¡Tu eres mi papá omega! • KOOKMIN

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—Mi amor, no te desesperes.— Pidió el alfa a su esposo quien a pesar de tener un porte... Tranquilo, en lo que cabe, sus feromonas demostraban los contrario.

—¿Cómo quieres que no me desespere si tengo a un maldito fantasma de hermano?—Gruño.

Jungkook negó escuchando el reclamo de su hermano, ya comenzaba a darle migraña. Jimin por otro lado se quedó quieto en su sitio sin saber que hacer.

—¡Jeon Jungkook!

—Es mejor que vayamos antes de que enloquezca por completo.—Dijo caminando hacia la sala seguido por el rubio.

—E-espera yo aún no-

—Ahí estás jodido desaparecido.—Encaro de frente a su hermano menor—¿Que demonios te costaba dejar una puta llamada? Tres semanas sin saber nada de ustedes, ¿Tienes idea de cuánto me preocupe?

—Hyung no tienes que alterar-

—Silencio, estoy hablando— Interrumpió enojado.

El rubio observaba la situación un tanto incómodo. Al parecer el otro omega no había reparado en su presencia aún y seguia ocupado reclamando entre maldiciones a su hermano menor.

Jeonmin sabiendo como era en ocasiones su tío, decidió irse a su habitación a mirar alguna película animada.

—¡Eres un insensible!

—Esta bien si, olvide llamarte. No es el fin del mundo ¿Sabes?—Se rindió mirando con cansancio al omega castaño—No se porque le das tanta importancia cuando tu también pudiste haberme llamado—Musitó en una mueca.

El alfa se arrepintió segundos después de decir eso al ver el rostro de su mayor tornarse rojo.

Namjoon decidió no meterse en esta ocasión, temia por su vida y en casos como estos era mejor no intervenir.

—¡Hijo de puta como te atreves a decir que no te llame! ¡Maldito, te deje más de 75 llamadas y no contestaste ninguna!—Grito lanzándose con furia sobre el menor.

Jungkook con sus increíbles reflejos se escondió detrás del omega.

—¡Namjoon controla a tu fiera!—Grito pálido como una hoja—¡Quiere matarme!

—No lo hará, quizás te golpee hasta el cansancio pero de esa línea no pasa.— Aseguro con una sonrisa tranquila que al contrario no le influyó confianza.

Para sopresa de todos Jin si se tranquilizó pero no por la palabrería de su marido.

Su mirada cayó directamente sobre el omega rubio que estaba siendo usado como escudo humano.

—¿Quien eres tú?— Cuestionó observando detalladamente al invitado de su hermano. Nunca lo había visto, de hecho, nunca vio a un omega que no sean él o su padre en el hogar de Jungkook.

Ver a alguien nuevo era... Extraño.

—Park Jimin, soy amigo de Jungkook—Respondió el rubio de forma cortéz.

El ambiente era un tanto pesado, incómodo hasta cierto punto. Jimin se sentía ajeno a la situación y no sabía cómo actuar, además... Tal vez era su idea pero el hermano de Jeon no se veía tan amigable, ¿Quizás porque para él es un extraño? Muchos omegas al igual que alfas se sienten amenazados hacia las nuevas presencias en su entorno familiar.

Lo más probable es que sea eso. Pensó y se removió incómodo en su lugar.

—Papá, ¿La cena está lista? Tengo hambre—Musitó Jeonmin en un tierno.

Cuatro pares de ojos se posaron en el tierno niño, dejando atrás el tenso ambiente generado.

—Demonios, olvide comprar comida. Mi refrigerador está vacío—Dijo el alfa lamentándose.