𝐏𝐑𝐄𝐓𝐓𝐘 𝐒𝐀𝐕𝐀𝐆𝐄 ✦ 𝐘𝐀𝐍𝐆 𝐉𝐔𝐍𝐆𝐖𝐎𝐍

Capítulo 20

Al día siguiente, en la escuela no se dejaba de hablar acerca del incidente de la tarde anterior, como si un apagón fuese algo de lo cual tenían que preocuparse.

Pero la verdad era que muchos decían que fue un atentado contra la respetable figura de Choi Soomin, quien no se atrevía a decir una palabra de lo que había pasado.

—Te exijo una explicación —le había susurrado su hermano al oído cuando el primer receso del martes tomó lugar en la mañana.

—No tengo porqué darte explicaciones de lo que hago con mi vida —le había respondido ella sin mirarlo, su mandíbula apretada y sus hombros tensos dándole un aire de rudeza.

—Oh, claro que lo harás... Nos está llamando —le avisó Soobin dándose la vuelta para irse.

—¿Ahora?

—¡Ahora!

La chica no pudo evitar rodar los ojos y ponerse de pie con pereza.

Ni bien entró a la oficina del director su corazón dio un salto, ya que había dos oficiales de policía con él.

—Qué bueno que ya llegaron —dijo el hombre con un tono amargo mientras se ponía de pie—. Estaba charlando con los oficiales acerca del inconveniente de ayer, ¿alguno de los dos tiene alguna información de lo que pasó? ¿O algún dato que les sea de utilidad?

—¿Qué te hace pensar eso? —se burló Soobin cruzado de brazos.

—Pensamos que fue un acto de delincuencia juvenil, algo que una escuela secundaria tan reconocida no puede dejar pasar —dijo uno de los oficiales, una mujer rubia casi de la misma altura que Soobin.

—Wow —soltó Soomin con sarcasmo—, este es el descubrimiento de América.

—Soomin, por favor, cuida tu tono —murmuró su tío con seriedad.

—¿O qué? ¿Me van a arrestar? —desafió ella mirando a los uniformados con seriedad—. No me pueden llevar a la cárcel por dar mi opinión...

—¿Quieres apostar? —susurró el otro oficial, un hombre muy atractivo de cabello y ojos oscuros.

—Si no le molesta que pregunte, director, ¿qué hacen estos dos estudiantes aquí? —preguntó la mujer confundida—. No es como si nos estuvieran ayudando en nada para esta insignificante investigación.

—B-Bueno, no es exactamente “insignificante”, porque, como ya saben, el colegio aún sigue sin luz —balbuceó el director.

—Un requerimiento para estudiar, si me preguntan a mí —soltó Soomin, cruzada de brazos justo al igual que su hermano—. Deberían intentar escribir “ácido desoxirribonucleico” sin luz en alguno de los salones sin ventanas.

—Soomin, ya basta —murmuró su tío fastidiado.

—Señor director, si usted quiere que tomemos este incidente como “importante”, traiga a algún estudiante que tenga alguna información útil o que sepa lo que pasó —pidió el oficial con fastidio.

—¿Quién te dijo que no sé qué fue lo que pasó? —soltó la chica, fingiendo estar ofendida al igual que él.

Todos los presentes la miraron sorprendidos, todos por diferentes y obvias razones. Pero el más sorprendido de todos era Soobin.

—De hecho, vi a la persona que cortó la electricidad desde afuera y luego salió corriendo como un cobarde —Soomin negó con la cabeza, intentando convencer a los adultos frente a ella que se trataba de un hecho lamentable.

—¿Estás segura de lo que estás diciendo? —preguntó su tío con los ojos entrecerrados, buscando algún indicio de honestidad en su mirada.

—Claro, no me atrevería a mentirle a tan reconocidas autoridades —respondió ella con un tono de obviedad que no convenció a su hermano—. Lo único que quería era sabotear las presentaciones, en especial la mía.