13: Wrath of Monoceros Caeli

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—Buenas noches —respondió Zhongli, alargando la mano para apagar la luz de la mesita de noche, volviendo a colocarse como había estado antes de que él se sentara en su cama. Childe se colocó de espaldas a Zhongli, cerrando los ojos para dormir. Relajó todos los músculos de su cuerpo, sintiendo como el castaño se movía un poco en su sitio.

Tenía sueño, se encontraba exhausto. Pero aún así, no conseguía dormir.

Se giró hacia el otro lado. Su respiración se había ralentizado, y podía decir que estaba bastante más tranquilo que antes, escuchando la respiración del castaño.

—Alguna vez... ¿Te has sentido solo? —preguntó Childe de repente, esperando a que Zhongli se encontrara despierto. Abrió los ojos, apenas pudiendo ver como Zhongli lo miraba.

—Ah... Pensé que dormías —respondió Zhongli. Tardó unos cuantos segundos en responder, el sonido de sus respiraciones siendo lo único que se podía escuchar en esos momentos—. Varias veces en mi vida, sí. ¿Por qué?

—Me he sentido así durante mucho tiempo —susurró—. Me preguntaba si tú también te habrías sentido de esa forma.

—Creo que todos en algún punto de nuestras vidas nos sentiremos de esa manera en alguna ocasión —contestó, su voz relajando los sentidos de Childe—. En mi caso fue cuando me separé de mis padres —Childe se quedó, dejando que continuará hablando y entonces decir él—. Ellos viven a las afueras de Liyue, en un pequeño pueblo casi en medio de la nada. No puedo comunicarme con ellos a menos que vaya a visitarlos, ellos tampoco conmigo. No puedo saber si están bien, no me pueden llamar si les ocurre algo...

—Entiendo eso perfectamente —susurró Childe—. Apesta.

—Lo sé —contestó Zhongli—. Hace varios años de eso, cuando entré al campus de la Universidad. Están bien de todas formas, puedo decir que gozan de buena salud —Zhongli se aclaró la voz—. De todas formas no quiero aburrirte con todo esto, no creo que sea algo comparable a lo que te ha sucedido a ti.

—No, está bien. Debió haber sido... Extraño, estar en la gran ciudad si estuviste viviendo con ellos apartado del mundo —aclaró Childe—. Quería saber más supongo...

—Creo que hay diferentes formas de sentirse en soledad —continuó—. Lo mío puede decirse que fue más presencial, por decirlo de algún modo. Luego puedes sentirte de esa forma de manera simbólica, he experimentado ese estado, pero solo durante un corto período de tiempo.

—Podría decirse que yo he sentido ambas —dijo el pelirrojo, colocándose boca arriba, mirando el techo—. Me apartaron del resto de la familia, y yo terminé por aislarme prácticamente del todo. Luego me metieron a la cárcel, y me separaron de ellos... Nadie me creía, no podía hablar con alguien de confianza porque nunca hubo nadie a mi lado. Únicamente estaba yo.

—Hablas en pasado —observó Zhongli. Childe sonrió levemente, girándose para mirar al castaño, los ojos dorados mirándolo.

Desvió levemente la mirada, notando como sus mejillas erojecían levemente.

—Te tengo a ti —respondió, manteniendo su sonrisa.

Childe abrió los ojos lentamente, sintiendo los brazos de Zhongli rodearle, escuchando la respiración del hombre y notando como su pecho se expandía cada vez que inspiraba. Se pegó más a él, escondiendo el rostro en el hueco de su cuello e inhalando, dejándose embriagar por el olor del castaño, cerrando los ojos. Zhongli lo apretó un poco en su abrazo durante varios segundos, para luego relajarse de nuevo y aflojar el agarre, aún durmiendo.

Childe apretó los labios.

Tenía que apartarse de Zhongli en ese momento, literalmente.

Sin hacer ruido, retiró el brazo derecho de Zhongli, el cual estaba encima suyo, con cuidado de no despertarlo. Se bajó de la cama sin hacer ningún ruido, haciendo una mueca al sentir un pinchazo de dolor en la parte inferior de su cuerpo. No le extrañaba a decir verdad.

𝙍𝙚𝙙𝙚𝙢𝙥𝙩𝙞𝙤𝙣 [ 𝘼𝙐 𝙕𝙝𝙤𝙣𝙜𝙘𝙝𝙞 +18 ] 𝙍𝙚𝙢𝙖𝙠𝙚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora