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Valentina

Desperté repentinamente, sentía fría mi espalda. Toque con mi mano y solo sentí la sabana vacía, encendí la luz de la lámpara que estaba sobre la cómoda al lado de mi cama y me gire, me extraño no ver ha Francisco ha mi lado, tome el celular y vi la hora, eran mas de las tres de la madrugada, él me había avisado que tenía una junta y que no llegaría tarde, así que me levante, me acerque al armario y saque una bata de ceda blanca y me la puse, tome el celular y marque mientras caminaba hacia la habitación de Tomas mi pequeño de dos años, en unos meses ya cumpliría tres, que dormía en su cuna plácidamente, toque su cabello mientras oía el tono del celular que me indicaba que estaba ocupado o apagado, lo intente dos veces mas, pero nada, ya me estaba preocupando mucho, en eso Tomas se despertó haciendo un puchero, seguro que fue por la luz. Note que se iba a poner a llorar y lo primero que hice fue tomarlo.

-Perdón, mi amor —le hable tiernamente, coloco su cara en mi cuello, yo camine para apagar la luz y que solo iluminará el anticuco, camine lentamente por su cuarto hasta que oí un pequeño ronquido, lo mire, bese su frente y lo volví a poner en su cuna, sonreí y salí de la habitación.

Fui a la cocina, deje el celular sobre el mesón para servirme un vaso de agua, en eso mi celular sonó, me gire rápidamente para atender pensando que seria Francisco, pero me desilusione cuando vi que se trataba de un número desconocido pero de todas maneras atendí.

—Diga.

—Buenas noches, ¿hablo con la señora de Francisco Valencia? —pregunto la voz de una mujer tras la otra línea.

—Si, soy yo —conteste.     

—Señora Valencia lamento informarle que Francisco Valencia tuvo un accidente...—no podía creer lo que oí y movía la cabeza de un lado a otro —... y lamentablemente el señor Valencia falleció por las grabes heridas —eso último que oí me dejo sin habla, escuchaba a la mujer hablando, me preguntaba algo, pero yo no podía responder —...¿señora, señora Valencia esta ahí?

—S-si —conteste con un hilo de voz.

* * *

Estaba con mi hermana mayor Eva en esa fría sala esperando al medico forense. A Tomas lo deje con mi mejor amiga Áster en compañía de su novia Ellie. Me levante de ese duro asiento al ver que el doctor salía acompañado de un oficial, al verme camino algo mas deprisa.

—Buenas noches señora Valencia —yo solo asentí.

—¿Puedo ver a mi esposo?—pregunte como pude.

—Si, pero antes el oficial necesita sus datos y el de su esposo —me dije.

—Si, claro...no hay problema.

—Acompáñeme, por favor —me pidió el oficial, yo lo seguí y tras de mi, Eva.

Las preguntas eran las típicas, el nombre de mi esposo, en que trabajaba, si mas familia, etc. No fue muy largo, pero estaba ansiosa por verlo. Cuando terminamos salí lo mas rápido, el medico estaba afuera y al verme me hizo una seña para que lo siguiera, escuche los tacos de Eva que venia corriendo tras de mi.

Entramos por un pasillo y nos detuvimos frente a una ventanilla el medico toco el vidrio y el otro medico que estaba dentro de una habitación junto a una camilla nos vio, el medico a nuestro lado hizo un movimiento de cabeza y el otro hombre entendió y tomo la sabana blanca.

—Espero que este lista , señora.

—Lo...lo estoy —tome aire y asentí, el doctor volvió a dar un golpe al vidrio y lentamente el hombre levanto la sabana dejando a la vista el rostro y torso de Francisco, lágrimas brotaron de mis ojos y lo único que hice fue abrazar a mi hermana, había perdido para siempre a una de las personas mas importante de mi vida.

El reflejo de mi amor (one Shot) [Terminada] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora