece que fue ayer que mis padres murieron... Y aquí estoy, con la vida más feliz que pude haber imaginado.
Al final, el tiempo sí cura todas las heridas.
TSUBASA'S POV
Comimos un buen sushi en ese restaurante. Ahora estamos caminando a la casa de Izawa para que cuide de Himeko esta noche.
Lo que pasa es que queremos hacer el delicioso esta noche sin interrupciones, porque la última vez casi nos descubrió, golpeando la puerta a las dos de la mañana para buscar a Piko que se había perdido en el patio. Aprovechando que Himeko estaba jugando con Eiji, Yuki y Urabe, nosotros hablamos sobre dejarla con ellos esta noche, pero ya tienen muchos niños que cuidar y no queremos cargarlos con otro más. Sanae era nuestra otra opción, pero está en una noche de chicas con Yukari y Kumi. Entonces llamamos a Izawa, que estaba con Kisugi, Taki y Takasugi.
Nada malo puede pasar si ellos la cuidan, ¿o sí?
IZAWA'S POV
─Chicos, vamos a demostrarle al capitán que somos capaces de cuidar a una niña─ les digo.
─¡Sí!
─¿Puedo ver Dragon Ball Z?─ nos pregunta la pequeña.
─Por supuesto, mi amor─ le responde Kisugi, y le pone el programa en la tele.
Takasugi fue al kiosco a comprar unas cervezas mientras nosotros veíamos el programa. Cuando volvió, dejamos a Himeko en la sala y fuimos a poner ropa sucia en la lavadora para lavarla mañana, pero al volver, la encontramos en la cocina, con una lata de cerveza en la mano...
─¡HIMEKO, ¿QUÉ HACES CON ESO?!─ le grité.
─Tengo sed─ dice, y estaba por tomar de ella. ¡¿Cómo mierda le hizo para abrirla?! ¡¿Qué le enseñan sus padres?!
─¡NOO! ¡NO LO HAGAS! ¡NO TE TOMES ESO!─ gritó Takasugi.
─No es justo que no me dejen tomar nada mientras ustedes se toman todo─ y ahí se tomó media lata.
─Ay, no...
─Está muy rica─ sonrió, pero su cara se puso roja. Está borracha.
Intentamos detenerla, ¡pero esa chiquilla corre mucho más rápido que nosotros! La hija de Tsubasa y el capitán es una pesadilla.
─¡Ven acá!
─¡No huyas!
─¡Himeko-chan, regresa!
─¡Ve a dormir de una vez!
Y le gritamos muchas otras cosas, pero la niña no dejaba de correr por toda la casa y esconderse.
─El capitán y Tsubasa nos van a hacer añicos─ dijo Taki.
