-Vamos, querido -Heeseung le extendió la mano al menor.
Jungwon tomó la extremidad que el pelinegro le ofrecía y se levantó de la cama.
Ambos salieron de la habitación tomados de la mano, siendo el mayor quien lideraba el camino, y entonces el pelinegro prestó atención a su entorno; el pasillo con cuadros que ya había recorrido la vez que intentó huir, el papel claro tapizando las altas paredes, ventanales grandes cubiertos con cortinas transparentes. Parecía un palacio.
Heeseung lo guio al final del pasillo para bajar las escaleras y poder llegar a la planta baja, siendo el comedor su destino final.
-Adelante, toma asiento -Heeseung soltó la mano del pelinegro y en su lugar corrió la silla que se encontraba en uno de los extremos de la mesa, invitándolo a sentarse.
Jungwon , algo inseguro, tomó asiento en la mullida silla que se asimilaba a un tronó.
Heeseung sonrió y rodeó la mesa hasta llegar al otro extremo para poder tomar asiento.
-Espero que te guste la comida, es especialmente hecha para ti.
El pequeño dio una rápida mirada a los platillos que decoraban la mesa. Absolutamente todos se veían realmente apetecibles.
-Adelante; no seas tímido, cariño -invitó el pelinegro al menor a probar los manjares que había preparado especialmente para él.
Con algo de duda, jungwon tomó los cubierto que se encontraban a cada lado de su plato y cortó un pedazo de la carne cuidadosamente cocinada; se llevó el tenedor a sus labios y probó el bocado.
Sus ojitos miel se iluminaron al sentir el delicioso sabor explotar en sus papilas gustatuvas.
-¿Entonces? ¿Qué te parece? -preguntó heeseung, expectante a la respuesta del rubio.
-Está rica -respondió en un susurro.
El mayor sonrió satisfecho y copió las acciones del menor.
Ambos comieron en un silencio tranquilo, escuchándose sólo el sonido de los cubiertos chocando contra los platos.
Terminaron toda la comida al rededor de treinta minutos después, entonces Heeseung se dispuso a recoger la loza y meterla al lava platos.
-¿Te gustó la comida? -preguntó regresando al comedor.
Jungwon asintió cabizbajo.
-Eso me alegra mucho.
El menor se encontraba sumido en sí mismo, se preguntaba qué sucedería ahora.
-Jungwon, mírame -pidió con voz dulce al pequeño.
El nombrado se encogió en su lugar y levantó lentamente la cabeza.
Heeseung sonrió y acarició su mejilla.
-¿Sabes? Yo siempre he querido tener al mejor chico -se puso de cuclillas para quedar a la altura del pelinegro, que seguía sentado- y ése eres tú.
Sin mucho esfuerzo, movió la silla del menor para poder verlo de frente.
Jungwon cerró sus piernas y apretó con fuerza el borde de la falda en un intento de cubrir sus muslos amoratados.
-El violeta siempre me ha gustado, pero debo admitir que se ve aún mejor sobre tu linda piel; combina tan bien.
Inclinó su cabeza y besó el muslo derecho del menor de manera dulce.
-Tedeseo tan mal,Jungwon; no sabes cuanto anhelo poder probarte de nuevo, sentirmeen tu interior -gruñó, como si el simple hecho de recordar aquello que habíapasado hace tan sólo un día lo calentara- déjame tomarte, cariño, prometohacerte disfrutar hasta el final.
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Y aparecí,kjkajkaj,lo siento por no haber actualizado, salí de viaje y pues no pude actualizar y además casi me muero ,estuve modo fever y con vomitos durante 2 días y me llevaron al hospital y todo,lo bueno esque estoy mejor:).
Gracias por leer<3
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