Tu en Harry Potter {Severus y tu}

Cap 30

Ambos se miraron antes de lanzarse nuevamente, Yuriko esquivaba y de vez en cuando atacaba, estaba estudiando el estilo de pelea de su contrincante, mientras el hombre atacaba y se le dificultaba defenderse, poco a poco ambos se empezaban a adaptar a la batalla, si esta hubiera sido otra situación y se hubieran conocido en diferentes circunstancias posiblemente hubieran sido buenos amigos y su batalla sería divertida... lastimosamente eso jamás pasaría.

Yuriko lanzó un gancho al abdomen y cuando vio que lo esquivo ataco con una barrida a los pies tirando a su contrincante, al momento de caer Yuriko atacó con una patada de hacha que fue esquivada cuando el chico rodó a el otro lado.

El joven se levanto atacando con sus garras a Yuriko, pero la habilidad, destreza y experiencia se las llevaba Yuriko, por eso logró esquivar el ataque al corazón neutralizado a su enemigo al dejarlo sin aire en una patada a las costillas a si rompiendo 3 costillas.

La batalla era hermosa, Yuriko se movía con elegancia y fiereza, mientras que el chico era prudente y se adaptaba rápido, ambos parecían que estaban en un estilo de danza.

Pero la realidad, era que ambos estaban atacando a matar, sabían que si el otro vivía estarían en grandes problemas.

•
•
•

Mientras tanto, Oishi junto con Snape y Tom estaban entrando al bosque, neutralizaron dos guardias y siguieron corriendo.

– Por aquí – señaló una parte del pueblo tranquila.

– ¡¿Pero y Yuriko?! – exclamó con preocupación.

– ¡No podemos salvarla solos! ¡Necesitamos a alguien! ¡Y solo hay una persona que puede salvarla! – replicó Oishi con desesperación.

Sin más aceptaron, corrieron hasta llegar a lo que era un templo, Oishi corrió y abrió las grandes puertas de marfil y cuando una figura apareció esta se arrodilló obligando a los hombres a seguir su ejemplo.

– O gran anciano... ayúdenos – dijo tartamudeando mientras temblaba.

– ¿Que necesitas? Oishi

•
•
•

Yuriko estaba cansada, Jazmine la había afectado demasiado, y ya le estaba surtiendo efecto, aún así no se rendiría, ¡Antes muerta!, ella era demasiado terca, y sabía, que si ella moría irían tras las personas quienes la ayudaron y no podía permitir eso.

– Rindete – exclamó el joven.

Ella no dijo nada y sin más volvió a atacar, ya estaba perdiendo la pelea, después de todo estaba exhausta, aún así siguió golpeando y acertando en sus ataques, el chico no estaba mejor, pues aunque el no hubiera tomado Jazmine le resultaba difícil atacar y protegerse, pues el no tenía tanta experiencia como Yuriko.

Yuriko esquivo el gancho derecho dirigido a su cara, pero el golpe roso con su hombro causándoles una leve fractura y llevándose su capa mostrando las heridas infligidas por su madrastra y las de la pelea.

Yuriko se sorprendió, nunca en su vida le habían acertado un golpe, pero cuando salió del pequeño shock fue muy tarde, vio cómo el puño de su contrincante hiba directamente a su estómago y no había manera de que esquivara a tiempo.

– KYAAAAAAAAAAAAA – grito alguien al ver lo que pasaba.

Pero en ese momento un fuerte poder mágico se hizo presente y cubrió de polvo a los luchadores, cuando el polvo se disipó todos notaron que Yuriko no portaba su capa, se podía ver que tenía heridas que dejarían cicatrices, pero lo más sorprendente es que no tenía ninguna herida en el estómago y que su cabello se había vuelto un blanco nieve, sus ojos turquesa se volvieron más claros, ya no poseía sus orejas distintivas de los híbridos, pues esta en vez de estar curvas estab rectas al igual que las orejas de los zorros.