⛓️ 𝑴𝒚 𝒍𝒐𝒗𝒆𝒍𝒚 𝑴𝒐𝒏𝒔𝒕𝒆𝒓 |𝑪𝒉𝒂𝒏𝑴𝒊𝒏

𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 3

Félix estaba en el trono, llorando de nueva vez, ¿Por qué el mundo era tan cruel?, Tal vez por eso había una bestia rondando por el reino y matando a las personas.

Si su madre no lo hubiera comprometido con Jisung estaría en estos momentos a lado de Seungmin, la persona que si quería y sobre todo que era un doncel.

Era muy difícil encontrar a un doncel, eran un regalo de los dioses pero desde hace años atrás dejaron de aparecer personas así.

Ver a un doncel era muy raro pero se les cuidaba de igual forma al ser un regalo del cielo, Kim era uno de ellos pero nadie lo sabía, su madre le había dicho que nunca dijera lo que era realmente, ¿Por qué?, Ni el mismo Seungmin sabía pero obedecía a su madre.

Sunmi hizo presencia en el trono viendo a su hijo decaído, se acerco a él y se sentó a su lado tomando su mano.

--- ¿Qué tienes Félix?, ¿No estás feliz de ser príncipe? --- pregunto su madre.

--- Lo estoy solo que... --- guardo silencio, no podía decirle a su madre que un sirviente del castillo le rompió el corazón.

--- ¿Que pasa?, Sabes que puedes contar conmigo porque soy tu mamá.

El pelo gris se quedó en silencio, miro a su madre y se levantó dispuesto a irse pero las palabras de la reina lo detuvieron.

--- ¿Es por Seungmin o como se llame? --- dijo secamente.

--- ¿Que?

--- ¿Crees que no me iba a dar cuenta?, Todos en el castillo están hablando de eso, el príncipe del reino con un sirviente, ¿Por eso estás así?

Lee se quedó en silencio, no podía negarlo porque era verdad pero en esos momentos temía que su madre hiciera algo malo.

--- Félix, me estás obligando a hacer algo que no quiero... Y irás con tu padre de casería.

--- No voy a ir solo porque me mandes, que seas mi madre no te da derecho a decidir en mi vida --- respondió el menor.

--- No lo digo como tu madre, te lo estoy diciendo como reina, te vas con tu padre porque yo te lo estoy diciendo y si te niegas a hacerlo creeme que la cabeza de ese sirviente colgará de un árbol --- amenazó la reina.

La mayor se dió la vuelta caminando hacia la salida, estaba furiosa y no le importaba dañar su reputación ante el pueblo.

Siempre la educaron así, si algo quería lo debía de hacer lo posible para conseguirlo sin importar que.

Félix bajo la cabeza, quería estar a lado de Seungmin pero era imposible, o su mano sobre su pelo haciendolo hacia atrás.

Camino entre los grandes pasillos del palacio hasta llegar a su habitación, empezó a empacar cada una de sus pertenencias, no se arriesgaría a qué su madre le hiciera algo a Kim, no se lo perdonaría nunca.

La cacería duraba dos semanas, dos largas semanas, sería un adiós, un triste adiós...