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—Vamos Chim, come algo—Pidió cansado.

Nuevamente no obtuvo respuesta más que un sollozo. Esa era la cuarta vez que intentaba darle algún alimento a su deprimido amigo pero este no hacía más que llorar y esconderse en su nido.

Si, nido.

—Aun sigo sin poder creer que hiciste esto—Dijo refiriéndose al desastre de ropa y mantas que conformaban el nido del menor.

Yoongi miro el balcón de su departamento con anhelo. Estaban en un sexto piso ¿Si se lanzaba cuáles serían sus probabilidades de vivir?

—Podría intentarlo—Murmuro pensativo.

—No, no lo harás.—Musitó el beta entrando con una bandeja con comida y dejándola en la cama.

Min hizo un puchero y miro con el ceño fruncido al pelirrojo.

—No vas a tirarte por el balcón Yoon.

El omega maldijo por lo bajo. Tomo una tostada que el beta preparo y se acercó a su mejor amigo.

—Mira Chim, son tus favoritas—Musitó Hoseok con voz cantarina.

—Tal vez deberíamos llamar a Jungkook—Propuso Min.

Un gruñido bajo se escuchó en la habitación. Yoongi y Hoseok observaron asombrados a Jimin salir del enredo de mantas que era su nido.

Fuera.—Dijo el rubio con los ojos en un fuerte tono azulado y mostrando sus colmillos.

El omega y el beta estaban con la boca abierta y los ojos apunto de salirse de sus cuencas.

—J-jimin ¿Que-

¡Dije que se fueran!—Grito perdiendo la paciencia, tirando la bandeja que Hoseok trajo y ensuciando todo el suelo en el proceso.

Con miedo hicieron caso y salieron de la habitación escuchando a sus espaldas al omega gritar y romper más cosas.

Ambos se quedaron mirando la puerta de la habitación en un shock momentáneo.

El pelirrojo aturdido, arrastró al pelinegro hasta la sala.

—Jung ¿Que demonios le está pasando a Jimin? No entiendo absolutamente nada y no se cómo ayudar a mi amigo ¡Me siento tan inútil!—Confesó tomando asiento en el sofá y cubriéndose los oídos para no escuchar los gritos del omega.

El beta miro con pesar a su amigo y se sentó a su lado.

—No puedo decir mucho porque no conozco todos los hechos pero tomando en cuenta el nido y su actuar violento...

El pelinegro observo atento al pelirrojo.

—Yoongi ¿Jimin ya encontró a su destinado?—Pregunto desconcertando al omega.

—¿Que tiene que ver eso con esto?—Musitó a la defensiva con el ceño fruncido.

—Mas de lo que crees ¿Lo hizo o no?—Inquirió nuevamente con seriedad.

Min lo pensó unos momentos hasta que finalmente suspiro.

—Si... Lo encontró.—Confeso.

Hoseok se sorprendió pero al instante muchas dudas lo atacaron.

—¿Quien es?

—Sinceramente, no tengo idea.—Susurro abatido—Jimin nunca me dijo quien es su alfa pero tengo la sospecha de que en realidad no lo recuerda.

El beta hizo un mueca observando al pálido sin comprender.

El omega mordió su labio a antes de mirar a cualquier punto menos al pelirrojo.

—Yoongi...

—El día que Jimin conoció a su alfa...—Comenzó a contar aún mirando a la nada—Fuimos a una fiesta en la casa de una chica popular del instituto llamada Irene. Al principio me negué pero Chim estaba emocionado por ir así que acepté para acompañarlo, no debí distraerme...—Musitó con amargura—Lo perdí por dos horas y media, cuando volvió estaba muy borracho y apenas podía pararse por su cuenta. Me sorprendió cuando me contó que había encontrado a su alfa destinado, estaba tan feliz que incluso parecía que sus ojos irradiaban corazones.

Yoongi recordó ese día y automáticamente una sonrisa melancólica se formó en su rostro.

—¿Que sucedió después?—Animo el beta a qué continuara.

La sonrisa en el rostro del omega se borró al recordar los siguientes días a ese.

—Chim fue a buscar a su alfa al día siguiente pero no encontró ningún rastro de él. Pregunto por todas partes y nadie sabía de quién estaba hablando, el maldito desapareció de la faz de la tierra como un jodido fantasma.—Apretó los puños con ira contenida—Nunca volvió a saber nada de su alfa y buscarlo otra vez sería más inútil que antes porque estoy seguro que Jimin no recuerda su nombre ni como lucía.

Hoseok pensó detenidamente la información que Yoongi acababa de proporcionarle.

—¿Estás seguro que no lo recuerda?—Pregunto con cautela.

El omega asintió.

—En cada ocasión que le pregunte me dijo una cosa diferente.

—¿Una cosa diferente?

—Si, en la primera ocasión dijo que su alfa tenía un tatuaje en la muñeca, la segunda vez que pregunte me dijo que en realidad no tenía ningún tatuaje pero si un piercing en la nariz y después de eso dijo que en realidad el piercing era en la ceja. Ya no se si creerle o no.—Expreso estresado.

Se quedaron en silencio pensando en algo que pueda serles útil.

—¿Por qué mimi se puso así cuando nombramos a Jungkook?— Preguntó Jung dándose cuenta de ese detalle.

—Ayer cuando llegue los encontré a punto de follar en este sofá—Dijo como si nada.

—¡¿A punto de follar?!

—Si. Supongo que ambos quedaron bajo los efectos del celo y eso los llevo a eso. Eche a Jungkook y Jimin se puso como loco.

—¿A qué te refieres con decir que se puso como loco?

—Comenzó a gritar que Jungkook era su alfa y que él no lo quería porque lo rechazó—Contó tomando su barbilla pensativo.

—¿Que él que?—Abrió los ojos asombrado.—Yoongi ¿No pensaste en la posibilidad de que Jungkook sea-

—Si lo hice—Interrumpió—Pero eso sería imposible.

—¿Estas cien porciento seguro de eso?—Pregunto con desconfianza.

—Si muy seguro—Afirmo.

El silencio nuevamente reino y notaron que ya no se oían gritos ni objetos siendo destrozados.

Se observaron sorprendidos y con cautela caminaron hacia la habitación del rubio. Min abrió la puerta con mucho cuidado, primero asomando su cabeza por si acaso y luego entrando al cuarto. Buscaron al omega quien estaba durmiendo en el suelo en posición fetal.

Hoseok levanto al rubio siendo cuidadoso de no despertarlo y lo arropó en su cama. Yoongi se encargo de limpiar los destrozos.

Nuevamente salieron sin emitir ningún sonido y suspiraron al estar alejados.

—¿Que haremos con Jimin?—Pregunto a punto de irse.

—No falta mucho para que su celo termine, hay que tratar de hacerlo comer y mantenerlo tranquilo.—Dijo acompañando al beta hacia la puerta.

—Bien, vendre mañana temprano para ayudarte en caso de que vuelva a alterarse.

—Esta bien, buenas noches beta descerebrado.

—Igualmente omega malagradecido.—Se despidió caminado hacia su departamento.

Yoongi entro a su hogar y camino a la habitación de su mejor amigo. Apoyo su mano en la puerta y suspiro con tristeza.

—Prometí que te cuidaría y estoy fallando de nuevo Chim... No quiero verte sufrir otra vez.

Con los ojos cristalizados y un gran pesar se alejo, rezando internamente por poder conciliar el sueño.

¡Tu eres mi papá omega! • KOOKMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora