El reflejo de mi amor (one Shot) [Terminada]

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Maratón 1/3

-Necesito algo fuerte, muy fuerte —me decía mientras caminaba hasta el mini bar de madera que estaba en una esquina, reviso y reviso —Esto si —había sacado una botella de mezcal, se sirvió y se lo tomo rápidamente.

—Ya cálmate —le pedí —¿desde cuando tomas?

—Desde ahora —me contesto, se sirvió otro poco —No me pidas que me calme después de tremenda noticia.

—Tal vez no debí contarte —le dije.

—La verdad es que si tenías que contarme, pero hace tiempo atrás —me dijo, dejo la botella aun lado —No me quiero imaginar cuando Juliana lo sepa, estará peor que yo.

—No.

—¿No, que? —me preguntó, yo solo la miré —Ella tiene que saberlo, Valentina, ni puedes seguir ocultandole algo así, es su hijo —señaló a Tomas, yo lo mire.

—Yo esperaba decirle cuando yo ya este anciana y en mi lecho de muerte —trate de sonar graciosa pero por la cara de Aster no funciono —No le vas a contar, ¿verdad?

—No —yo solté el aire más aliviada —de eso te encargas tú.

—¿Como le cuento algo así, sin que me odie?

—No lo se, solo cuéntale la verdad, nada más —me aconsejo —Tal vez se enoje contigo, pero sabrá la verdad, eso es lo más importante —yo asentí lentamente —¿Francisco lo sabía?

—Si.

—¿Tú se lo dijiste? —yo negué.

—Antes de pasar la noche con Juliana una semana después pasé la noche con Francisco, me sentía mal y culpable, se que no debía sentirme así, ya que él me engañaba con otra mujer, pero no se, me sentía mal por lo que hice.

—¿Arrepentida? —me preguntó.

—Se que hice algo mal, pero no me arrepiento —le conteste —Fue la primera vez que lo había hecho con ella, se sentía bien, como me tocaba y besaba...mmm, cuando me enteré que estaba embarazada en ese momento no sabía de quién era, así que supuse que era de Francisco, pero no.

—¿Como? No entiendo —me miraba confundida.

—Cuándo le conté la noticia él se sorprendió y me dijo que no podía ser de él ya que me confesó que no podía tener hijos, eso me confirmó que era de Juliana, le conté que me había encontrado con ella y lo que sucedió entre nosotras.

—¿Se molesto? —preguntó Aster.

—Temí eso, pero la verdad no se enojo, como el sabía que Juliana ya estaba de vuelta en España, me prometió que se encargaría del bebé que me apoyaría en todo solo con la condición de que Tomas lo viera como un tío y no como un padre.

—Ahora entiendo porque nunca le decía papá a Francisco —me dijo Aster —Él quería que le dijeras a Juliana, ¿verdad? —yo asentí.

—Le prometí que le diría a Juliana cuando la viera de nuevo.

—y por lo que veo eso pasará pronto —me dijo, mire hacia otro lado y me mordí el labio —Se lo prometiste, ahora Juliana esta aquí de nuevo, ella debe saberlo. Yo iría corriendo a decirle, pero ese asunto no es mío, es de ustedes —en eso tocaron el timbre, Aster fue abrir mientras yo guardaba el mezcal, tomé el vaso para lavarlo —pero mira a quien tenemos aquí —al ver que se trataba de Juliana el vaso se me cayó al suelo, por suerte no se quebró, Juliana lo recogió y me lo paso.

—Gracias —le dije, ella solo me sonrió —Estoy algo torpe hoy —camine hasta la cocina, Juliana y Aster caminaban tras de mi —¿Como estas?

—Muy bien, ¿y tú? —ya limpio el vaso lo dejé a un lado para que se secara.