Te pregunté si querías a alguien,
de una forma especial.
Me dijiste,
tal vez.
"Tal vez eres tú".
Me sentí feliz.
Me sentí viva.
Y te dije,
que tal vez también te quería.
No sonreíste.
No dijiste nada.
Sólo cambiaste el tema.
Después comenzaste a ignorarme.
Dejaste de sonreírme.
Y el tiempo pasó.
Muchos días.
Muchas semanas.
Muchos meses.
En los que volví a estar sola.
Sola observando
como le sonreías a otras personas.
A personas que no veían el dolor,
que tu sonrisa ocultaba.
Ese dolor,
que sólo yo veía.
Y un día viniste a mí.
"Hola".
Me dijiste.
Como si nada hubiese pasado.
Y sonreíste.
Con esa sonrisa tan falsa.
Sonreí de vuelta.
Porque amaba esa falsa sonrisa.
Y porque así como tu pretendías
no saber que lo hacía,
yo pretendería no hacerlo.
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Entre páginas
DiversosÉramos tú y yo. Ahora sólo quedo yo. Sola entre páginas. Sola entre estas páginas que jamás llegarás a leer.