"¿Me pasas la sal?" Hoshi retira el sudor que ha comenzado a acumularse en su frente por el calor que recibe de la pequeña barbacoa que compramos a principios de curso. Fue a eso de las ocho y media cuando recibí un mensaje suyo pidiéndome que le ayudase a preparar la carne para la cena y aunque le dije que era mejor cocinarla cuando estuviésemos todos juntos, parece que lo que realmente buscaba Hoshi era pasar un tiempo a solas con su mejor amigo.
Hoshi deja las pinzas de metal que acaba de usar para darle la vuelta a todo a un lado y se recuesta en su propia silla. Nos encontramos en el pequeño balcón de su apartamento y aunque estamos en pleno enero, hace una noche perfecta para estar alrededor del fuego de la barbacoa. De todas formas, entraremos de nuevo al salón cuando la cena estuviese lista, aunque ahora me arrepiento un poco de haberme traído el abrigo de todos los días porque más tarde lo tendré que lavar para quitarle el olor a humo de encima.
A pesar de que Hoshi vive en una zona bastante céntrica de la ciudad, apenas hay ruido y aunque eso es algo que normalmente me tranquiliza, ahora solamente hace que mis nervios aumenten. Porque, nunca hay silencio alrededor de Hoshi. Ya sea porque está haciendo comentarios o porque su risa rompe el silencio porque no puede aguantarlo, pero siempre está haciendo ruido. Otra señal de que las cosas no van bien es que su pierna no ha parado de moverse arriba y abajo desde que llegué, por no hablar de que sus dedos tienen la necesidad de sujetar algo entre ellos.
"¿Hace cuánto tiempo que no fumas?" La pregunta le pilla de sorpresa, porque me mira con esos ojos redondos a pesar de romper el contacto visual tan pronto como sus pupilas se encuentran con las mías. Puedo notar como el movimiento de la pierna aumenta considerablemente, así que, aunque sé que es algo que a mí también me molesta que hagan, pongo una mano en su muslo, no para que pare, sino para que deje de pensar y aterrice aquí. Sé que es molesto, pero también es tranquilizador el toque, te hace sentir con los pies en el suelo. Hoshi parece sentirlo también, porque para de moverla y entrelaza sus dedos con los míos.
"Casi siete meses." Wow, eso es mucho tiempo, ha pasado rápido. La última vez que vi un cigarro en la boca de Hoshi fueron en los exámenes finales de junio del año pasado. Prometió dejar el tabaco si aprobaba todas las asignaturas de tercero y aunque él fue el primer sorprendido porque eso realmente pasó, nunca me había dado cuenta de que realmente estaba cumpliendo su palabra. "Hoy es de esos días en los que echo de menos hacerlo." Hoshi no era un gran fumador, en realidad, solamente lo hacía de vez en cuando, teniendo que aguantar una buena riña de mi parte. Simplemente es algo que no entendía. Si no fumaba a menudo, ¿por qué hacerlo en primer lugar?
"¿Te preocupa algo?" Un fantasma de sonrisa se dibuja en el perfil de mi mejor amigo y siento que podría romper a llorar en cualquier momento.
"Me preocupas tú, Wonwoo." La respuesta no es para la que esperaba, pero en fin, sí, puedo llegar a entenderlo. Estos días han sido un completo caos, no voy a negarlo, y aun así, Hoshi ha estado a mi lado para sobrellevarlo. Sea el momento que fuese, Hoshi siempre estaba o, sentado en la silla del escritorio, o leyendo algo en webtoon acostado a un lado de mi cama, pero sobre todo, estuvo ahí esperándome en el médico. Miro mi propio regazo, porque ahora soy yo el que no puedo mantener el contacto visual con él.
"No quiero hacerte sentir culpable, Won." Su voz suena suave y sus nervios parecen haberse reducido bastante. "No puedo decir que puedo llegar a saber cómo te sientes, pero sí que entiendo que esto es algo difícil para ti. Hablé con mi cuñado sobre tu cita médica y aunque me dijo que no podía contarme nada por tema de datos privados, tuve un mal augurio por alguna razón que desconozco. No quiero pensar que me estás ocultando algo, no es eso. Sé que, si tienes algo que contarme, lo harás a su debido tiempo, más bien, me da miedo no servir de ayuda. No ser lo suficiente como para que te apoyes en mí, ¿sabes?"
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Psicometría
Fanfiction¿Os habéis imaginado alguna vez cómo sería tu vida si supieras que posees un don sobrenatural que no puedes elegir? Wonwoo había fantaseado durante toda su niñez con conseguir el suyo al cumplir los doce años. Ese día fue el único en el que quiso r...