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27 DE MAYO, 2021

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27 DE MAYO, 2021

Génesis | Capítulo: Ese mínimo de ilusión

PARTE UNO

Escucho a Milagros hablarme, sin llegar a procesar del todo lo que sale de su boca y sin poder siquiera enfocarme en entender lo que dice. Mi cabeza está totalmente en blanco al mismo tiempo que intenta sacar inconclusas cuentas que no me llevan a ningún lado.

La imagen del blister de pastillas anticonceptivas absolutamente vacío está totalmente incrustada en mi cabeza mientras intento entender la razón de mi retraso.

Nunca fui irregular, ni siquiera una vez desde que empecé a tomarlas hace cinco años. Cada mes fue igual, siempre en la misma fecha y siempre la misma cantidad de días.

Hasta hoy que me di cuenta que en lo que va de la semana no me indispuse ni aunque sea un poco.

Anoche tomé la última pastilla y en ese momento ni siquiera caí en cuenta de que algo no estaba bien, no hasta hace diez minutos atrás cuando entré a mi baño y vi cada uno de los huequitos del blister totalmente vacíos sobre el lavamanos.

Y no entiendo, no puedo encontrar una razón clara y con sentido para saber que es lo que pasó, que hice mal.

Nunca dejé de tomarlas, ningún día me olvidé ni me salté alguna, ni siquiera las últimas ocho pastillas vacías en las que se supone es cuando mi menstruación empieza. No tomé siquiera algún tipo de antibiótico éstas últimas semanas que puedan haber interrumpido el efecto de la pastilla sin que me haya percatado.

Y todo me resulta tan confuso que ni siquiera sé por donde encarar la situación. O mejor dicho, no se si tengo la valentía suficiente para afrontarla.

Está esa parte de mi cabeza que me dice que estoy extremando demasiado algo que puede ser simplemente un desorden hormonal como me pasaba antes de las pastillas, algo que tranquilamente va a volver a normalizarse con el paso de los días; pero, está también esa otra parte de mi cabeza, y de mi corazón más que nada, que cree con todo lo que tiene en la posibilidad de que se trate de algo mucho más importante que eso.

Por más imposible que sepa que es y por más que haya escuchado a médico tras médico hablarme de mis limitaciones no puedo evitar tener ese mínimo de ilusión, esa esperanza de que se hayan equivocado, de que sus afirmaciones no hayan sido del todo certeras y que yo tengo aunque sea un mínimo porcentaje de posibilidad de estar realmente embarazada.

Y esa misma esperanza hace que mi cabeza me juegue una mala pasada y que mi imaginación vuele a una étapa hipotética de mi vida como madre. Seguramente sería un desastre, como toda persona que en su vida no fue responsable de nadie más que de si misma, pero sé que daría todo de mí para ser la mejor madre posible.

Odisea | Enzo Pérez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora