"NUEVE MOTIVOS PARA VIVIR"

012

De un momento a otro ya estaba entregándole el jugo a la mamá de Maki y a ella misma las flores que había comprado en el camino, la señora Nishikino me recibió con un gran abrazo y besos en la mejilla y pude notar que le hacía señas Maki para que hiciera lo mismo.

-vamos Yūrei, no sientas pena este año le das flores a mi hija, el próximo año espero que vengas con un anillo.

-es usted una madre muy particular, Maki es una hija muy afortunada.

-no es como si las estuviera aceptando por que me gustan, solo es cortesía y respeto – dijo Maki colocando el ramo de membrillos en el florero – no te hagas ilusiones y tu mamá no digas ese tipo de cosas ahora…

-¿Cómo dices eso? – le dijo su madre – si estabas super emocionada por la idea de traer a Yurei a comer.

Inmediatamente Maki se sonrojo y se retiro a la cocina, su madre me dirigió la vista y volvió a sonreírme, me invito a tomar asiento mientras ellas servían el almuerzo, me negué y me ofreci a ayudarlas, la señora Nishikino me hablaba de forma tranquila y amena mientras que Maki continuaba en silencio y parecía evitarme con la mirada, de todas formas tanto lujo seguía incomodándome de alguna forma. Asi que solo me limitaba a responder a todo lo que me preguntaba la señora Nishikino y a la vez trataba de encontrar la manera de romper esa barrera deconversación que se había formado entre Maki y yo.

Al poco rato ya teníamos lista la mesa, una sombrilla nos cubría del sol de medio día, en la mesa veía de forma deseosa los filetes de carne cocinadas dentro de una sarten especial que además de ser antihaderente retenia los jugos de la carne y con ello todo su sabor. Cada uno teníamos nuestro tazon de arroz y aderezos a elección.

-que aproveche – dije antes de ponerme un filete en mi plato y dar el primer bocado.

El sabor atacó fuertemente mi paladar quería que ese momento en que puse esa primera cucharada en mi boca durase para siempre, el sabor era en extremo delicioso.

-Maki se encargo de adobar la carne ayer, en realidad estaba ilusionada con que fueses a la playa.

-¡Mamá! – Maki volvió a sonrojarse – no es necesario que digas esas cosas y menos en frente de el.

-no hay problema, me alegra saber que soy querido de esa forma, en serio lamento no haber ido ayer Maki.

-con que vengas… - Maki parecía susurrar, hablaba bajo – con que vengas en otra ocasión esta bien.

-que tierna eres hija, espero con ansias el dia que Yurei venga ya no con un ramo de flores si no con un anillo.

Maki estaba por hablar y no se por que se me ocurrió decir lo que dije pero me pareció un buen momento para hacer una indirecta sobre esa brecha entre clase sociales, algo en mi mente me decía que debia saber que piensa Maki sobre ello, aun cuando no planeaba tener algo más que amistad con ella.

Además que me seguía cuestionando un poco sobre lo que me dijo la voz misteriosa.

-me halaga señora Nishikino que piense que puedo ser una opción para Maki…pero no me creo capaz de sobrellevar algo así, digo, ni siquiera tengo apellido, además que hay una gran barrera…usted me entendera…la heredera Maki Nishikino con una simple persona como yo no suena muy bien…solo digo que no tengo mucho que ofrecerle, apenas si tengo ropa decente.
Maki y su madre se quedaron calladas un momento.

-bueno bueno, calmémonos un momento, no hay necesidad de pensar a futuro tan de prisa, aun son jóvenes. Aún les falta mucho por vivir, pero viendo y escuchando todo lo que haces por el instituto, además de todo lo que Maki me cuenta de ti, preferiría mil veces que se junte contigo que con cualquier otro patan de nuestra clase.