𝙍𝙚𝙙𝙚𝙢𝙥𝙩𝙞𝙤𝙣 [ 𝘼𝙐 𝙕𝙝𝙤𝙣𝙜𝙘𝙝𝙞 +18 ] 𝙍𝙚𝙢𝙖𝙠𝙚

2: Rays of Sunlight

Zhongli cerró la puerta del coche, faltaban cinco minutos para que fueran las nueve de la mañana. Se colocó bien las mangas de la chaqueta y las solapas, caminando hacia la puerta donde le esperaba uno de los guardias de la prisión. El día anterior había llegado tarde por culpa de Hu Tao, quien le había hecho perder el tiempo antes de que saliera del edificio del FBI, y por lo que pudo notar Ajax no estaba muy contento de verlo (aunque tampoco se esperaba lo contrario). Le sorprendió un poco que lo recordara de solo haberlo visto en el juicio, quizás se tomó muy en serio lo de odiar a todos los ahí presentes. Tenía bastantes razones para hacer eso, y en realidad no sabía si él también podría haber reaccionado de esa forma.

Saludó al hombre, quien le saludó de vuelta y le indicó que lo siguiera. Zhongli obedeció, caminando a solo unos pasos del otro y adentrándose en la prisión nuevamente. Había estado varias veces en cárceles, pero el día anterior fue la primera vez que se adentraba en uno de los módulos más peligrosos de todo Liyue. Bueno, las tasas de crímenes tampoco eran tan elevadas a comparación de otras naciones, pero sin duda el módulo donde Ajax estaba encerrado era sin duda uno de los más peligrosos.

Su primera impresión en cuanto le asignaron el caso y le ordenaron colaborar con Ajax fue pensar en lo poco que intimidaba, tal y como recordaba en el juicio. La fotografía que habían puesto en su archivo no había sido actualizada, por lo que aparecía con los ojos vidriosos de haber llorado y teniendo dieciocho años. Claro, ser condenado a cadena perpetua con esa edad no tuvo que ser muy agradable, sobretodo para alguien que había sido condenado sin apenas pruebas incriminatorias. Los múltiples asesinatos por los que fue acusado apenas tenían errores, por lo que la persona que llevó el caso junto con el juez terminaron por simplemente culparlo a él. Las circunstancias de su arresto fueron clasificadas como alto secreto, junto con las pruebas de los crímenes que supuestamente había hecho. Zhongli no pudo leer esos archivos debido a su rango, pero ahora podría preguntarle él mismo.

Si es que Ajax decidía responder, claramente.

Le dejaron esperando en una sala, desapareciendo por la puerta para ir a buscar a Ajax. La habitación no era muy grande, apenas había varias sillas pegadas a la pared para sentarse, junto a un tanque de agua que no parecía haber sido muy usado. Zhongli permaneció de pie, mirando de reojo la pintura que colgaba de la pared, siendo una réplica poco elaborada de un cuadro de Albedo.

Cuando vio a Ajax por primera vez cara a cara, su impresión de él cambió. Era... Bastante diferente a como lo había imaginado. Ya no era tan joven como en los registros, tenía veintidós años: su apariencia siendo era la de un joven adulto. Normalmente para alguien que había sido condenado a estar entre rejas su aspecto se vería deteriorado por el estrés, o en su defecto fortalecido para poder sobrevivir en ese ambiente violento (más si tenías que quedarte ahí para el resto de tus días). Pero al contrario de lo que Zhongli había pensado, Ajax no se veía de esa forma (sin tener en cuenta sus heridas, claro). Pasar toda su vida en una cárcel podía ser peligroso, por lo que Zhongli se sorprendió al ver que era bastante más escuálido de lo que había pensado. Quizás la ropa holgada había hecho que se hiciera una idea equivocada, pero es lo que parecía a primera vista. Por personalidad... Era lo que más o menos esperaba, por lo que le sería difícil trabajar con alguien así.

Cuando lo llamaron para comunicarle que Ajax no estaba en condiciones de poder verlo debido a unas heridas que había sufrido en una pelea, ya empezó a hacerse a la idea de que el chico que había estado llorando desconsoladamente en el juicio había desaparecido. Sus ojos en ese momento ya irradiaron ira cuando miró el lugar donde se encontraba la policía y agentes que habían participado, la mirada que le echó a sus amistades y familiares. Zhongli pudo ver el mismo brillo de odio y rencor en sus ojos el día anterior, y sus heridas en el rostro fueron la única prueba necesaria para eliminar la imagen llorosa de los documentos en su idealización de Ajax.