Jeongin es un lindo omega que ahora estaba en la cima de la fama en su carrera. Hyunjin es un alfa y es un gran empresario que hace un tiempo atrás había asumido la dirección de una de las compañías mas importantes.
¿Qué pasara si uno de los dos tod...
Solo pudo sonreír satisfecho al ver toda la habitación ordenada. Se encargo dejar su aroma en ella tambien, para que así le sea más fácil acostumbrarse al nuevo lugar.
Miro una vez más el reloj, faltaban alrededor de siete u ocho minutos para que llegaran. Decidió revisar todo una vez más cuando el sonido del timbre retumbo por el departamento.
Con ilusión se acerco rápidamente a la puerta para abrirla y se contuvo las ganas de llorar al verlo ahí, tan lindo como lo recordaba.
—Mi amor — pronuncio Seungmin, antes de acercarse y tomar a su bebé en sus brazos.
—Mami — el pequeño Daehyun abrió sus bracitos para abrazar a su mamá, sus ojitos brillaban de alegría. Lo abrazo varios minutos para después dejar un sonoro beso en su mejilla, haciendo lagrimear al omega.
—Seungmin hijo, ¿Cómo has estado? — miro a su madre que le hablaba y la abrazo con cuidado de no aplastar al pequeño entre sus brazos.
—Mamá — finalmente entraron completamente en el departamento y se pusieron más cómodos — Por aquí todo bien ¿Cómo fue su viaje, todo bien?
—Tranquilo, todo ha estado bien, mi nieto es un niño muy obediente — la señora Kim dijo mirando al pequeño, que ahora se entretenía jugando con el reloj en la muñeca de su mamá.
—Mami — Seungmin atendió rápidamente a la pequeña voz — Gomitas, abu gomitas.
El omega sonrió y acaricio el cabello de su cachorro. Lo había extrañado tanto, tenerlo junto a él y escuchar cada una de sus ideas, aun cuando todavía seguía aprendiendo a hablar.
—¿Abuela te compro gomitas? — el pequeño asintió alegremente y volvió a pegarse a su mamá.
—Ha sido difícil los primeros días, aunque llamabas y todo, quería tenerte cerca — Seungmin escucho atentamente a su madre tratando de no llorar.
Claramente había sido difícil para su bebé, solo tenia 2 años recién cumplidos y aunque solo fueron tres meses los que estuvieron separados, le costaba salir de su rutina, principalmente con el cambio de horario.
—Seguramente, pero ya estamos juntos — abrazo lo más fuerte y sonrió notando que se estaba quedando dormido — Pude conseguir este departamento, fue algo difícil ya que todos los que visite antes tenían balcón y los que no, no tenían casi luz natural.
—Me alegro que lo hayas encontrado, es muy bonito y seguro para Dae, eso es lo importante.
—¿Te ha dado muchos problemas?
—Para nada, te extrañaba mucho y eso lo tenia algo apagado, por eso no ha estado muy activo — asintió comprendiendo la situación — Ahora van a estar bien, con tu papá hemos tratado de hacerlo dormir más temprano para que no sufras mucho con lo del cambio de horario.
—Gracias mamá, no sabes lo mucho que te agradezco por cuidarlo.
—No tienes nada que agradecer, fue un gusto tener a mi nieto en casa y soy tu madre Seungmin, siempre voy a estar ahí para ti, no lo dudes.
—No lo dudo — sonrió hacia su madre y al tener a su hijo a en sus brazos pudo sentirse más completo.
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